Nota: "El siguiente extracto proviene de un libro publicado en 1875: Guía de etiqueta de un caballero por Cecil B. Hartley. Las reglas de Hartley pueden tener más de 100, pero son tan ciertas hoy como lo fueron siempre. Hay autenticas joyas - algunas realmente me hicieron sonreir." 1. Incluso si está convencido de que su oponente está absolutamente equivocado, ceda cortésmente, decline mayor discusión, o con destreza varíe a su vez la conversación, pero no defienda obstinadamente su propia opinión hasta enojarse ... Traducción en #1
#1:
1. Incluso si está convencido de que su oponente está absolutamente equivocado, ceda cortésmente, decline mayor discusión, o con destreza varíe a su vez la conversación, pero no defienda obstinadamente su propia opinión hasta enojarse ...
Cuántos hay que, dando su opinión, no como una opinión, sino como una ley, defenderán su posición con frases más tales como: "Bueno, si yo fuera presidente, o gobernador, lo haría," - y al mismo tiempo, al calor de su argumento, se evidencia de que son totalmente incapaces de gobernar su propio temperamento, y que tratarán de convencerle que son perfectamente competentes para hacerse cargo del gobierno de la nación.
2. Conserve, si se quiere, una opinión política determinada, pero no la haga desfilar que en todas las ocasiones, y, sobre todo, no trate de forzar a los demás para que estén de acuerdo con usted. Escuche con calma sus ideas sobre los mismos temas, y si no se ponen de acuerdo, cortésmente difiera, y mientras que su oponente puede configurarlo como un mal político, que sea obligado a admitir que usted es un caballero (o una dama).
3. Nunca interrumpa a alguien que está hablando, es bastante desagradable oficiosamente enunciar un nombre o una fecha sobre la que otros vacilan, a menos que se le pida que lo haga. Otro grave infracción de la etiqueta es avanzar el objeto de la historia que está recitando otra persona, o tomarlo de sus labios para terminarlo en sus propias palabras. Algunas personas alegan como excusa para esta falta de etiqueta que el recitador estropee una buena historia de mala manera, pero esto no arregla el asunto. Sin duda, es de mala educación dar a entender a alguien que no lo consideran capaz de terminar una anécdota que ha comenzado.
4. Es de mala educación poner un aire de cansancio durante un largo discurso de otra persona, y tan grosero mirar el reloj, leer una carta, ojear las hojas de un libro, o en cualquier otra acción que demuestre que usted está cansado del orador o del asunto.
5. En una conversación general, no hable cuando otra persona está hablando, y nunca trate de elevar su voz para ahogar la del otro. Nunca asuma un aire de soberbia, ni hable de una manera dictatorial, deje que su conversación sea siempre amable y franca, libre de todo fingimiento.
6. Nunca, a menos que se le pida hacerlo, hable de su propio negocio o profesión en la sociedad; confinar totalmente su conversación con el tema o el ejercicio de su propia especialidad es bajo de raza y vulgar. Haga que el objeto de la conversación sea apropiado para la compañía en la que está. Una conversación alegre, ligera estará a veces más fuera de lugar que un sermón estaría en una fiesta. Deje que su conversación sea tan grave o alegre como el momento y lugar.
7. En un conflicto, si no se puede conciliar a las partes, retírese. Seguramente hará un enemigo, o tal vez dos, adoptando cualquiera de los lados de un argumento cuando los ponentes hayan perdido los estribos.
8. Nunca, durante una conversación general, trate de concentrar la atención enteramente en sí mismo. Es bastante desagradable entrar en conversación con alguien de un grupo, y tratar de hacerle salir del círculo de la conversación general para hablar con usted a solas.
