Hace 15 años | Por Tanatos a abc.es
Publicado hace 15 años por Tanatos a abc.es

Con él llegó la revolución y en un tiempo record estalló la «swatchmanía». Las piezas de Swatch comenzaron a cotizarse como obras de arte y vimos a sesudos biólogos, respetables banqueros, reyes, deportistas, jefes de Estado o cantantes rock, unidos por sus muñecas.La fiebre Swatch ha llegado a convertir casi en fetichistas a quienes la padecen, hasta el punto de montar auténticas colecciones en torno a determinados modelos.