¿En China, contratar un matón a sueldo puede ser tan fácil como llamar a un coche Uber? Esta semana Want China Times publicó una noticia que luego fue apareciendo en muchos medios, se trata de una aplicación móvil china de lo más curiosa, 滴滴打人 (Didi Da Ren). Esta app es usada para ayudarte a encontrar y solicitar los servicios de mercenarios en línea para repartir palizas a cambio de un precio acordado. Didi Da Ren hasta hace poco estaba disponible en la tienda de aplicaciones de Android hasta que el jueves 16 de abril la retiraron.
Comentarios
¿Cómo se dice Rajoy en chino?
#1 sinlusingasinagua
#2 sincurro
#1 Lajoy. También es el nombre de una discoteca del centro de Madrid.
#1 Insi Diash.
#1 elecede
#1 Yo creo que si, que si diéramos un escarmiento a Rajoy de cualquier clase, el Pp se volvería mágicamente un partido honesto, honrado, empático con los ciudadanos, libre de codicia, y lleno de gente trabajadora.
#21 Pues debes de ser el único! yo simplemente pienso en lo a gusto que se quedaría uno.
#1 ¿Sólo Rajoy? Hagamos un crowdfunding e incluyamos en el pack a Espe, Cospe, Floriano y Montoro. A lo mejor hasta hacen descuentos por grupos.
#1 Navegador, digo, tonton.
¿Cuándo llega a España? Es para un amigo.
El odio es fuente de ingresos
Además, saben kárate
#5 Tú sí que sabes kárate
#6 Y si el objetivo es, digamos un poco "chuck" y repele la agresión con graves daños para el "trabajador contratado" ¿La empresa devuelve el dinero? ¿Tienen seguro los matones?
#18 Por lo que he entendido, el servicio simplemente pone en contacto a particulares con ganas de dar toñas, y ya ha sido retirado, aunque otros lo están llevando a la práctica por otras vías. Parece que todo empezó como una broma, pero resulta que había demanda real en este "sector" económico.
Una vez, en una feria educativa de Pekín, vi un servicio muy curioso de "guardaespaldas" para estudiantes chinos en Estados Unidos. Básicamente, el cliente llamaba a un teléfono cuando se veía en problemas, y algún matón acudía a defenderle. No sé si todavía siguen en activo...
En cualquier caso, China es un país muy seguro, incluso en los barrios más empobrecidos. Nada que ver con lo que te puedes encontrar en muchas ciudades estadounidenses o europeas.
#5 no, esos no son, los chinos son los que llevan hachas
Una de las posibilidades que ésa app ofrece me ha traído a la mente este divertido premio de Novela Corta 2005.
Aquí os lo dejo:
EL HIJO PUTA
Estaba sentado el otro día delante de mi ordenador cuando me acordé que tenía que llamar por teléfono a un compañero.
Descolgué el auricular y marqué el número de memoria.
Me contestó un tipo con muy mal humor diciendo:
‘¿Qué quiere?’.
‘Soy Ignacio Martínez, ¿podría hablar con Roberto Espárrago?’ dije amablemente.
‘Te has equivocado, gilipollas’, me respondió y acto seguido colgó.
No daba crédito a lo que me estaba ocurriendo. Cogí mi agenda para buscar el número de mi compañero y comprobé que, efectivamente, me había equivocado.
Pero como aún recordaba el número ‘erróneo’ que había marcado anteriormente, decidí volver a llamar a aquel tipo y cuando me cogió el teléfono no esperé a que contestase y le dije: ‘Eres un hijoputa’, y colgué rápidamente.
Inmediatamente apunté aquel número en mi agenda junto a la palabra ‘hijoputa’.
Cada dos o tres semanas, cada vez que estaba cabreado porque me llegaba una letra inesperada, o un aviso de multa, o discutía con mi mujer, o alguna situación por el estilo volvía a llamarlo y sin dejarle contestar le decía: ‘Eres un hijoputa’.
