La urea puede ser empleada como una fuente de hidrógeno sostenible y segura debido a su nula toxicidad, estabilidad y facilidad de transporte y almacenamiento. La descomposición de la urea genera, en una primera etapa, amoniaco que posteriormente puede descomponerse a hidrógeno y nitrógeno. Además, la urea es un recurso barato y, muy abundante si se obtiene biológicamente de los residuos urbanos, o mediante la transformación de los productos de desecho de organismos ureotélicos.
Comentarios
Los perros contribuirán en cada esquina
A que te meo!