9. Una persona de verdadera inteligencia y mente cultivada es generalmente modesta. Puede sentir cuando en la sociedad de hoy en día, que sus habilidades intelectuales está por encima de los que le rodean, pero no va a tratar de hacer que sus compañeros sientan su inferioridad, ni tratar de mostrar esta ventaja sobre ellos. Hablará con simplicidad franca de los temas iniciados por los demás, y tratará de evitar comenzar aquello con lo que no se sientan inclinados a discutir. Todo lo que diga estará marcado por la cortesía y deferencia a los sentimientos y opiniones de los demás.
10. Es un gran un logro escuchar con un aire de interés y atención, como lo es hablar bien. Ser un buen oyente es tan indispensable como ser un buen orador, y es en el carácter de oyente donde puede detectar más fácilmente que la persona está acostumbrada a la buena sociedad.
11. Nunca escuche la conversación de dos personas que se han alejado un tanto del grupo. Si están tan cerca que no puede evitar escucharlos, es posible que, con perfecta corrección, cambie su asiento.
12. Haga su propia intervención en la conversación tan modesta y breve como sea compatible con el tema en cuestión, evite discursos e historias largas y tediosas. Si, sin embargo, otros, particularmente un anciano, cuenta una historia muy larga, o una que no es nueva para usted, escuche con respeto hasta que haya terminado, antes de hablar de nuevo.
13. Hable de sí mismo, pero poco. Sus amigos se enterarán de sus virtudes sin forzar que les diga, y usted puede estar seguro de que es igualmente innecesario exponer los fallos de si mismo.
14. Si se entrega a los halagos, también debe someterse a la imputación de la locura y vanidad.
15. Al hablar de sus amigos, no los comparare unos con otros. Hable de los méritos de cada uno, pero no trate de aumentar las virtudes de uno contrastándolos con los vicios de otro.
16. Evite, en una conversación los temas que podrían herir al ausente. Un caballero nunca calumnia o escuchar calumnia.
17. El hombre más ingenioso se convierte enteramente en tedioso y mal educado cuando se esfuerza por acaparar la atención de la compañía en la que debe tomar una parte más modesta.
18. Evite frases hechas, y use citas, pero rara vez. A veces son adiciones muy picantes a la conversación, pero cuando se convierten en un hábito constante, son extremadamente tediosas, y de mal gusto.
19. Evite la pedantería, es un símbolo no de inteligencia, si no de estupidez.
20. Hable con sus propias palabras correctamente; al mismo tiempo, no sea demasiado purista de la corrección formal de las frases.
21. Nunca note si otros cometen errores en el lenguaje. Hacer notar de palabra o buscar tales errores en los que le rodean es excesivamente de mala educación.
22. Si usted es un profesional o científico, evite el uso de términos técnicos. Son de mal gusto, porque muchos no los entienden. Sin embargo, si utiliza inconscientemente tales términos o frases, entonces no cometa el error aún mayor de explicar su significado. Nadie va a darle las gracias por implicar su ignorancia.
23. En conversación con un extranjero que hable su legua de forma imperfecta, escuche con mucha atención, sin embargo, si duda, no proporcione una palabra, o una frase. Por encima de todo, ni con palabras o ni con gestos muestre impaciencia si hace pausas o comete errores. Si usted entiende su idioma, dígalo cuando termine él de hablar primero, esto no es hacer una demostración de su propio conocimiento, sino que es un acto de bondad, como extranjero estará encantado de escuchar y hablar su propio idioma, cuando en un país extraño.
24. Tenga cuidado en la sociedad de nunca hacer el papel de bufón, para que pronto se le conozca como la persona "divertida" de la fiesta, y ningún personaje es tan peligroso para su dignidad. Usted se expone abiertamente tanto a la censura como al mal ridículo, y puede estar seguro de que, por cada persona que se ría con usted, dos se están riendo de usted, y por cada uno que le admire, dos verán sus payasadas con secreto desprecio.
25. Evite la jactancia. Hablar de su dinero, conexiones o los lujos a su mando es de muy mal gusto. Es de muy mal gusto presumir de su intimidad con gente distinguida. Si sus nombres se encuentran naturalmente en el curso de la conversación, está muy bien, pero estar siempre citando, "mi amigo, el gobernador C ", o" mi amigo íntimo, el presidente, " es pomposo y de mal gusto.
