El enemigo lleva unos cuantos años durmiendo en casa y nosotros sin saberlo. Tiene 16 años, va al instituto, lee, debate las noticias, se conecta a internet y ve menos televisión. Está presente en tres redes sociales. De vez en cuando va con sus compañeros a manifestaciones en defensa de una enseñanza pública de calidad. Hace tiempo dejó de hacer botellón. Se reúnen en la calle o en sitios ocupados porque no hay centros ni equipamientos culturales para ellos. En el metro lee 20 Minutos que le parece más interesante que Qué! Está preocupada por
Comentarios
Yo también tengo al "enemigo" en casa, en vez de Lucia se llama Ana y me siento muy orgullosa de ella y de todos estos jóvenes que con apenas 15 o 16 años luchan y reivindican sus derechos. Me parece que todos ellos causan un poquito de miedo a la clase política. No se van a conformar, no se quedarán quietos y muchas veces nos dan lecciones a los mayores.
el despertar de la conciencia.