HTS, con raíces en Al Qaeda, ha dedicado los últimos años a reinventarse como una fuerza nacionalista y cambiado su retórica hacia un estilo más conciliador. Habrá que ver cómo se concreta en la práctica esa transformación. Sus primeros pasos son contradictorios: llaman a respetar a las minorías étnicas y religiosas, pero en Alepo ya han establecido una policía de la moral para asegurarse de que las mujeres se tapan el pelo
|
etiquetas: primavera , siria , invierno , hts , al qaeda , policía de la moral , mujeres