El corazón del experimento es un motor diésel Kubota de tres cilindros, originalmente pensado para maquinaria agrícola. Este motor, donado por el fabricante japonés, fue adaptado para funcionar con biodiésel elaborado a partir de aceite vegetal usado. El resultado: una moto icónica convertida en un banco de pruebas rodante que desafía la narrativa dominante sobre la movilidad sostenible. Esta Harley funciona con grasa de papas fritas. Por qué importa. Alex Jennison, estudiante de ingeniería de la Universidad de Columbia Británica (UBC),  
      | 
 etiquetas:  biodiesel ,   harley ,   aceite vegetal usado ,   motos