26. Mientras rechace el papel de bromista para sí mismo, ni por modales duros o fríos, ni por miradas despectivas, procure examinar la inocente alegría de los demás. Es de un excesivo mal gusto arrastrarse a un tema serio de conversación cuando una agradable distendida charla esté sucediendo a su alrededor. Anímese y gratamente olvide sus pensamientos más serios por el momento, y ganará más popularidad que si enfría al feliz grupo o convierte su inocente alegría en discusiones serias.
27. Cuando sea lanzado en la sociedad de los literatos, no les pregunte acerca de sus obras. Hablar en términos de admiración de cualquier trabajo del autor es de mal gusto; pero puede causarles agrado, si, mediante una cita de sus escritos, o una afortunada referencia sobre ellos, prueba que les ha leído y les aprecia.
28. Es extremadamente grosero y pedante, cuando participe en una conversación general, citar en una lengua extranjera.
29. Utilizar frases que admiten un doble sentido, es poco amable.
30. Si encuentra que se está enojando, o bien recurra a otro tema o guarde silencio. Puede pronunciar, en el calor de la pasión, palabras que nunca usaría en un momento más tranquilo y amargamente arrepentirse que fueran dichas alguna vez.
31. "Nunca hable de sogas con un hombre cuyo padre fue ahorcado" es un proverbio vulgar, pero popular. Evite cuidadosamente qué temas pueden ser interpretadas en personalidades, y mantenga una estricta reserva sobre los asuntos de familia. Evite, si es posible, ver el esqueleto en el armario de su amigo, pero si se le muestra en su especial beneficio, considérelo como gesto de sagrada confianza y nunca traicione su conocimiento a un tercero.
32. Si ha viajado, aunque se esfuerce en mejorar su mente con tales viajes, no hable constantemente de sus peregrinaciones. No hay nada más molesto que un hombre que comienza con cada frase: "Cuando estave en París", o "En Italia vi ..."
33. Al hacer preguntas sobre las personas que no conoce, en un salón, evite el uso de adjetivos, o puede preguntarle a una madre: "¿Quién es esa chica torpe y fea?" Y que le respondan: "Señor, esa es mi hija ".
34. Evite el chisme, en una mujer que es detestable, pero en un hombre es absolutamente despreciable.
35. No ofrezca oficiosamente asistencia o asesoramientos la sociedad en
35. No ofrezca oficiosamente asistencia o asesoramientos la sociedad en general. Nadie se lo agradecerá.
36. Evite la adulación. Un elogio delicado es permisible en la conversación, pero la adulación es ordinaria, grosera, y para las personas sensatas, repugnante. Si halaga a sus superiores, desconfiarán, pensando que tiene algún fin egoísta, si halaga a las damas, le despreciarán, pensando que no tiene otra conversación.
37. Una señora con sentido se sentirá más halagada si conversa con ella sobre temas instructivos, elevados, que si su discurso sólo es el elogio. En este último caso ella concluirá que la considera incapaz de discutir temas mayores, y no puede esperar que esté complacida por haber sido considerada únicamente una persona tonta, vanidosa, que debe ser halagada para tener buen humor.
#15:
Marca España. Quién no ve esto todos los días en la tele, en los bares, en los debates de actualidad económica o del corazón, en cualquier rincón de esta Ejpaña nuestra:
1. si está convencido de que su oponente está absolutamente equivocado, defienda obstinadamente su propia opinión hasta enojarse.
2. haga desfilar que en todas las ocasiones una opinión política determinada, sobre todo, trate de forzar a los demás para que estén de acuerdo con usted.
3. interrumpa a quien esté hablando, avance la historia que está recitando otra persona, o termínela usted mismo con sus propias palabras.
