Hace 6 años | Por ccguy a es.gizmodo.com
Publicado hace 6 años por ccguy a es.gizmodo.com

Existe en el planeta un lugar tan silencioso que es capaz de absorber la mayoría de los sonidos. Ese silencio provoca tal tensión en nuestro cerebro que puede llevar a la locura. La cámara de la que hablamos es un espacio artificial, una habitación escondida y creada por la mismísima Microsoft. Hablamos de lo que se conoce como cámara anecoica, una sala diseñada específicamente para absorber en su totalidad las reflexiones producidas por ondas acústicas o electromagnéticas en cualquiera de las superficies que la conforman.

Comentarios

D

Y un sordo?

Jesuo

#1 ¿y las cámaras de aislamiento sensorial que se venden como métodos de relajación? como decía #4 parece poco creíble....aunque no sé...(irónicamente) quizás si pasan mucho tiempo, al final salen de esas salas como en la película Viaje alucinante al fondo de la mente

https://www.filmaffinity.com/es/film151060.html

http://www.dailymotion.com/video/x2h3w5b Aqui se puede ver la peli en cuestión

dando pie a pensar que somos distintos a las bestias precisamente por el ruido "inteligente" que generamos, una película e idea que pudieran usar algunos contrarios a la evolución de Darwin y afines al creacionismo...en los 80 se estilaba mucho el crear películas que pudieran ser usadas como excusas por los de las religiones para justificar sus creencias, esta película, podría ser una de esas excusas, otras como estas, podrían ser la propia noticia y artículo de este hilo.

Decir lo que #12 dice creo que es incorrecto, ¿como va a ser desagradable algo que discrimina el cerebro de manera natural, que es intrínseco a cualquier estado de nuestro cuerpo? tus latidos, tu respiración etc... haced la prueba...cuando no podáis dormir, poned la oreja sobre vuestro brazo y no sobre la almohada, empezareis a escuchar vuestros latidos, respiración y....rápidamente os quedareis dormidos, y no precisamente por que sea desagradable el escuchar tus propios "ruidos".

k

#14 Son las sensaciones que tuve cuando pasé un rato dentro de una cámara anecoica, vamos que hablo por mi experiencia. Igual a otros no le pasa.

Jesuo

#15 Quizás te autosugestionaste, valga la redundancia, haz la prueba de poner la oreja en el brazo cuando intentes dormir y me cuentas....pero no babees mucho

k

#16 No creo, era la primera vez que entraba a una cámara anecoica, no sabía lo que pasaba ahí realmente, y si, a veces escucho mis latidos cuando intento dormir del lado izquierdo, pero acabo cambiando al lado derecho

TocTocToc

¿Cuántos se han vuelto locos por estar más de una hora?

jorso

¿Hay algo peor que el sensacionalismo en la prensa?
Si: el cienciacionalismo de gizmondo.

Jesuo

¿Sera por eso que a los locos los meten en salas acolchadas e insonorizadas?

#10 te secundo la idea

P

Bulo... fake...

BiotSavart__

Pues este chico aguanta perfectamente.

Feindesland

Glorioso lugar para recluir a unos cuantos miembros de una etnia local que se me pasa pro la cabeza...

lol lol lol

Ripio

Por eso existen hace un chorro de años los tanques de aislamiento sensorial y son terapéuticos.

Robus

Se queda allí esperando a ver cuando empieza a funcionar el invento...

o

A los 50 minutos viene el guardia a decirte que se te ha acabado el tiempo...

k

En mi uni tienen un cámara anecoica y otra reverberante desde hace años, imagino que igual que cualquier universidad o empresa que trabaja con el sonido y seguro que en ninguna de ellas puedes aguantar más de 10 minutos sin sentirte incómodo, vamos que porque la más silenciosa sea la de Microsoft no quiere decir que en las otras no te pase exactamente lo mismo.

ccguy

#3 Bueno, pero esta de Microsoft asegura batir un record en aislamiento, no todas las cámaras anecoicas son iguales.

k

#8 Ya, ya. Pero en ninguna aguantas más de media hora sin ponerte nervioso porque empiezas a oir todos los sonidos que produce tu cuerpo al respirar, tragar saliba, el corazón, y cuando hablas, oyes lo que dices por las vibraciones que se producen en la cabeza, no porque te oigas por los oídos. Es una sensación bastante desagradable pasado un tiempo.