El joven, arrestado pese a no haber hecho nada durante un desahucio de un centro social en el barrio barcelonés del Fort Pienc en 2019, llegó a estar procesado por un delito de atentado a agente de la autoridad.
La aparición de un vídeo que desmintió por completo la agresión que el mosso imputaba al joven lo salvó del banquillo en el último momento
El 9 de marzo de 2021, cinco miembros de la familia a-Tamimi de Deir Nizam se dirigieron a su tierra, que se encuentra cerca del pueblo vecino, a-Nabi Saleh. Al llegar, un colono llamado Zvi, que estableció el puesto de avanzada "Granja Zvi Bar Yosef" en la zona y que pastorea su ganado en tierras pertenecientes a los agricultores de la zona, se fijó en ellos. El colono llamó a los soldados, y éstos expulsaron a los granjeros de sus tierras y confiscaron su tractor con el pretexto de que eran "tierras del Estado".
En la mañana del 17 de marzo de 2021, varios miembros de la familia llegaron a otra parcela de su propiedad, situada a unos 600 metros al oeste de la primera y a unos 200 metros del asentamiento de Halamish. Hace unos meses, la familia plantó 2.400 almendros en esta parcela y levantó una valla alrededor de ella como parte de un programa apoyado por el Ministerio de Agricultura palestino y el Centro Palestino para el Desarrollo. Mientras los residentes reparaban la valla, varios colonos aparecieron y llevaron su ganado a pastar en las tierras de la familia. Se produjo una discusión sobre la propiedad de la tierra. Los colonos, entre los que se encontraba Zvi, del puesto de avanzada, que estaba armado, llamaron a los soldados y a un representante de la Autoridad de Antigüedades de Israel, que ordenó a los miembros de la familia que dejaran de trabajar y abandonaran sus tierras, alegando que se trataba de una zona militar cerrada.
El 19 de marzo de 2021, por la tarde, la familia acudió de nuevo a su parcela. Volvieron a descubrir que los colonos habían hecho pastar a su ganado en los márgenes de la parcela. Un colono amenaza con disparar a la familia si no se marcha. Unos minutos más tarde, llegan más colonos, entre ellos Zvi, seguidos de varios soldados, que dispersan tanto a los colonos como a la familia.
Al día siguiente, 20 de marzo de 2021, alrededor de las 7:00 de la mañana, la familia a-Tamimi
#3 Estaría bien, pero Hollywood no lo permitiría. O sería una película aparentemente de denuncia pero dedicada a maquillar la realidad y hacer control de daños.
En este mismo lugar, hace casi 50 años -quizá en 1975- me senté con mi madre a la sombra de una higuera a la entrada de esta casa. Yo sólo tenía cuatro años. De repente, los helicópteros rugieron en el cielo y mi madre, con la voz temblorosa por el miedo, dijo: «Dyab, tenemos que entrar. Es peligroso». A esa edad, yo no entendía mucho, sólo que algo monstruoso -algo que mi madre llamaba Israel- estaba en el cielo, disparando a la gente de abajo.
Un año después, ese mismo monstruo entró en nuestro pueblo. Quemó nuestras casas, lo destruyó todo y cometió una masacre, limpiándonos de la tierra que llamábamos hogar. Escapamos de la muerte de milagro. Esta casa, como el resto del pueblo, quedó reducida a cenizas. Todos mis juguetes y mi ropa quedaron atrás, al igual que los queridos libros de mi padre. Escapamos sin nada más que nuestras vidas. Crecí lejos de esta casa, pero Israel seguía empujándonos, seguía destruyendo lo poco que reconstruíamos.
En 1982, durante su segunda invasión del Líbano, Israel quemó otra casa que habíamos construido. Una vez más, huimos sin nada, y mi padre se vio obligado a abandonar sus libros una vez más.
Cuando el Líbano fue liberado en 2000, regresamos a nuestro pueblo. Mis padres invirtieron todos sus ahorros en reconstruir esta casa, aquí mismo, en el mismo lugar donde una vez estuvo, bajo el mismo cielo. La hicieron hermosa, una casa de tres pisos rodeada de jardines. Todos los veranos la visitábamos. Mis hijos jugaban donde yo había jugado de niña. Caminaban bajo el mismo cielo que había presenciado tanto el júbilo como el horror.
