A pesar de que la anguila europea está en peligro crítico de desaparecer, los restaurantes más selectos aprovechan la escasez para ofrecer su cría (la angula) como un plato de lujo.
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etiquetas: elitismo gastronomíco , alta cocina , soberanía alimentaria
A ver, pedazo de gilipollas, unos huevos fritos con patatas y chorizo le dan diezmil vueltas a las puntas angulas, "so capullo".
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Las simples Macrolepiotas (las proceras) están 10.000 veces más ricas que las cotizadas Amanitas cesáreas... Pero por un plato de amanitas cesáreas te cobran un disparate y las macrolepiotas proceras no llegan ni a los restaurantes....… » ver todo el comentario
Comerse a las crías o las huevas es ambientalmente insostenible. Las almadrabas capturan a los atunes justo en su viaje de reproducción.