Hace 3 años | Por pingON a francis.naukas.com
Publicado hace 3 años por pingON a francis.naukas.com

«Nuestro encéfalo es especial, todos ellos lo son. ¿Cómo no maravillarse ante el prodigio arquitectónico que ha permitido que percibamos el mundo, interactuaemos con él y lo experimentemos? Todo ello creado sin un director de orquestra que ordenara nuestras neuronas que, contra todo pronóstico, han sido capaces de conectarse a la perfección (o mejor aún: a la imperfección, que nos ha ayudado a sobrevivir). Ha sido esta inexactitud la que nos ha traído algunos regalos sorpresa que hemos transformado en pilares centrales de nuestra sociedad, como