Estaba sentado en casa de mi hermano este verano cuando vi algo sospechoso: una caja en su sala de estar con las palabras "Secret Hitler". A su regreso, le pregunté, señalando la caja. "¿En nombre de Dios qué es eso?" "Es un juego de mesa", dijo, rodando los ojos.

He visto esta tendencia desafortunada - que esperaba fuera sólo una moda pasajera - continúe plagando dispositivos en 2017, y parece que todavía estamos en peligro de perder una de las características más esenciales que nuestros teléfonos tienen hoy que ofrecer. [] En cuanto a los auriculares USB-C, ha pasado un tiempo desde que comenzamos a hablar de auriculares que no necesitan el conector de 3,5 mm, y hasta la fecha, apenas hay opciones dignas de consideración, ya sea Lightning o USB-C.

Encontré una vieja caja de cerillas en un escritorio que parece ser de los años 60, su portada es un reflejo de días mejores. Nadadores retozando en la piscina cubierta de un complejo. Ahora un escenario de basura y sillas mutiladas. Semanas más tarde vi unas postales viejas en eBay, del tipo que terminan en álbumes familiares, atrapadas en alguna caja en el ático. Efímeras, desechables, sólo servían para un propósito, para que alguien supiera "Estoy aquí, estoy pensando en ti". En los últimos años, he vuelto a los lugares de las postales.