Portada
mis comunidades
otras secciones
#18:
#14 Esos chistes rancios estarían ahora casi prohibidos por la autocensura de lo políticamente correcto, y para que en las redes sociales no hagan un llamamiento al boicot, llamando de todo al programa, a la cadena de TV y a los que cuentan los chiste o a todo aquel al que le guste el programa, consiguiendo que los anunciantes se lo piensen dos veces antes de hacer publicidad en una cadena a la que han colgado uno o varios sanbenitos.
En aquella época no estaban en absoluto casi prohibidos esos chistes rancios y a la mayoría tampoco nos sonrojaba ya que no nos preocupábamos tanto por lo que pudiera decir el chiste, ya que era un chiste, no lo decían en serio.
Tampoco nos preocupábamos si se ofendía alguien por un chiste chorra que cuentan en televisón, ni nos escandalizábamos de una forma tan sumamente exagerada y absurda como mucha gente lo hace hoy en día por este tipo de chorradas.
Si alguien se ofende por un chiste que se lo haga mirar, en lugar de obligar a todo el mundo a dejar de decir lo que ofende a esa persona igual sería mejor que se acerque a hasta la consulta de un buen psicólogo, le hace mucha falta.
En aquella época no estaban en absoluto casi prohibidos esos chistes rancios y a la mayoría tampoco nos sonrojaba ya que no nos preocupábamos tanto por lo que pudiera decir el chiste, ya que era un chiste, no lo decían en serio.
Tampoco nos preocupábamos si se ofendía alguien por un chiste chorra que cuentan en televisón, ni nos escandalizábamos de una forma tan sumamente exagerada y absurda como mucha gente lo hace hoy en día por este tipo de chorradas.
Si alguien se ofende por un chiste que se lo haga mirar, en lugar de obligar a todo el mundo a dejar de decir lo que ofende a esa persona igual sería mejor que se acerque a hasta la consulta de un buen psicólogo, le hace mucha falta.
#12:
Es interesante comprobar cómo un programa que era absolutamente moderno en su época (y realmente no lo era) no hace tanto, visto hoy en día tiene momentos rancios de vergüenza ajena (desde los chistes de gangosos y "mariquitas" de Arévalo a las actuaciones del Duo Sacapuntas con su histrionismo andalú).
Da para pensar en lo rápido que cambian la sociedad, las mentalidades y lo políticamente correcto.
Da para pensar en lo rápido que cambian la sociedad, las mentalidades y lo políticamente correcto.
#7:
#3 Tuvieron éxito solo en el " Un , Dos, Tres" después no supieron mantenerse ; algún otro espectáculo de la fama adquirida por el concurso ; pero en cuanto desparecieron de la televisión la mayoría de la gente se olvidaron rápido de ellos
Gente como Pepe Viyuela fueron de los pocos que consiguieron mantenerse, porque él si sabia como adaptarse a los cambios
Gente como Pepe Viyuela fueron de los pocos que consiguieron mantenerse, porque él si sabia como adaptarse a los cambios
Comentarios
Es interesante comprobar cómo un programa que era absolutamente moderno en su época (y realmente no lo era) no hace tanto, visto hoy en día tiene momentos rancios de vergüenza ajena (desde los chistes de gangosos y "mariquitas" de Arévalo a las actuaciones del Duo Sacapuntas con su histrionismo andalú).
Da para pensar en lo rápido que cambian la sociedad, las mentalidades y lo políticamente correcto.
#12 Parece que hemos pasado de un lado de la balanza al otro.
No sabemos mantener la homeostasis.
#18 Básicamente la sociedad ha cambiado. La educación y las campañas de sensibilización cambian la percepción de la sociedad de forma efectiva con el paso de los años sin apenas darnos cuenta, para bien o para mal. Y son efectivas, vaya que si lo son.
Bendita hemeroteca, que refleja el carácter y la opinión pública de sociedad de hace unos años. No hay que tener vergüenza de reconocernos (los más veteranos).
#12 acabo de leerte y pues eso, me repito. cc #15
La historia jamás contada, contada miles de veces.
#6 No. Nada conseguía juntar a la mitad de la población delante de la tele.
De hecho hablamos de antes de los 80, donde no todo el mundo tenia TV.
#10 No has leído bien mi comentario. No digo que el 100% de la población viera el Un Dos Tres, sino que el 100% de lo anunciado en televisión tenía éxito. No en vano se ponía en el embalaje de los productos el consabido "Anunciado en TV" hasta casi el año 2000. Durante los 80 decir que tu producto había sido anunciado en TV era pasar directamente a jugar en la primera división de la liga de productos y servicios
#30 No, no lo he leido bien. Perdona.
La bombi, ahí lo dejo
Chicho reconocía el talento al minuto
Ángel Garó y el Dúo Sacapuntas.
#2 Pues tuvieron muchísimo exito, otra cosa es que a ti no te gusten.
#3 Como Marhuenda e Inda.
#3 en los 80 prácticamente el 100% de lo que salía en televisión tenía éxito. Era la profecía autocumplida
#6 De hecho, un dos tres murió cuando hubo otras opciones.
#3 Tuvieron éxito solo en el " Un , Dos, Tres" después no supieron mantenerse ; algún otro espectáculo de la fama adquirida por el concurso ; pero en cuanto desparecieron de la televisión la mayoría de la gente se olvidaron rápido de ellos
Gente como Pepe Viyuela fueron de los pocos que consiguieron mantenerse, porque él si sabia como adaptarse a los cambios
#7 Pepe Viyuela se hizo famoso gracias a Telecinco y su programa "Tutti Frutti", que le dio un espacio donde siempre se peleaba con una silla/mesa/loquetocase. Y su frase insignia era un "Joder" alargado.
