Hubo un meneante con una obsesión similar (entonces acuñé el término rusobsesión) y un delirio respecto a la inminente destrucción del objeto odiado (entonces le di el beneficio de la duda) que desapareció cuando su esperada llegada del armagedon no se produjo.
Me imagino que se habrá tomado una vida sabática o un tiempo indeterminado en una casa de reposo aunque no descarto su internación en una clínica psiquiátrica.
Le echo de menos porque tenía la virtud de poner a prueba mi templanza y despertar mi compasión.
Este sujeto en cambio sostiene un delirio místico en que el objeto odiado se equipara a un demonio poderosos cuya misión es pervertir toda la creación de su dios, poniendo a hijos contra padres, hombres contra mujeres, izquierdas contra izquierdas, fascistas contra derechas, madridistas contra barcelonistas, concebollistas contra sincebollistas, perros contra gatos, materia contra antimateria.
Un delirio complejísimo de tratar, diría yo intratable y posiblemente irrecuperable, a diferencia del de Mysto.
#12 A mi lo que no me cuadra es que por mucho que utilicen mulas, al final el dinero es traceable y llegará un punto que se tendrá que sacar de un cajero y este les tendrá que dar en mano a los delicuentes.
#12 Tienes que tener en cuenta dos cosas: Nadie está plantando cara a esos indecentes y ya llevan mucho tiempo haciendo lo que quieren, aunque nunca a tan gran escala y que las policías y la GC nunca va a proteger a quien intente responder, al contrario, siempre van a defenderles. Como diría otro de esos hdlgp ¿Casualidad? No lo creo
#12 Que las instituciones no protejan la propiedad privada es un problema, que tampoco tengan un mecanismo efectivo para cumplir las normativas, sobretodo si es un derecho constitucional básico, es otro.
Yo no he hablado del padrón, pero digo yo, que si se te registra alguien sin permiso del propietario, ¿No debería la autoridad hacer cumplir la ley?
CC a #16
#10#12 No discutais, en estás situaciones acaban deteniendo siempre a los mínimos, tanto de un bando como de otro.
Si han parado grupos enteros de ultras con armas, lejos de sus casa, que haya solo 6 detenidos es muy preocupante.
#12 Adeje es una localidad del suroeste de Tenerife, y el sitio en cuestión es una pequeña aldea costera conocida como el "Puertito". Un lugar privilegiado y precioso, cercano a Playa Paraíso y Armeñime.
#12 Todo lo que quieras, el artículo habla de que se ha abandonado la distribución de hidrógeno en USA, y ni siquiera menciona algún problema operativo. El hidrógeno sigue siendo el futuro en países actualmente dependientes del petróleo, un combustible universal, que si se obtiene mediante renovables como la fotovoltaica o eólica es limpio y barato, tanto que posibles pérdidas son perfectamente asumibles. El artículo habla de USA, la madre que parió a las mayores empresas petrolíferas a nivel mundial ...
#12 No, no puedes restaurar discriminaciones pasadas discriminando nuevamente a personas en base a su sexo.
Hoy, legalmente, en España el hombre tiene menos derechos que la mujer.
Eso no repara que hace unos lustros la mujer tuviera menos derechos. Lo que hace es crear una nueva discriminación en base a algo que no se elige, el sexo.
#12 Depende. Un caso real: hace nada necesitábamos abrillantar un suelo para la casa del pueblo (no pulir, pasar la máquina esa por el terrazo). Pues nos las vimos y nos las deseamos para encontrar uno que tuvo que venir desde Huesca capital y con dos semanas de tiempo porque en toda la comarca no había nadie que hiciera un curro que nos hicieron en un día.
Al final, y me incluyo, a nadie nos gustan los trabajos de agachar el lomo.
¡Menuda obsesión!
Hubo un meneante con una obsesión similar (entonces acuñé el término rusobsesión) y un delirio respecto a la inminente destrucción del objeto odiado (entonces le di el beneficio de la duda) que desapareció cuando su esperada llegada del armagedon no se produjo.
Me imagino que se habrá tomado una vida sabática o un tiempo indeterminado en una casa de reposo aunque no descarto su internación en una clínica psiquiátrica.
Le echo de menos porque tenía la virtud de poner a prueba mi templanza y despertar mi compasión.
Este sujeto en cambio sostiene un delirio místico en que el objeto odiado se equipara a un demonio poderosos cuya misión es pervertir toda la creación de su dios, poniendo a hijos contra padres, hombres contra mujeres, izquierdas contra izquierdas, fascistas contra derechas, madridistas contra barcelonistas, concebollistas contra sincebollistas, perros contra gatos, materia contra antimateria.
Un delirio complejísimo de tratar, diría yo intratable y posiblemente irrecuperable, a diferencia del de Mysto.