Juan Manuel siempre fue obeso. A los 12 años, y arropado por algunos amigos, decidió subirse a una báscula. La aguja se paró en 166 kilos. Lamenta haberse perdido los partiditos con los colegas en su Algeciras natal, los días de playa en la costa, las vueltecitas de adolescentes en las motos. Salió del colegio en 6º de Primaria. “Me echaron —puntualiza— porque no cabía en el pupitre”. Y se refugió en su casa. Ahí ha estado hasta los 30 años. Sumando kilos hasta llegar a los 307 y convertirse en la persona más obesa de España.
Comentarios
¿Si hacen torreznos y chicharrones para celebrarlo es considerado canibalismo?
Pobre la novia que tiene. Se ha ganado el cielo.
#4 Lo de tener que asearle después de ir al baño me ha matado. Yo ya no se si eso es amor, abnegación o qué.
#9 pues no te extrañe que cuando se acaben las operaciones la deje por otra más delgada. La vida es así de jodida...
#4 una chica con suerte, siempre tiene un orgasmo.... cuando el se quita de encima
Mi vida con 300 kilos, spanish version.
¿Cómo puede un crío de 12 años pesar 166 Kg?
Es decir... vale que haya adultos dejados con su alimentación, pero mientras son críos están a cargo de otras personas que se encargan de su dieta (alimentación, ejercicio...) , controles pediátricos y profesionales sanitarios que advierten a los padres de que algo no está bien con el desarrollo del niño y tratan de ponerle remedio.
Todo ha fallado en este caso: ha fallado la educación nutricional de los padres (que es algo bastante común y perdonable, pero que se puede corregir), pero es que también han fallado los controles (que no se cumple los 12 y por arte de magia pesas 166 kg, es algo que se viene arrastrando de antes) y/o ha fallado la voluntad de los adultos implicados.
Le han robado la infancia y la adolescencia. Con todo el amor y toda la aceptación que quieras. Pero le han robado la infancia y la adolescencia.
Hace poco salió una noticia que los gitanos vivían menos años que la media española , ves a este tipo y comprendes porqué
“Le echaron del colegio porque no cabía en el pupitre”, claro que sí.
Pues a ver qué hace con los tatuajes.
El estereotipo de gaditano más apreciado en el norte en todo su esplendor.
#1 No pillo el chiste amigo.
#2 por desgracia no es un chiste.