Hace 3 años | Por Ripio a elretohistorico.com
Publicado hace 3 años por Ripio a elretohistorico.com

Durante el Renacimiento en España hubo una gran colectánea de chistes hecha por Luis de Pinedo y amigos, con grandes historias jocosas, pero esta vez nos vamos a trasladar a la Península Italiana, donde el eminente humanista Poggio Bracciolini escribió un volumen titulado “Liber Facetiarum” donde se contienen anécdotas, historias jocosas, y chistes de la época, algunos de los cuales pueden sobrevivir bien el paso del tiempo. Otros en cambio, son más contextuales.

Comentarios

themarquesito

#2 También tiene su coña el del cura preguntando que dónde están las putas

D

#3 #2 A ver, mi padre es cura y mi madre prostituta, y me siento muy ofendido por esto que entendéis por 'humor'. ¿Dónde inscribo a mi asociación de afectados para las subvenciones?

woody_alien

#7 ¡Viva la Guardia Civil!

Ripio

#7 Refranero:
"Nunca digas de este agua no beberé, ni este cura no es mi padre".
https://es.wiktionary.org/wiki/nunca_digas_de_este_agua_no_beber%C3%A9,_ni_este_cura_no_es_mi_padre

Las subvenciones fueron desestimadas en el Supremo.

Cuchipanda

#12 "Nunca digas de este agua no beberé, este cura no es mi padre ni esta picha no me cabe". x D

D

#2 los curas llevan siglos siendo una gran fuente de humor jocoso.

D

#10 #11 Si te mola el humor antíguo, consigue las fabulas de Ambroise Bierce, junto con el Diccionario del Diablo del mismo autor.

Delapluma

#2 Ese yo lo había leído en un libro muy simpático que me vendió hace poco mi camello, que se titula "Cuentos inmorales holandeses". También cuenta la historia de una jovencita que tuvo la desgracia de pillarse un dedo con la puerta, el dedo se le hinchó y su madre le dijo que se fuese al médico.

El médico se hallaba en aquel momento jugando la partida de cartas con unos amigos; era la sobremesa, había comido y bebido bien, y no tenía ganas de levantarse a examinar a nadie, así que cuando le dijeron que venía una jovencita con un dedo hinchado, se molestó, y en medio de una carcajada, gritó: "¡anda y que se meta el dedo en el coño!"

La joven, que sabía mucho de ordeñar vacas y hornear pasteles, pero muy poco de medicina, pensó que las palabras del médico eran una orden, de modo, al volver a su casa en el carro, se metió la mano entre las piernas y el dedo en el coño. El calor de su cuerpo rebajó la hinchazón, y la joven regresó a su casa profundamente feliz y sonriente. Todos los días no dejaba de mirarse los dedos, a ver si alguno se le hinchaba y repetir el tratamiento.

Como una semana más tarde, la madre de la muchacha le dio una cesta llena de frutas para que se la llevase al médico, "en agradecimiento por haberte curado". La joven se llegó a casa del galeno y le entregó la fruta. Aquél día llegó en horas de visita, y el médico estaba de buen humor. Cuando vio aquel regalo, se sorprendió:

Delapluma

#2 #2 Ese yo lo había leído en un libro muy simpático que me vendió hace poco mi camello, que se titula "Cuentos inmorales holandeses". También cuenta la historia de una jovencita que tuvo la desgracia de pillarse un dedo con la puerta, el dedo se le hinchó y su madre le dijo que se fuese al médico.

El médico se hallaba en aquel momento jugando la partida de cartas con unos amigos; era la sobremesa, había comido y bebido bien, y no tenía ganas de levantarse a examinar a nadie, así que cuando le dijeron que venía una jovencita con un dedo hinchado, se molestó, y en medio de una carcajada, gritó: "¡anda y que se meta el dedo en el coño!"

