El desierto del Sahara, hace unos 10 mil años, era una región verde y fértil con ríos, lagos y abundante vida salvaje. De hecho, pinturas rupestres y fósiles indican que estuvo habitado por animales y humanos en un entorno mucho más húmedo.  En la actualidad, el Sahara está experimentando un giro sorprendente que alberga ecos de su pasado: sus arenas están siendo salpicadas por un verde inesperado.  
      | 
 etiquetas:  sáhara ,   lluvias ,   renacimiento