Doce años después de que se estableciera el actual récord de velocidad en un ferrocarril convencional, Iván Rivera nos explica los motivos por los que es complicado superar esta velocidad de forma significativa.
Hace décadas que se sabe que la alta velocidad en trenes es un disparate. También hace décadas que los aviones renunciaron a alcanzar velocidades máximas.
#11 Porque las ganancias en velocidad van acompañadas de incrementos espectaculares de costes. Al menos desde los 80-90 se sabe. Por algo la mayoría de países desarrollados jamás tuvo la intención de desarrollar una infraestructura de alta velocidad similar a la española.
Cuando se decidió hacer eso en España, ya había un estudio que mostraba que era mucho más eficaz realizar algunas mejoras que incrementaran la velocidad media de todo el sistema ferroviario, que emprender el faraónico proyecto de la alta velocidad.
Comentarios
Jodidamente interesante. Recomiendo la lectura para ingenieros e ingenieros no practicantes.
#1 y los que ponemos en el cv Que somos ingenieros pero es mentira?
#2 para esos también, por supuesto.
#3 por si acaso me lo había leído ya
#1 No te olvides de los aficionados.
Está muy bien descrito e interesante.Un buen aporte.
Y yo que pensaba en los límites legales al leer el titular. Demasiadas opos.
Así que el maglev es imbatible en velocidad por la ausencia de rozamiento. Muy interesante.
Hace décadas que se sabe que la alta velocidad en trenes es un disparate. También hace décadas que los aviones renunciaron a alcanzar velocidades máximas.
#8 "Se sabe"... tienes la cita de ese autor tan nombrado y reputado que se llama "se sabe"?
#9 No.
#8 ¿Por qué es un disparate? ¿Hace décadas desde cuándo?
#11 Porque las ganancias en velocidad van acompañadas de incrementos espectaculares de costes. Al menos desde los 80-90 se sabe. Por algo la mayoría de países desarrollados jamás tuvo la intención de desarrollar una infraestructura de alta velocidad similar a la española.
Cuando se decidió hacer eso en España, ya había un estudio que mostraba que era mucho más eficaz realizar algunas mejoras que incrementaran la velocidad media de todo el sistema ferroviario, que emprender el faraónico proyecto de la alta velocidad.