Esto me servía de algún modo como terapia y me hacía sentirme mucho más relajado
Unos meses después, la maldita Telefónica introdujo el servicio de identificación de llamadas, lo cual me deprimió un poco porque tuve que dejar de llamar al ‘hijoputa’.
Pero de repente, un día se me ocurrió una idea: Marqué su número de teléfono y cuando escuché su voz le dije: ‘Hola, le llamo del departamento de ventas de Telefónica para ver si conoce nuestro servicio de identificación de llamadas’.
‘No’ me dijo el tío grosero, y me colgó el teléfono.
Rápidamente lo volví a llamar y le dije: ‘Eres un hijoputa’.
Un mes después, estaba yo esperando con mi coche a que una anciana saliera de la plaza de aparcamiento del Hipercor. Esta lo hacía muy lentamente y cuando terminó la maniobra y me disponía yo a ocupar la plaza libre, apareció un Golf GTI negro a toda velocidad y se metió en el hueco que iba yo a ocupar. Comencé a tocar el claxon y a gritar:
‘¡Eh, oiga!, ¡que estaba yo esperando!, ¡no puede hacer eso!’.
El tipo del Golf se bajo, cerró el coche y se fue hacia el centro comercial ignorándome como si no me hubiera oído. Yo me quedé completamente frustrado y pensé: ‘Este tío es un hijoputa. El mundo está lleno de ellos’.
Justo en ese momento vi un letrero de ‘SE VENDE’ en el cristal de atrás del Golf. Lógicamente anoté el número y me fui a buscar otra plaza de aparcamiento.
A los dos o tres días, vi en mi agenda el número del ‘hijoputa’ y me acordé que había anotado el número del tipo del Golf. Inmediatamente le llamé y le dije:
- ‘Buenos días. ¿Es usted el dueño del Golf GTI negro que se vende?’
- ‘Sí, yo mismo’
- ‘¿Podría decirme donde puedo ver el coche?’
- ‘Sí, por supuesto. Yo vivo en la calle de Don Ramón de la Cruz esquina con Montesa, es un bloque amarillo y el coche está aparcado justo enfrente de la casa’
- ‘¿Cómo se llama usted?’
– ‘Enrique Juárez’
- ‘¿Que hora sería la mejor para encontrarme con usted y discutir los detalles de la operación, Enrique?’.
- ‘Pues yo suelo estar en casa por las noches’.
- ‘¿Puedo decirle algo, Enrique?’
– ‘Si, claro’
- ‘Enrique, eres un hijoputa de la hostia’, y colgué el teléfono.
Inmediatamente después de colgar anoté el número en mi agenda al lado del otro, pero en este puse el nombre de ‘hijoputa II’.
Ahora tenía dos ‘hijoputas’ para llamar y así estuve durante dos o tres meses, llamando ahora a uno, ahora a otro; hasta que comenzaba a aburrirme un poco.
Me puse a pensar en serio sobre como resolver este problemilla y al cabo de un par de whiskys se me ocurrió algo. Primero llamé al ‘hijoputa I’:
- ‘Dígame’
- ‘Hola hijoputa’ – pero esta vez no colgué.
- ‘¿Estas ahí todavía, verdad, cabrón?’
- ‘Si, hijoputa’.
- ‘Deja ya de llamarme o…’
- ‘Noooooo’.
- ‘Si supiera quien eres te rompía la boca’, me dijo.
- ‘Me llamo Enrique Juárez y si tienes cojones vienes a buscarme. Vivo en la calle Don Ramón de la Cruz esquina Montesa, en un bloque amarillo, justo en la puerta donde hay aparcado un Golf GTI negro, so hijoputa’
- ‘¡¡¡Ahora mismo voy para allá!!! Tu sí que eres un hijoputa y ya puedes ir rezando todo lo que sepas. Te voy a matar a hostias’
- ‘¿Sí?. ¡Que miedo me das, hijoputa!’ y colgué el teléfono.
