El texto no es un análisis histórico, sino una justificación ideológica de la represión masiva. Presenta las purgas, los gulags y las deportaciones como si fueran instrumentos “dialécticos” de construcción del socialismo, cuando en realidad fueron la prueba palpable de que el comunismo solo puede imponerse aplastando cualquier forma de disidencia. No hay nada de emancipador en un sistema que necesita ejecutar a cientos de miles de opositores internos para sobrevivir; lo que hay es miedo a que el supuesto “poder proletario” se desmorone al primer contacto con la libertad de opinión.
El autor maquilla los crímenes de Stalin bajo un lenguaje filosófico, pero lo que se describe con palabras grandilocuentes es simple: violencia organizada contra la sociedad. Se justifica que se encierre y se someta a trabajos forzados a millones de ciudadanos porque el régimen no tolera que existan individuos con pensamiento propio. El gulag no fue “reeducación”, fue esclavitud; las deportaciones no fueron “necesidad material”, fueron castigos colectivos.
La idea de que el Partido representa a toda la clase obrera es otra ficción central del texto. En la práctica, lo que se construyó fue una élite burocrática que hablaba en nombre del proletariado mientras lo controlaba con un aparato de terror. Esa “vanguardia” acabó siendo un grupo cerrado de dirigentes que decidía quién vivía y quién moría, quién pensaba “correctamente” y quién debía desaparecer. Es decir, una élite de partido que sustituía al pueblo y gobernaba sobre él, no con él.
El artículo insiste en que sin represión no hay revolución. Y en eso, paradójicamente, tiene razón: el comunismo no puede implantarse sin aplastar las libertades individuales, sin encarcelar, deportar y ejecutar a los disidentes. Pero ese hecho, lejos de ser una “virtud dialéctica”, es la confesión más clara del fracaso del modelo. Un sistema político que solo puede sostenerse con miedo, vigilancia y eliminación del adversario, no es emancipación, es tiranía.
En definitiva, es un ejercicio de revisionismo totalitario que legitima el terror como política de Estado. Lo que llama “dictadura del proletariado” no es más que la dictadura de una élite autoproclamada, que en nombre del obrero niega al obrero la libertad, la pluralidad y la dignidad. El comunismo no trae igualdad, trae represión y privilegio para unos pocos, disfrazados de salvadores
#16 Pues sin poner la dirección o poniendo el número de referencia de alquiler vacacional de otro piso, y si no con inmobiliarias como se ha venido haciendo toda la vida.
#31 Eso nunca lo harán, a los propietarios les viene bien; más noticias son las páginas, más comentarios e interacciones, más posicionamiento, más páginas vistas y más publicidad.
#14 tu lo que quieres es echar a los que no pensamos como tú.
#93Te repito que el estado (España) no puede imprimir dinero.
Sisi, no hace falta que me lo repitas, lo sé.
fue exactamente lo que hizo el BCE, para sacarnos de la crisis.
Y de aquellos barros estas inflaciones... Y aún me acuerdo de todo el mundo recriminándoles a los estados frugales que no quisieran imprimir billetes como si no hubiera un mañana porque entendían que eso empobrecía a la población. Ahora todos se quejan de lo caro que está todo... Pero al final la gente ha recibido lo que pedía, ¡Europa tiene que ayudarnos!... y Europa encendió la impresora...
#55 No he hablado de televisión pública. Hablo de los 150 millones anuales que se deja Sánchez en publicidad institucional para comprar medios privados exactamente igual que en este caso.
#4 Lo que no me explico es cómo consideráis indecente (que lo es) este gasto de 2,2 millones en cinco años para comprar voluntades pero luego Pedro Sanchez gasta 150 millones al año exactamente en lo mismo y calláis como putas.
#111 que si, que si, que los moderadores haciéndoles el juego a los intolerantes son un problema. Supongamos que lo solucionas y pones a unos moderadores justos y ecuánimes. Da igual, sigues teniendo a los mismos sectarios de mierda pero con menos ayuda, sigues con el mismo mojón entre manos. ¿Expulsas a los sectarios? volverán con multicuentas, este es su campo de batalla ¿logras poner filtros efectivos para quitárte los multicuentas? la página se va a la puta, son tantos que sin ellos desaparece meneame.
Hay que asumirlo, esto no va a ir a mejor, no va a ser más plural, no va a ser menos sectario y tampoco va a entrar savia nueva. La página se morirá, tardará, lo hará lentamente, hasta que un día se canse la propiedad y lo cierren.