Parece como si para ser de la directiva de la CEOE, un requisito fuera tener impulsos delictivos, insensibilidad y probabilidad cierta de cometer delitos. Porque si no no se entiende. Ahí queda la historia del delincuente Díaz Ferrán –expresidente de la CEOE--, un experto en hacer quebrar empresas y en sacar provecho a costa de los trabajadores, eso sí, dando consejas maravillosas, por ejemplo: “¡Hay que trabajar más y ganar menos!”, mientras él se forraba de forma ilegal y dejaba en la calle a miles de empleados de sus varias empresas.
|
etiquetas: ceoe , gentuza