"Hay más riesgo en desalojarles que en mantenerles", asegura la delegada de Gobierno en Castilla - La Mancha, Milagros Tolón."Están controlando las entradas y salidas para que no acceda más gente y para que no haya ningún conflicto", explica Tolón. "Especialmente está vigilada la A-43, que es la autovía que comunica Ciudad Real con Valencia". De este modo se evita "el efecto llamada", aclara la delegada de Gobierno.
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