#7 Por lo que sé, se basan en unos algoritmos de éxitos previos. Por eso sus películas actuales se parecen todas porque repiten la MISMA fórmula. Su deseo de "industrializar" las ideas les lleva a absurdos con niveles muy criticables. Pero su músculo económico (el 50% del presupuesto de cualquier película hecha en Jolibú, se dedica a promoción mundial) permite colocar y presionar a todas las partes implicadas. En fin. Sin comentarios.
#8 No he leído nada sobre eso, pero me lo creo. Pero vamos, reescribir la Historia (con mayúsculas) y la historia (con minúsculas) normalmente es una &%%&/ gran M. Están mortalmente equivocados en sus planteamientos, esa es mi humilde opinión.
@Feindesland Odio desde lo más profundo de mi oscura alma la inclusión de personajes porque toca. Un niño, un negro, una lesbiana, etc. O la revisitación moderna de cuentos clásicos. El lobo se zampó a la abuela. Si no quieres no le cuentes ese cuento, pero no lo cambies (y el original era aun más bestia).
Dicho esto, no es lo mismo crear una historia de la nada que un ENCARGO por pasta. Ya debo haber contado por aquí la inclusión forzosa de unos niños y adolescentes en una historia por encargo, en la que originalmente no había nada de eso.
Dicho esto, lo del tarot... sí. Añade los dados de juegos de rol. Añade la mezcla de fichas de personajes (debo tener unas cien fichas o así)
#16 Hombre, una victoria es una victoria, esa es tu tesis. CREO yo. Y que no se van a disculpar los argentinos por ganar el partido haciendo trampas o lo que sea. Porque TODO el mundo quiere estar en el lado vencedor, da igual como sea. Dices: "...un inmortal "que se jodan"."
Ese mismo "que se jodan" se ha podido oír en el hemiciclo. Lo mismo pasa en equipos de barrios o pueblos con chavales jugando, peleas, broncas, insultos... todo el mundo quiere ganar. COMO sea. Nunca he entendido esas cosillas, nunca. Pero debo tener el cerebro estropeado seguro.
Y no es lo mismo ganar una partida de ajedrez que una guerra.
Cortar las patatas en cubitos, variedad agria o kennebec según gustos. Dejarlas en un bol con agua y un pelín de sal. Poca. Una hora o así, suficiente, que se vea que ha soltado el almidón. En una sartén, pochar la cebolla, una grande entera, tipo cebolla común o mal llamadas amarillas. Pochar a fuego medio, moviendo poco a poco, deben quedar transparentes pero no fritas del todo. Apartar. En esa sartén freír las patatas (bien escurridas de agua) en abundante aceite (oliva o girasol, a gustos, yo prefiero aceite oliva 0,4), justo al final de la fritura de patatas añadir las cebollas que estaban casi fritas. Mover hasta que se hagan las patatas y las cebollas. Pescar las patatas y la cebolla picada con una rasera o espumadera y colocarla en un colador metálico sobre un bol (digo metálico porque es el que uso). Aplastar un poco con la rasera para quitarle el resto de aceite que sea humanamente posible. Batir los huevos con tenedor o varilla, con la varilla queda más espumoso. En ese bol añadir la mezcla de patatas y cebolla. Remover bien. Añadir pizca de sal. En una sartén buena y de laterales altos y no mucha superficie, poner dos gotas de aceite. Calentar el aceite, antes de que humee, mucho antes, echar la mezcla y bajar el fuego al mínimo. Mínimo. Tapar. Con una pala de madera poco ir remetiéndola en los bordes para darle forma de "tortillón". Esperar. Fuego al mínimo. Ir viendo si ya se le puede dar la vuelta. Cando se vea dorada por abajo, con un plato grande plano o una tapadera voltea tortillas, darle vuelta y volver a la sartén. Esperar. Remetiendo con la pala de madera en los laterales para darle su forma.
Y ya está, no tiene más misterio. Una tortilla con cebolla.
Acompañar de un buen pan y un vasito de vino.
Bueno, también es como si los argentinos, después de ganar con esa manita sagrada, se hubieran cargado a tiros a la selección inglesa, a la cantera futbolera del Reino Unido y a los aficionados. Por seguir el simil.
"Ella alega que, cuando preguntó por qué la estaban evaluando de esa manera, la psicóloga le respondió: "Para ver si eres lo suficientemente civilizada; si puedes comportarte como un ser humano"."
Y luego hay un montón de desconocidos, en ese universo gris de la nada, que podrían aportar algo más. Ahora mismo hay un García Márquez en [equis lugar del mundo] que nadie conoce o un Quevedo en [hache lugar del mundo]. Pero desde el momento en que todo el mundo, todo el mundo se cree escritor o escritora y publicar es trivial y donde los mismos editores son unos zotes... pues qué se pretende. (Firmado: Un aporreateclas sin más.)