Huang Ping es un hombre que decidió no abandonar su casa en Jinxi, una zona de Shanghái, pese a la construcción anexa de una autopista. Ahora, su casa sigue donde siempre ha estado, pero se encuentra rodeada por dos carreteras. “Si pudiera retroceder en el tiempo, habría aceptado los términos. Parece que adiviné mal. Todavía me arrepiento un poco”, ha explicado el dueño de la casa. Será peor cuando la autopista comience a funcionar, ya que vivirá rodeado de tráfico
|
etiquetas: casa , rodeada , autopista