La joven, que sabía mucho de ordeñar vacas y hornear pasteles, pero muy poco de medicina, pensó que las palabras del médico eran una orden, de modo, al volver a su casa en el carro, se metió la mano entre las piernas y el dedo en el coño. El calor de su cuerpo rebajó la hinchazón, y la joven regresó a su casa profundamente feliz y sonriente. Todos los días no dejaba de mirarse los dedos, a ver si alguno se le hinchaba y repetir el tratamiento.

Como una semana más tarde, la madre de la muchacha le dio una cesta llena de frutas para que se la llevase al médico, "en agradecimiento por haberte curado". La joven se llegó a casa del galeno y le entregó la fruta. Aquél día llegó en horas de visita, y el médico estaba de buen humor. Cuando vio aquel regalo, se sorprendió, y la chica le explicó que era por su tratamiento de la semana pasada, que dio tan buen efecto.

—Cuando usted me recomendó que me metiera el dedo en el coño, ¿recuerda? — El médico sonrió, algo avergonzado. La joven fue a dejarle la cesta encima de la mesa, y al hacerlo, se inclinó tanto, que dejó el escote muy cerca de la cara del doctor. Una naranja tuvo a bien caerse y rodar por el suelo; prestamente, la joven se inclinó a cogerla. Escote y culo produjeron en la entrepierna del médico un efecto muy parecido al del dedo de la muchacha.

—Debe ser contagioso eso que tuviste — le dijo —. Porque mira cómo me he puesto ahora mismo.

—No se preocupe por eso, doctor, que usted y yo conocemos el remedio para aliviarle — contestó muy sonriente la muchachita, que en el momento se alzó las faldas y procuró con todo placer alivio al buen doctor. Este no dejó de decirle que se pasase los próximos días, porque era fácil que se presentase una recaída y necesitaba contar con ella para curarse.

La joven volvió a su casa con una enorme sonrisa y le contó a su madre todo lo que había pasado. La madre, que tampoco sabía de medicina, pero sí de hombres, se alborotó y le gritó a su hija:

—¡Serás tonta! ¡Al meterse en tu coño, el doctor te ha quitado la honra!

—¡Ca, madre! — replicó la joven — ¡Me cago en la honra que está tan cerca del culo!

Ripio

#15 😂 😂 😂

Kyoko

En Twitter una cuenta sobre historia romana publico chistes de hace unos dos mil años. Uno que sigue siendo gracioso era este:
Un hombre va al barbero. El barberole pregunta que como lo quiere.
El cliente le responde "en silencio".

themarquesito

El Liber Facetiarum era una referencia muy conocida entre los humanistas españoles, por cierto. A Bracciolini lo mencionan Cristóbal de Villalón, Juan Justiniano, Juan de Arce de Otálora, y unos cuantos autores más.

El precursor del #umor

D

Tiene su gracia teniendo en cuenta el tiempo que ha pasado. Aunque personalmente soy más fan del humor romano, que era tan punzante y bruto como el actual. Un humor un poco chorra y adolescente. De hecho el meme que hace tanta gracia hoy a los crios que es llamar calvo a todo adulto viviente, ya le ocurría a Julio César con sus soldados:

https://historia.nationalgeographic.com.es/a/humor-roma-de-que-se-reian-romanos_12263

Eran mucho de vacilar con coñas de índole sexual y las que aludían a algún defecto físico:

En una ocasión en que Cicerón vio a su yerno Léntulo, que era de baja estatura, con una gran espada ceñida exclamó: "¿Quién ha atado a mi yerno a una espada?".

squanchy

Un hombre, cuya mujer había muerto en el río, iba a contracorriente a buscar el cadáver. Uno que lo vio se maravilló de ello y le aconsejó buscar corriente abajo. Respondió el hombre: “Así no la encontraría. Cuando vivía, llevaba tanto la contraria y era tan terca, y contraria a las costumbres de los demás, que muerta le llevará la contraria al río”

😂 No sabía que mi ex se había vuelto a casar.