Y ahora, una vez más, ha desaparecido. Destruido. Por el mismo monstruo que la atacó por primera vez hace casi 50 años. El mismo monstruo que sigue acechándonos, implacable en su persecución. Por aquel entonces, Hezbolá no existía. Hamás no existía. La resistencia no nació por ideología, nació porque la ocupación estaba ahí. Porque el monstruo estaba allí.
Reconstruiremos esta casa de nuevo. Por tercera vez. Porque esta casa es algo más que piedras y muros: es un símbolo, un compromiso. Es un testimonio de nuestra dignidad y de nuestra negativa a rendirnos. Es una casa en el sur del Líbano, y eso la hace sagrada, más sagrada que cualquier templo. Pertenece aquí, bajo este cielo. Ninguna destrucción puede cambiar eso.
Incluso bajo los escombros, los libros de mi padre permanecen. Un hogar no es sólo un espacio físico: es un vínculo, una historia y una declaración de rebeldía. Esta casa fue destruida una y otra vez porque nos negamos a aceptar una vida sin dignidad. Porque no aceptaremos la ocupación. Porque nunca romperemos nuestro vínculo con Palestina.
Por esta causa, estamos dispuestos a pagar cualquier precio, no sólo con piedras o recuerdos, sino con todo lo que tenemos. Sin dignidad y libertad, la vida no tiene sentido. Por eso, seguiremos reconstruyendo. Una y otra vez, si es necesario.
Que lástima que llegue con más de 30 años que retraso. Recuerdo el trabajo que tuve para una asociación que me fui porque llevaba 4 meses sin cobrar., y para mayor inri, además de perder el empleo no tuve derecho a paro por causar baja voluntaria.
elpais.com/espana/2025-01-20/las-pruebas-de-un-secreto-difundido-al-me El País: una fuente de la Fiscalía de Madrid ya reveló la existencia de un posible pacto entre la pareja de Isabel Díaz Ayuso y el Ministerio Público horas antes de que Álvaro García Ortiz, fiscal general, tuviera acceso a esa información en la noche del pasado 13 de marzo.
Los agentes comprobaron que los insultos se repitieron y también de parte de uno de los hombres del clan. Este violento comenzó a pegar a los policías y también fue detenido. La Policía Nacional arrestó a tres de las jóvenes, todas ellas menores de edad, y al hombre por un delito de odio. Dos de las implicadas no pudieron ser arrestadas ya que eran menores de 14 años.
Los agentes de la Policía Nacional tuvieron que pedir refuerzos por el ambiente tenso que se estaba viviendo en la zona por la llegada de más familiares de este clan. Los cuatro detenidos fueron enviados a dependencias policiales por estos hechos.
La cadena pública madrileña emite una rectificación de 24 segundos para reconocer que no comprobó si la subvención que 'The Objective' atribuyó falsamente a Begoña Gómez había sido concedida a la mujer del presidente del Gobierno, algo que, explica, "Telemadrid no ha podido acreditar".
#5
Esta escoria humana unca tuvo vergüenza. Después de lo que hizo en Irak y las mentiras en el 11-M, sigue aún con sus teorías de la conspiración. Es tan prepotente, que todos los informes que se dieron en Irak por los investigadores de la ONU, donde afirmaron que no había armas de destrucción masiva y en el 11-M, con los informes que se dieron por la policía que investigó y los recibidos de la BBC y del propio Bush, donde descartaban a ETA, pues Aznar, no los admitió, es mas, diò òrdenes a la prensa y TV., para que se dijera que había sido ETA y que se descartase otras vías de investigación. Para mi este sr. por llamarle con educación, no merece ni tener la ciudadanía española.
Se reunió en las Azores para su gloria a pesar de que el 90% del pueblo español estaba en contra de la guerra (como se pudo comprobar en las manifestaciones en todas las ciudades), nos llevó a una guerra para buscar armas de detrucción masiva afirmando que las había y no solo no las había sino que lo único que hizo EEUU fue saquear el país y cuando hubo el atentado mintió al pueblo y condicionó a los medios con llamadas directas a sus directores diciendo que no había ninguna duda de la autoría de ETA. Si tuviera decencia lo que debería pedir hoy es PERDÓN.
Esa maquinaria que el orco del bate rompe con saña era la inversión de los ahorros de gente humilde; el medio de vida de una o varias familias. Que grandísimos hijos de la gran puta.
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La aparición de un vídeo que desmintió por completo la agresión que el mosso imputaba al joven lo salvó del banquillo en el último momento