Hace 3 años | Por Casiopeo a lavanguardia.com
Publicado hace 3 años por Casiopeo a lavanguardia.com

Pablo Iglesias (Madrid, 1978) es una construcción de ficción. No porque sea una fabricación falsa o una impostura, sino porque se ajusta como ningún otro personaje de la política española del último medio siglo a un arquetipo narrativo, tanto por efecto de su propio compromiso con su papel en la historia de España como por el entusiasmo absolutamente desmedido de sus detractores. Héroe o villano –mejor sería decir, superhéroe o supervillano–, Iglesias no es un rostro que pueda ocupar un papel de figurante con frase.

Comentarios

B

¡Madre mía, cómo está hoy Pabléame!, hoy sí que sí que saca más hilos que Ayuso, ahora que ya parecía que nos estábamos librando del Ayuséame.

D

#1 cierra al salir!

UnaGrande

#1 Si no te gusta, vete y cierra al salir.

D

“por el entusiasmo absolutamente desmedido de sus detractores” y el entusiasmo absolutamente desmedido de sus seguidores, añadiría yo. Lo que viene siendo un mesías.

l

Me parece un esperpento el artículo, como si todo fuera pura estrategia de Pablo para conseguir el poder cuando todo es resultado de tener que defenderse de los continuos ataques que ha recibido de los medios, los jueces o los adversarios

Melni_bone

He llegado hasta lo de ".... su papel en la historia de España ..."

Pues como el 99% de los que viven del erario público, ni una pequeña nota a pie de página de la Historia de España.