Hace 14 años | Por Puski a youtube.com
Publicado hace 14 años por Puski a youtube.com

Lucas Murray, un niño inglés de 7 años, ha aprendido a utilizar el eco de los chasquidos que emite con la lengua para percibir la distancia, forma, tamaño y material de objetos que le rodean, de forma similar a como lo hacen los murciélagos. Más información y enlaces frescos (en inglés): http://en.wikipedia.org/wiki/Lucas_Murray

Comentarios

F

#4 Éste murio en enero

HaScHi

#15 Hombre, supongo que no es moco de pavo aprender a hacerlo, pero con lo que comenta #10 no creo que necesiten tener poderes especiales para aprenderlo.

D

"Soy Batman" (dicho con voz profunda y rápida)

HeavyBoy

¿Enlaces frescos? ¿Pero que mierda es esta?

Puski

#1 Quiere decir "noticias con no más de una semana". Muy constructivo el comentario, gracias.

HeavyBoy

#2 esto no es una lonja

HaScHi

Lo metes en una discoteca y las pasa putas

M

Epigenetica otra vez, y van...

TDI
Golan_Trevize

En hollywood ya están esperando a que se haga grande para contratarlo para protagonizar la próxima versión de Daredevil.

jomi_mc

Daredevil?

F

Impresionante. A diferencia de los demás, esta persona podrá orientarse en la oscuridad. Ahora mismo sólo tiene 7 años, pero quien sabe si con el tiempo será capaz de desarrollar más esta capacidad.

¿Tendremos todos los seres humanos esta capacidad escrita en nuestro ADN? ¿Tenemos dormido ese poder?

¿Alguien que sepa del tema puede decirmelo?

Gracias.

HaScHi

#12 Seguramente tú también podrías desarrollarlo si te tirarses años con los ojos cerrados. Es como hacer un balanceo de capacidades; lo que no usas en los ojos, lo usas en los otros sentidos.

F

#13 Eso es lo que había pensado al principio, pero despues de pensarlo durante un par de segundos llegué a la conclusión de que la respuesta no podía ser tan fácil, ya que no conozcos más ciegos con las misma capacidad.

b

#12 DAREDEVIL

Gry

#12 Hace un tiempo escuché que todos utilizamos esa habilidad de forma inconsciente, aunque no la tuviéramos muy desarrollada, al caminar en la oscuridad. Que cuando tenemos un espacio vacío delante se siente distinto que cuando tenemos una pared y que cualquiera lo podía comprobar vendándose los ojos y tratando de orientarse.