Los vecinos del barrio madrileño de Opañel vuelven a movilizarse para reclamar al Arzobispado el cambio comprometido de una valla y poder abrir a los habitantes los terrenos públicos que aún permanecen en el interior de una iglesia del distrito de Carabanchel. Tras cuatro años de protestas, los vecinos llevan esperando más de cinco meses a que se inicien las obras pero el Arzobispado dice que está a la espera de llegar a un acuerdo con el Ayuntamiento sobre quién paga el cambio de ubicación de la valla.
Comentarios
Ahora que viene la declaración de la Renta, es bueno acordarse de ellos.
Pues que la pague el que la puso mal, no? O no les importó pagar cuando la pusieron y se apropiaron de esos terrenos.... Hdlgp.
Menos mal que la han parado, porque viendo el dibujo de la cripta, que cosa más fea y con menos gusto. https://www.eldiario.es/madrid/victoria-Opanel-Kikos_0_706580077.html
Se va por la noche con una radial
Vaya con la valla.
#6 ...un solar en construcción
Solo con el nombre ya suena a mafia y lo peor es que estos señores tienen casilla en la declaración y no la investigación en campos STEM
Se nota que el ayuntamiento está cómodo con la situación
#3 Si. Alberto Ruiz Gallardón y Ana Botella han estado muy cómodos cediendo terrenos públicos a órdenes religiosas y no controlando el cumplimiento de los acuerdos. Es comprensible, Álvarez del Manzano tampoco lo hacía.
Supuestamente se iba a construir un jardín,o al menos eso es lo que decían en estab la iglesia. Los terrenos los iban a ceder a servicio público. Al final construirán unos nichos de pago, que supongo que se enterraron ahí los fanáticos de la Orden, porque en Carabanchel ya está el Cementerio Sur, el de San Isidro, el de los Ingleses, el que está en la calle de la Verdad, y alguno que me estoy dejando.
Quien está cómoda es la iglesia. Hasta que no llegue una notificación de sentencia judicial no recurrible de multa que les va a costar más dinero que la obra porque el ayuntamiento la vaya a tener que ejecutar no harán nada.
Y piensa lo que vas a decir, porque soy del barrio y hes estado protestando ahí cada domingo hasta que por trabajo me mudé a Barcelona hace dos años.