Minutos después de la medianoche, cuando las noticias en la televisión confirmaban las primeras muertes por unas inundaciones sin precedentes en España, Saray Ruiz escuchó el timbre y corrió a la puerta. Sus dos hijos, de 5 y 10 años, aparecían custodiados por agentes policiales. El padre de Saray y abuelo de los menores, Francisco, había desaparecido. "A las seis de la tarde de ese día, mi padre había puesto a los niños en el coche y condujo hacia mi casa -a unos siete minutos-, pero la corriente hizo que se chocaran contra una palmera".
|
etiquetas: dana , valencia