Diez motivos para echarse unas risas a cuenta de un asunto tan serio como que somos el último país de nuestro entorno en mantener a un militar no electo en la Jefatura de Estado: Legitimidad de origen, utilidad social, protocolo, permanencia, replicación, prestigio, estabilidad, libertad, austeridad y sinceridad. Libertad de expresión sería poder reirse de lo importante sin miedo al odio oficial.
|
etiquetas: monarquía