Hace 11 años | Por --354522-- a revistadelibros.com
Publicado hace 11 años por --354522-- a revistadelibros.com

Reseña de "En deuda. Una historia alternativa de la economía", del antropólogo anarquista David Graeber. Su tesis principal es que la deuda se ha convertido en una forma de cuantificar, bajo amenaza de violencia, las categorías morales de la obligación y la promesa, de tal manera que en los últimos cuatro siglos nos hemos apartado dramáticamente de la manera tradicional de concebir nuestras obligaciones recíprocas, esto es, la ayuda mutua en el seno de comunidades cooperativas.

Comentarios

ailian

antropólogo francés Marcel Mauss publicó su clásico El don en 1925. Allí negó que las sociedades primitivas se basaran en el trueque como forma de intercambio, arguyendo en cambio que la práctica prevalente a lo largo de la historia no es otra que el regalo voluntario, que creaba un sentido de obligación recíproca entre grupos humanos potencialmente hostiles entre sí. Regalar no sería, así, un acto de cálculo, sino uno basado en la negativa a calcular..

No es el único antropólogo que afirma esto y no me causa ningún asombro que este dato se ignore sistemáticamente en la enseñanza básica reglada.

D

A veces, una crítica negativa hace que te apetezca leer un libro. Ésta es una de esas veces.

Una cita: «Una deuda no es más que la perversión de una promesa. Es una promesa corrompida por las matemáticas y la violencia» David Graeber

ailian

Una vez leído, reafirmo lo de #1

El artículo empieza bien, describiendo de manera correcta las ideas que expresa el libro, que son muy interesantes dicho sea de paso; pero más allá de la segunda mitad empieza la crítica, crítica que no se basa en datos, solo en la pura opinión del crítico por lo que a mi parecer por tanto no tiene sustancia alguna y es totalmente prescindible.

D

#4 A mí me gusta mucho leer ideas discordantes con las mías. Es como un proceso de debate en el que escuchas argumentos divergentes, a veces incluso te hacen dudar y te obligan a replantearte lo que piensas, a buscar nuevos argumentos o a hallar las grietas en el razonamiento de tu interlocutor. En ese proceso, qué duda cabe, se aprende mucho más que mediante la clásica "discusión a la española" que suele consistir en que dos o más personas que están de acuerdo en casi todo hablan dándose la razón por turnos y acaban el debate con la gratificante sensación de haber "arreglado el mundo" sabiendo, probablemente, menos cosaas que cuando empezaron a hablar.

Bueno, también puede ser que de pronto surja una verdadera discrepancia. Entonces tenemos la opción de empezar a decir "y tú más" hasta que llega la hora de sacar los garrotes.

Un mundo por explorar, el de la retórica hispana lol

D

#5 Debe ser fascinante debatir negando el trueque. Algo así como replantearte si la tierra es plana o el centro del Sistema Solar.

D

Madre mía. Madre mía. Este debe ser un libro favorito para gente con mentalidad no superior a 5 años.