Hace 10 años | Por kamon a economista.cat
Publicado hace 10 años por kamon a economista.cat

Liquidar un negocio o cerrar una empresa no es una decisión fácil, pero alargar un proyecto que sólo hace que acumular deudas no tiene ningún sentido. Llega un momento en que el propietario o empresario plantearse si conviene reestructurar, vender o cerrar para no poner más en peligro el patrimonio personal.