Claudia trabaja como camarera y denuncia que la empresa en la que es empleada solo la tiene contratada por 30 horas mientras realiza 45 cada semana. La joven afirma que esta situación se repite incluso en los periodos más tranquilos, y asegura que resulta imposible conciliar su vida personal con ese ritmo. Explica que muchos días sale del bar pasada la medianoche y al día siguiente debe volver para abrir el local. Según detalla, las horas extra no se pagan pese a que la dirección promete compensarlas más adelante.
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Como sociedad hemos de vigilar que esas cosas no ocurran, pero, joder, el primero que tiene que denunciarlo es la propia víctima. Que una cosa es echar unos minutillos de más y otra un 50% más de jornada.
Si es buena profesional, encuentra curro en una semana
Ah vale... que el juntaletras no sabe que las comillas se usan 1 para minutos y 2 para segundos.
Pero debería haberlo puesto con número, haber puesto un punto o algo que diera a entender que no son 45 segundos.
No es que sea para echarlo, pero no está bien hecho.