4. ponga un aire de cansancio durante un largo discurso de otra persona, y mire el reloj, lea una carta, ojee las hojas de un libro…
5. hable cuando otra persona está hablando, y trate de elevar su voz para ahogar la del otro. Asuma un aire de soberbia, hable de una manera dictatorial.
6. hable de su propio negocio o profesión en la sociedad; confine totalmente su conversación con el tema o el ejercicio de su propia especialidad.
7. En un conflicto, si no se puede conciliar a las partes, no se retire, permanezca a la expectativa.
8. En una conversación, siempre trate de concentrar la atención enteramente en sí mismo.
9. Si puede sentir que sus habilidades intelectuales está por encima de los que le rodean, trate de hacer que sus compañeros sientan su inferioridad, de mostrar esta ventaja sobre ellos.
10. Ser un buen oyente está sobrevalorado.
11. Trate de escuchar la conversación de dos personas que se han alejado un tanto del grupo. Si están tan lejos que no puede escucharlos, es posible que, con perfecta corrección, cambie su asiento.
12. Haga su propia intervención en la conversación tan larga y tediosa como sea posible con el tema en cuestión.
13. Hable de sí mismo todo lo que pueda. Sus amigos nunca se enterarán lo suficiente de sus virtudes si no lo cuenta usted mismo.
14. Entréguese a los halagos, pero ignore la imputación de la locura y vanidad.
15. Al hablar de sus amigos, compárelos unos con otros. Trate de aumentar las virtudes de uno contrastándolos con los vicios de otro.
16. No evite, en una conversación los temas que podrían herir al ausente.
17. Esfuércese en acaparar la atención.
18. Use numerosas citas y frases hechas, cuantas más mejor. A la gente les encanta.
19. Diga lo que diga usted no es pedante, sólo sabe más que los demás, no tenga miedo de demostrarlo constantemente.
20. Sea muy purista con la corrección formal de las frases, no deje pasar ni una.
21. Haga notar si otros cometen errores en el lenguaje.
22. Si usted es un profesional o científico, no evite el uso de términos técnicos.
23. En conversación con un extranjero que hable su legua de forma imperfecta, escuche sin demasiado atención y ríase de él, si duda, interrúmpale proporcionando una palabra, o una frase. Por encima de todo muestre impaciencia si hace pausas o comete errores.
24. Si considera que se le da bien, conviértase en el divertido de la fiesta, el que siempre cuenta chistes y suelta chascarrillos. No pierda esa oportunidad. La gente se reirá con usted y le admirará.
25. Presuma de sus relaciones con gente distinguida, "mi amigo, el gobernador C ", o" mi amigo íntimo, el presidente”, hable de su dinero y posesiones, jáctese usted que puede.
26. Convierta la alegría de los demás y las charlas intrascendentes con el único afán de divertirse en conversaciones serias y sesudas.
27. Pregúntele a los autores por sus obras, admíreles, adúleles, no se quede corto.
28. Cite en lenguas extranjeras. Queda muy bien.
29. Utilice frases de doble sentido, nunca se es lo suficientemente agudo e ingenioso.
30. Si encuentra que está enojado, no pierda ocasión de despacharse a gusto en una conversación. Para eso están, para deshagorase.
31. Miente la soga en casa del ahorcado. Saque los esqueletos de los armarios delante de los demás, o en su ausencia.
32. Si ha viajado, hable constantemente de sus peregrinaciones: "Cuando estave en París", o "En Italia vi ...", a la gente le encanta que les instruyas con tu experiencia de ciudadano del mundo, le admirarán.
33. Al hacer preguntas sobre personas que no conoce, no se preocupe por herir sensibilidades. Usted dice lo que honestamente piensa.
34. El chisme es bueno. Es divertido. Chismorree todo lo que pueda y más.
35. Ofrezca su ayuda o asesoramientos en temas que no le incumben y de los que no tiene ni idea.
36. Adule. Halague a sus superiores, piropee a las damas. No hay nada que le pueda hacer más popular.
37. Ninguna señora se sentirá halagada si conversa con ella sobre temas instructivos o elevados, sólo les gusta que las elogien. No pierda el tiempo.
