Un sobreviviente de la represión ilegal de la dictadura declaró ayer que el ex capellán policial Christian Von Wernich “nos decía cómo aliviar los dolores de la picana” y aseguró que el cura “también nos indicaba quedate quieto, que en dos o tres días los dolores se te van a ir”. Dijo que, cuando iba a ser liberado de su cautiverio, el cura de la Iglesia Católica dijo en voz alta: “Antes de que se vaya podríamos pasarlo otra vez por la máquina”.
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