Inmediatamente llame al hijoputa II:
- ‘Dígame’
- ‘Hola hijoputa’ y no colgué.
- ‘Como te pille algún día…’
- ‘¿Que me vas a hacer, hijoputa?’
- ‘Te voy a patear las tripas, pedazo de cabrón’
- ‘¿Sí?, pues a ver si es verdad, hijoputa. Ahora mismo voy hacia tu casa’ y colgué.
Por ultimo, cogí el teléfono y llame a la policía. Les dije que estaba en la calle Don Ramón de la Cruz esquina con Montesa y que iba a matar a mi novio homosexual en cuanto llegara a casa.
Luego hice otra llamada rápida a ‘Madrid directo’ y les dije que iba a haber una pelea de pandillas en la calle Don Ramón de la Cruz esquina Montesa.
Y entonces me monté en mi coche y me fui para allá a toda leche. Te juro que es una experiencia que nunca olvidaré. La mayor pelea que he visto en mi vida. Hasta los cámaras de Telemadrid se llevaron lo suyo.
En fin, después de esto espero que cuando te llame por teléfono me contestes en tono amable.
Ya sabes, no es bueno que yo me irrite.
#34 No me creo nada Hijo Puta
Encuentra sicarios sexis en tu zona.
Y este es el programa de TV, para el que quiera mostrarlo en directo
Habrá que crear una app para contratar o pedir ayuda a gente de bien que te proteja de los matones en plan Jackie Chan en Operación trueno
Coño , llegó el Uber de la mafia...
Esto va exasperar claramente al matón tradicional..
Lo suyo sería que la app contemple la opción de realizar una contraoferta y que se la lleve el otro.
Que ésa App no caiga en manos de una mujer despechada, por dió!
Sensacionalista. Alguien ha creado una APP a partir de un Gag de una de las aplicaciones chinas más conocidas (Dididadi) que sirve para "nominar" un taxi, cuando no encuentrsa ninguno libre en la calle.
#19 A ver si leemos la noticia:
"...un periódico local lo puso a prueba. Un reportero de Kunming puso un anuncio falso en la aplicación y ocurrió que recibió el número de teléfono de un matón llamado "Lei" residente en Shanghai. El hombre dijo ser capaz de poner a cualquiera en el hospital, y que se ajustaría el precio en función del grado de daño que debía de ser infligido."
#37 Me he leído la noticia perfectamente. Debe ser muy útil cuando vives en Kunming, recibir la llamada de un matón de Shanghai; a 2730 kilómetros de tu casa.
#38 Claro, es que al periodista le van las emociones fuertes, prefiere contratar al matón, elegir a alguien de Shanghai para darle una paliza y pagarle para ello, simplemente para terminar de verificar su experimento y que así te sientas más complacido
Y sin embargo, ¡qué bien va la economía china!
Hubo un momento en este mundo en que el hecho de que tu economía fuese bien no conllevaba necesariamente nada bueno.
Penas de muerte a mansalva, explotación laboral digna de la esclavitud, y apps para contratar palizas. ¡Viva el liberalismo! ¡Viva aquello que sólo vale para dar dinero!
(Porque seguro que los de la app no dan ni media hostia si no les pagas).
#13 vaya forma de mezclar temas... si ponen esa app aqui, en USA o en Kenia triunfa tambien hasta que la cierran por ilegal. exactamente igual que en cualquier otra parte del mundo, el odio mueve mucho dinero
#13 China, ese ejemplo de liberalismo
aquí no nos hace falta app.
Tenemos los foros y paginas de c/v.
Por que l@s hay mú list@s
¿Aceptan Bitcoin?
¿Y si usas la app para pegar una paliza a los que la inventaron?
#27 pasa lo mismo que si buscas "google" en google
Pongame una paliza para regalar, por favor.
#15 en vale, lata o pomada?
#15 voy, donde vives?
Mira tu que útil.