David Lukoff se tomó un ácido por primera vez en su vida. Estaba en San Francisco, epicentro contracultural. Había llegado hasta allí haciendo autoestop después de abandonar, con veintitrés años, sus estudios de doctorado en Harvard. Era 1971. Cuatro días después, al despertar, se miró en el espejo y comprobó que su mano derecha estaba en la posición clásica del budismo de la mudra. Justo en ese instante sintió que era la reencarnación de Buda. Y también la de Jesús. ¿Qué le pasaba en la cabeza?
Comentarios
A ver,si uno lee el artículo, se da cuenta que eran menos de cincuenta páginas. Tampoco es tan bestia como lo vende la entradilla
#2 hoy en día se le llama biblia a cualquier cosa. Teniendo en cuenta que biblia es por definición, una pluralidad, ya sólo por eso es errónea
#2 Hombre, si yo me como un tripi y escribo UN parrafo de un libro sagrado, ya me dejaría muy catacroquer.
#2 Titular sensacionalista, escribir cuarenta páginas en una semana no es ninguna hazaña, ni algo sobrenatural y menos bajo el efecto de las drogas que todo suena bien, otra cosa es leerlo luego cuando se está fresco.
#2 La biblia hay partes que parece un listín telefónico.
Un mal viaje, sin duda.
#1 A unos les da por escribir la biblia en verso y a otros por grabar un disco:
Lucy in the Sky with Diamonds o cómo tu cerebro se pone a tocar jazz
Lucy in the Sky with Diamonds o cómo tu cerebro se...
investigacionyciencia.esBueno,esos diagnósticos a posteriori pues no me parecen muy fiables. Acabaremos tachando de trastornado mental a cualquier ser extraordinario, incluidos los grandes científicos, los grandes artistas y no sólo los maestros espirituales, vamos todo ser humano que sobresalga
#7 todos tenemos trastornos.
#10 pues por eso , pero el mío, como mucho, me permite contestarte sin muchas faltas de ortografía, un saludo y buena tarde
#12 mira, hasta me votan negativo por decir que todos tenemos trastornos jaja alguien no es capaz siquiera de reírse.
Buenas tardes
@Advaita
#13 A mi me tiene en ignore.
#23 a mi también... jaj
#10 "Se estima que en España un 19,5% de la población ha tenido algún tipo de trastorno mental"
no todos, pero sí un montón, y la mayoría apuesto que están en directivas de corporaciones y partidos políticos
#18 jajaja y sin embargo los que están debajo de todos ellos viven en el paraíso mental de los ignorantes . Nop. Nos vamos al carajo.
Parece que una buena parte de los profetas, mártires y líderes de la historia padecieron epilepsia del lóbulo temporal.
#3 Pues que magnifica epilepsia esa que te hace decir, "amaos los unos a los otros".
#11 O mata a pedradas a esa por fulana.
#29 Ningun místico erudito diria eso, más bien son el tipo de personas como tú que cuando se presenta la oportunidad y se les da un poquito de autoridad y poder, manifiestan sus carencias.
Gente como tu está en los estadios de fútbol, diferentes iglesias y templos, ejercitos, ayuntamientos, depredadores que intentan escalar a cualquier precio, sea donde sea, aprovechando la política, la religión, la ideología...etc,etc.
Soléis ser gente extremadamente soberbia, que tiene enormes dificultadades para salir del lenguaje dual y tener en cuenta la sutilidades de la realidad.
Vais de un extremo a otro, por que os falta equilibrio a todos los niveles.
Esto también lo vaticinaron los Simpson
#14 Que buen episodio
Pues yo lo achacó mas a la parte de psicólogo que a la del ácido.
a quien no le ha pasado?
#4 A mí dos veces la semana pasada.
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elespanol.comPorque lo mismo fue un golpe en la cabeza en la caravana que ese ácido que es bicho que de madrugada sale debajo de la almohada y empieza a escarbar en el cerumen de tu oreja para intentar abrirse paso a tu cerebro y, aunque estés en fase REM, sabes que un diminuto microchip parpadea en su espalda.
Me recuerda al segundo libro de la sombra del viento...
El libro de Mormón también es algo así, ¿no? Una paja mental de un andova.
Y el Corán también dicen que un ángel lo dictó al Mahoma, convenientemente trastornado bajo los efectos de algo, de fuera o de dentro, pero de algo.
La rave de Dios.
Yo lo llamaría un buen pedo, simplemente.
Me da que por ahí va lo de “Un curso de milagros” y lo está petando.