Juan de Cáliz, un converso, fue un zapatero de San Martín de Valdepusa denunciado por blasfemar por un obrero que trabajaba para él, Alberto Rodríguez. Sobre el 10 de julio de 1559, a eso del mediodía, Juan encontró al obrero durmiendo, y le preguntó qué había hecho desde el amanecer hasta entonces, a lo que el obrero contestó que se había sentado a trabajar después de misa mayor. Entonces Juan de Cáliz dijo: “al diablo la misa mayor”. El obrero denunció a Juan ante el cura, y éste le recomendó que se personara ante el inquisidor.
Comentarios
¿Es cierto que en el día de autos, blasfemó usted contra Dios, la Iglesia, y todos los santos, e insultó gravemente a su compañero José Pérez aquí presente?.
No señor juez, yo le dije: -"Pepe, por favor ten cuidado que me estás echando el plomo fundido por el cuello y me está resbalando por la espalda".
Juan de Cáliz, o sea Juan de Cádiz. Ambas grafías son corrientes en los siglos XVI y XVII
Se sacan la algunas conclusiones más . Que te podían condenar más, o menos, por lo que fuesen tus padres o tus abuelos. Que te podían condenar por tus costumbres , según hicieras o no hicieras. Algo hemos evolucionado.
Espero que despidiese al obrero fulminantemente.
#4 y que podías chulear y vaguear siempre que quisieras siempre y cuando fueras "cristiano viejo" y el otro "cristiano nuevo"....
Parece una redacción escolar, pero en fin, todo el mundo tiene derecho.
denunciado por blasfemar por un obrero que trabajaba para él, Alberto Rodríguez
¿El tatarabuelo del novísimo de la titiritesa?
Toma inspección de trabajo efectiva y fulminante