Eduardo Mendoza (Barcelona, 1943) ha abandonado Londres y vuelve a vivir en Barcelona, al menos hasta que amaine el virus. La semana pasada se puso a la venta una nueva edición de su ensayo ‘Las barbas del profeta’ (Seix Barral), libro publicado hace tres años en la mexicana Fondo de Cultura Económica (FCE) y en el que el autor repasa los temas y asuntos de la que fue su asignatura favorita en el colegio, la Historia Sagrada, “que nos transmitía todo aquello como verdades pero para mí fue una formación literaria muy potente”.
Comentarios
Hay algo todavía peor que la religión: el nacionalismo.
La religión saca el lado bueno de millones de personas: donaciones, colaboración con gente pobre, ayuda a países en desarollo, acogida de sintechos, ... por todo el mundo hay mezquitas, iglesias, sinagogas, templos... que se hacen cargo de gente de la que nadie más se haría cargo y que ayudan a salir adelante a miles de personas cada una.
Ahora que alguien me puto diga en qué cojones ha ayudado jamás el nacionalismo a una sociedad, aparte de en reducir su huella de carbono a base de exterminar a la mayor cantidad de "impuros" posible.
#4 Creo que también hay muchas ONG que nada tienen que ver con la religión y hacen lo mismo. Cuando las personas tienen un sentimiento de compromiso hacia los demás, se pueden conseguir las mismas cosas sin los dogmas que establece la religión, que además hacen irrenconciliables unas religiones con otras.
Un sistema socioeconómico puede ser perfectamente laico y tener medidas de protección que se hagan cargo de los desfavorecidos además de prestar ayuda internacional. No veo la religión necesaria en todo esto.
En cualquier caso concuerdo cien por cien sobre el nacionalismo
#6 Todo eso me parece muy bien, y estoy de acuerdo con ello, pero no invalida en absoluto nada de lo que he dicho en mi comentario.
Este señor dice que hay que reducir al mínimo la religión. Yo le respondo que el nacionalismo (español, vasco, catalán, pangermanista, croata, ...) es algo infinitamente peor y que antes prefiero ver cómo desaparecen los nacionalismos que las religiones.
#7 Bueno, las religiones y el fanatismo que promueven también tienen su buena cantidad de muertos detrás...
#8 Las religiones en sí mismas no suelen promover el fanatismo. Determinadas subsectas dentro de las religiones sí lo promueven, siempre para sus propios intereses, todas las veces en contra del resto de sus correligionarios y acabando con ellos en muchas ocasiones.
Los nacionalismos sin embargo tienen el supremacismo en la sangre.
#6 Y mucho partido político voxemita que hace lo mismo.
#4 Para defender a la religión no hace falta compararla con el nacionalismo, porque muchas veces van de la mano. La religión como el nacionalismo han sido muchas veces causas de guerras. Las religionesxse comportan como estructuras de poder acaparando mucho poder. Aún hoy en día en España siendo menos religiosa que nunca siempre como estructura de poder sigue acaparando poder, las inmatriculacionnes de la iglesia, las clases de religión en los colegios que no son tales sino catequesis. Hay que diferenciar las religiones su parte espiritual de la parte institucional, pero como en todo lo humano el poder y no la libertad es lo que lo condiciona y lo pervierte todo.
El hecho de que hable de Moisés cómo un personaje real indica que no sabe de lo que habla.
La religión, como todo aquello que aleje al ser humano del pensamiento crítico, es obviamente perjudicial. Coincido en eso, aunque yo iría más allá, hay que suprimir todos los incentivos económicos, reducir por completo su presencia en los medios de comunicación públicos y potenciar una educación que muestre estas supercherías como lo que son, algo extraño y ajeno a todo sentido común.
Meneo y leo a continuación.
Mendoza es mi escritor en castellano favorito. En esta entrevista, no obstante, creo que patina un poco. Me choca además porque me da la impresión de que está cascarrabias, cuando solía ser un señor muy amable que soltaba zascas sutiles e ingeniosos. ¿Se habrá Revertizado?
Una frase cazada al vuelo de lo más elocuente:"Las creencias religiosas tienen como origen la ley del menor esfuerzo".
Ahora que está el PSOE al mando seguro que anula el concordato.
¿Y por qué prohíbe Dios comer calamares? Es un tema muy serio: ¿qué refleja esto de la naturaleza humana? ¿por qué nos imponemos limitaciones y castigos? Dicen que tiene un origen sanitario, para evitar comer comida contaminada... No, no, es simplemente para distinguirse de otras civilizaciones y decir: ‘Nosotros somos los que no comemos esto’.
#5 Algunas cosas que dice bien, pero también patina en alguna:
"el cine es por definición realista y no puede reflejar la mitología, o lo que es puramente abstracción, a diferencia de la literatura"
Vale que lo ha dicho refiriéndose a que Moisés era tartamudo y eso no se ve en las películas, pero creo que se le ha ido un poco.
Por qué tú lo digas.
#3 No veo ningún motivo para pensar que sea algo bueno, la verdad.