El PP prefiere que el alumnado vaya a la privada, por eso lo hace. De todas formas las peticiones de CSIF están infladas aunque desde luego servirían para mejorar la enseñanza siempre que se utilizaran bien.
P.D. Muchas veces los sindicatos defienden lo indefendible, v.gr. a personas que no merecerían trabajar en un centro educativo ni gratis.
Se fue para vivir mejor y no creo que se le tenga que pagar los gastos a alguien que se fue por gusto. Que hubiera vuelto antes o se hubiera ido a vivir a la España vaciada que los alquileres también son bajos. Siento ser tan duro, pero los casos se repiten y nadie piensa que le puede pasar también a él.
Saldría más barato pagarle una residencia y que estudiara en EE.UU. o en otra universidad española. No hay que buscar la rentabilidad, pero este caso clama al cielo. Que la oferte una universidad privada.
Lleva años pasando. Misma experiencia en el año 1986 en Martín de la Jara, subieron el precio del alquiler de un piso al triple. Me fui a vivir al pueblo de al lado. Lo curioso es que fui tutor del hijo del dueño.
Denunciada por agresión a dos agentes. La denuncia por agredir a un agente se está volviendo habitual por parte de los cuerpos de seguridad del Estado. Estas denuncias hacer parecer que alguno lo aprovecha para abusar de su autoridad y en algunos casos lo utilizarían para percibir una indemnización por parte de la "agresora".
Rusia siempre llevará las de ganar porque a Putin le importa un comino lo que les pase a sus ciudadanos y además estos no se atreven a protestar para evitar "accidentes".
Con todos mis respetos, esto es lo mismo que as.com/actualidad/sociedad/la-ciudad-turistica-de-alicante-que-ha-sido , ¿gente pasando necesidad y no pueden coger unas gallinas y hacer comida para dar de comer al que no tiene?Una minoría intenta imponer su criterio a una mayoría que no puede permitirse comer pulpo por su elevado precio. Si se crían otras especies, ¿porqué no pulpos?. Imponer la moral de unos pocos a la moral mayoritaria es para hacérselo mirar.
No tenemos arreglo. Dejé más de cincuenta libros (de interés, no enciclopedias) en un banco para ver si alguien los recogía con un cartel diciendo que era para que los leyeran y los volvieran a dejar una vez leidos, para que alguien más los aprovechara y que por favor nadie se llevara más de dos a la vez. Un niño cogió uno y se lo llevó, y después de un rato una señora de más de 70 años los metió todos en su carro de la compra y se los llevó. No parecía que fuera a leer ninguno. Este es el nivel. No vuelvo a dejar ni un libro más en la calle para que lo lean.