En principio, no podemos generalizar sobre los efectos. Las consecuencias dependerán, sobre todo, de la frecuencia y la magnitud con la que se mantiene la vejiga llena. Aguantarse las ganas de orinar de vez en cuando no va a tener consecuencias apreciables para la salud. El problema radica en que (por circunstancias laborales u otros factores) retrasar la micción sea algo más frecuente y cotidiano. En este último caso sí que se ha comprobado que aparecen riesgos apreciables.
Comentarios
Es mentira eso de que no pueden explotar los riñones por aguantarse. Al abuelo Simpson le pasó .
#2 En la noticia lo mencionan
#2 Aquí están
¿Patrocinado por Tena Lady?
Lo mas sano es beber y orinar mucho.
La retención nunca puede ser saludable.