Los hogares con hijos estan claramente en una peor situación económica que los sin hijos: tienden a pertenecer a los quintiles más bajos, están más endeudados y gastan más ahorros para llegar a fin de mes. Con hijos se triplican las posibilidades de ser pobre, y la mujer a cargo lo más probable es que sea pobre. ¿Cómo van a nacer más chicos si las familias que mejor viven son las que no tienen a quien cuidar? Si hay interés público en el crecimiento de la natalidad por ser importante para el futuro, hay que revisar como se reparten los costos.