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Últimamente, podemos observar como la soberanía energética es de capital importancia, la energía es, probablemente, la materia prima más importante en las sociedades modernas.
Podríamos considerar positiva, también, la "soberanía" ciudadana (familiar) para conseguir, en cierto modo, independencia en este recurso tan preciado. Nos defiende de intereses comerciales, monopolios-oligopolios. Esta ventaja del autoconsumo energético, seguramente, compense el menor rendimiento económico-energético de las instalaciones renovables domésticas respecto a las industriales.
Diego Abad de Santillán, "La conquista de la energía", 1938 ...........Hay algo más importante para la especie humana que la conquista del pan: es la conquista de la energía, de la cual el pan es uno de los infinitos resultados... ...y la revolución, si ha de significar algo positivo, lo hará en la línea, no tanto de la mera conquista del pan, como en la de la conquista de la energía... Toda la energía viene del Sol; el carbón, el petróleo, son energías solares almacenadas... ...El ideal sería aprovechar directamente esa energía, y ya se habla de utilizar en ese sentido los desiertos africanos, en los que, utilizada en una millonésima parte, podría surtir de energía a todo el mundo y transformar la faz de la tierra. ...en este aspecto el Sol es en España una riqueza que envidian muchos países del norte, y no la utilizamos. Al contrario, lo que podía ser una bendición, se convierte en una devastación catastrófica... una energía que producirá más riqueza y tendrá un valor más efectivo que las conquistas de los Reyes Católicos, de Carlos V y de Felipe II. En lugar de un imperio territorial, donde no se ponía el Sol, España puede ser el primer imperio de la nueva era social..."
En España tenemos varios obstáculos a la instalación de autoconsumo energético doméstico (básicamente solar fotovoltaica). El más relevante y poco resoluble, que un buen porcentaje de familias no dispone de tejado, y las que sí tienen, una incierta rentabilidad de las instalaciones, que está en manos del gobierno poder aliviar.
Actualmente, hay generosas subvenciones que superan el 40 % pero son TEMPORALES... es más sostenible y barata una "subvención" más pequeña (reducción del IVA) dilatada en el tiempo, que de seguridad a empresas especializadas para crecer, que subvenciones limitadas en el tiempo que suben el precio del material y mano de obra por la inflexibilidad de la oferta ante una demanda temporal exagerada.
A pesar de que el Parlamento Europeo aprobó a final del año pasado la posibilidad de que cada Estado pudiese reducir el IVA para instalaciones de autoconsumo doméstico renovable, hasta el 5 %... En España no ha habido ningún cambio impositivo 21% (anteriormente, ya existía la posibilidad de una reducción hasta el 10% si se enmarca dentro de una gran obra de rehabilitación de la cuál pueden beneficiarse muy pocas instalaciones).
No existen garantías, ni sanciones suficientes, para obligar a las suministradoras eléctricas a compensar excedentes de forma justa, fundamental para garantizar la rentabilidad de las instalaciones. En la mayoría de casos la compensación se demora muchos meses, de forma artificial, y las compañías aprovechan para ofrecer contratos con una compensación de excedentes con un diferencial muy alto compra/venta, con contratos en el mercado "libre", fuera del mercado regulado por el gobierno PVPC.
En el mercado regulado, el coste medio de la electricidad al consumidor, en lo que llevamos de 2022, fue de 32,03 c€/KWh y el de retribución por excedentes autoconsumo PVPC (que se paga al mismo precio que la subasta mayorista "pool") 22,88 c€/KWh... el 71,4%.
menéame
