De pronto toca ir a otra parte, ir a buscarse la vida a otro país. No me entusiasma la idea, porque implica empezar de nuevo. Vender los muebles, empacar maletas. Dejar la gente a la que uno quiere, y todo lo que uno ha construido alrededor en los últimos años. Es muy duro, pero yo creo que es la mejor solución.
Comentarios
Leedla... hasta EL FINAL
eso es tener mala suerte
Muy bueno, demostración empírica de que nunca aprenderemos...