El equipo de arqueólogos que estaba excavando en las proximidades de Stonehenge, el famoso sitio neolítico que se encuentra cerca de Amesbury en Inglaterra, ha descubierto el esqueleto de un niño de dos o tres años enterrado con su juguete favorito, una pequeña escultura que representa un erizo. Estaba situado a mitad del cuerpo del niño como si lo sostuviera con las manos en el momento de la sepultura. Más fotos:
www.repubblica.it/2006/05/gallerie/scienzaetecnologia/bimbo-giocattolo