#3 talento y éxito no tienen por qué estar relacionados. A mí el dúo sacapuntas aún me arrancaba una medio-sonrisa, pero al Garó este no lo tragaba, lo encontraba penoso. Ignoro qué enchufe debía tener o a quien se la chupó para conseguir salir en la tele.
#3 Bueno, pues dejémoslo en "los Apolos" o "Adonis" . ( "Eo,Eo, dancing with Apolos".De Adonis ya se encargó mi parte más heterosexual de mi cerebro de olvidarlo)
#2 En su época eran muy buenos, te lo aseguro.
#2 No te olvides de Bigote Arrocet.
#2 Lo de la plaza abarrotada se sigue diciendo entre los de 40+.
#16 Pues yo tengo 40 y a mí no se me quedó ninguna de las palabrejas chungas que se usaban en los 80, pero ninguna! Ñasti de plasti, vamos, es que alucino pepinillos con quien se crea eso de mí. Yo soy un tío moderno, molo cantidubi dubi dá.
#2 Ángel Garó era y es muy bueno.
Vaya, si este programa destacaba como era el resto...
#17 Un concurso rompedor con lo visto hasta la fecha, por donde desfilaban los mejores humoristas del país (algunos descubiertos por Chicho), donde imperaba el humor....
En casa nos lo pasábamos genial intentando descubrir qué premio escondía cada tarjeta.
Viendo los concursos de hoy en día... Claramente han ido para atrás. No puede extrañarnos que cada año menos gente use la televisión.
#17 Todo era muy cutre, pero lo disfrutábamos como si no pudiera ser mejor.
Te pongo el ejemplo de Mazinger Z, paralizaba a toda la población infantil del país los sábados por la mañana, y visto hoy en día da cosíca. Pero somos personas diferentes.
Fue un programa atrevido, con sus chistes rancios casi prohibidos que sonrojaban al espectador, con un destape que en la época escandalizaba, un fotmato nuevo porqque nuestra dictaadura no lo permitía y al otro laado del televisor, viejos y jóvenes riendo chorradas y sorprendidos por laa ligeraa de sus palabras y de sus escotes.
Compartiendo con ilusión lo premios "un coche o un apartamento" y pensando que eso podría ser tambien nuestro.
Un provraaama que nos mantenía a todos espedtactes, juntos al rededor de un televisión.
#14 Esos chistes rancios estarían ahora casi prohibidos por la autocensura de lo políticamente correcto, y para que en las redes sociales no hagan un llamamiento al boicot, llamando de todo al programa, a la cadena de TV y a los que cuentan los chiste o a todo aquel al que le guste el programa, consiguiendo que los anunciantes se lo piensen dos veces antes de hacer publicidad en una cadena a la que han colgado uno o varios sanbenitos.
En aquella época no estaban en absoluto casi prohibidos esos chistes rancios y a la mayoría tampoco nos sonrojaba ya que no nos preocupábamos tanto por lo que pudiera decir el chiste, ya que era un chiste, no lo decían en serio.
Tampoco nos preocupábamos si se ofendía alguien por un chiste chorra que cuentan en televisón, ni nos escandalizábamos de una forma tan sumamente exagerada y absurda como mucha gente lo hace hoy en día por este tipo de chorradas.
Si alguien se ofende por un chiste que se lo haga mirar, en lugar de obligar a todo el mundo a dejar de decir lo que ofende a esa persona igual sería mejor que se acerque a hasta la consulta de un buen psicólogo, le hace mucha falta.
#18 Tu si que eres un chiste rancio
[sin acritúd]
#19 Peor, hombre, mucho peor que un chiste rancio, donde vamos a parar madredelamorhermosoamoroso.
#18 imagina ahora a alguien como Arévalo, solo contando chistes de gangosos y mariquitas, la que le caería hoy día, denuncias judiciales y políticas por todas partes, medio twitter pidiendo su cabeza... en cierto sentido la situacion ha ido a bastante peor que cuando un señor con bigote se obsesionaba con que la muchacha de turno no mostrara mas carne de la cuenta por el bien de la moral y las buenas costumbres
Chicho Ibañez eatà sobrevalorado...como Antonio Mercero y Valerio Lazarov.
El éxito, mata
Creo que muchos no habéis comprendido el "Un, dos, tres...".
El "Un, dos, tres..." fue un programa que pudo existir en su momento, pero que nunca volvería a ser lo mismo. Precisamente porque el momento permitía hacer este tipo de cosas. La sociedad española por aquel entonces estaba pasando por una época de redefinición. Volvía a tenerse libertad y esa libertad se reflejó en el mismo programa. Antes se podían hacer chistes "delicados" en televisión sin problema. Hoy día estamos en un plan en el que a la tuitera Cassandra le meten finalmente el pufo, y al retrasado que le ha pegado la ostia al que estaba sentado en el bar ha salido de rositas junto al de la sudadera verde que ríe como un asno, han quedado libres porque no ha habido denuncia por parte de la víctima.
Ahora censuramos al "Un, dos, tres..." por sus funestos chistes y sus humoristas decimonónicos, pero por otra parte vivimos entre retrasados mentales a los que dejamos libres después de lo que han hecho.
Señores. Hemos perdido la cordura, o es que jamás la tuvimos.