Según la especie, pueden vivir de 3 a 15 años en cautividad, por lo que es importante asumir este compromiso a largo plazo. Tener caracoles en cautividad está ganando atención entre quienes buscan una alternativa diferente y convivir con un animal tranquilo, de bajo mantenimiento y con cierto encanto particular. Pero, aunque puedan parecer fáciles, tener caracoles requiere informarse muy bien, entender los riesgos, conocer la legislación vigente y preparar un hábitat adecuado.