#9:
Despues de leer esto me han entrado ganas de dejarme bigote y ponerme monóculo, like a Sir.
#10:
He de admitir que he cometido bastantes de las faltas que estas reglas recogen (muchas veces aquí en Meneame); y aunque las reglas son perfectamente válidas, también es cierto que, a veces, no es tan malo saltarselas... porque no siempre se quiere ser perfectamente educado, en ocasiones hay que ser un poco payaso, o troll, pedante o grosero incluso, si se quiere que la intervención de uno sea escuchada o recordada.
#22:
#11 Una vez me encontré con Paul Macartney en un restaurante en lo alto de la torre eiffel en una ocasión que estuve en Paris y me dijo: Si cuentas esto alguna vez por lo menos escribe bien mi nombre, capullo.
#25:
#17 Regla número 38: No dejes en evidencia un error de numeración en una lista, no te hace parecer más listo el simple hecho de saber contar
1. Incluso si está convencido de que su oponente está absolutamente equivocado, ceda cortésmente, decline mayor discusión, o con destreza varíe a su vez la conversación, pero no defienda obstinadamente su propia opinión hasta enojarse ...
Cuántos hay que, dando su opinión, no como una opinión, sino como una ley, defenderán su posición con frases más tales como: "Bueno, si yo fuera presidente, o gobernador, lo haría," - y al mismo tiempo, al calor de su argumento, se evidencia de que son totalmente incapaces de gobernar su propio temperamento, y que tratarán de convencerle que son perfectamente competentes para hacerse cargo del gobierno de la nación.
2. Conserve, si se quiere, una opinión política determinada, pero no la haga desfilar que en todas las ocasiones, y, sobre todo, no trate de forzar a los demás para que estén de acuerdo con usted. Escuche con calma sus ideas sobre los mismos temas, y si no se ponen de acuerdo, cortésmente difiera, y mientras que su oponente puede configurarlo como un mal político, que sea obligado a admitir que usted es un caballero (o una dama).
3. Nunca interrumpa a alguien que está hablando, es bastante desagradable oficiosamente enunciar un nombre o una fecha sobre la que otros vacilan, a menos que se le pida que lo haga. Otro grave infracción de la etiqueta es avanzar el objeto de la historia que está recitando otra persona, o tomarlo de sus labios para terminarlo en sus propias palabras. Algunas personas alegan como excusa para esta falta de etiqueta que el recitador estropee una buena historia de mala manera, pero esto no arregla el asunto. Sin duda, es de mala educación dar a entender a alguien que no lo consideran capaz de terminar una anécdota que ha comenzado.
4. Es de mala educación poner un aire de cansancio durante un largo discurso de otra persona, y tan grosero mirar el reloj, leer una carta, ojear las hojas de un libro, o en cualquier otra acción que demuestre que usted está cansado del orador o del asunto.
5. En una conversación general, no hable cuando otra persona está hablando, y nunca trate de elevar su voz para ahogar la del otro. Nunca asuma un aire de soberbia, ni hable de una manera dictatorial, deje que su conversación sea siempre amable y franca, libre de todo fingimiento.
6. Nunca, a menos que se le pida hacerlo, hable de su propio negocio o profesión en la sociedad; confinar totalmente su conversación con el tema o el ejercicio de su propia especialidad es bajo de raza y vulgar. Haga que el objeto de la conversación sea apropiado para la compañía en la que está. Una conversación alegre, ligera estará a veces más fuera de lugar que un sermón estaría en una fiesta. Deje que su conversación sea tan grave o alegre como el momento y lugar.
7. En un conflicto, si no se puede conciliar a las partes, retírese. Seguramente hará un enemigo, o tal vez dos, adoptando cualquiera de los lados de un argumento cuando los ponentes hayan perdido los estribos.
8. Nunca, durante una conversación general, trate de concentrar la atención enteramente en sí mismo. Es bastante desagradable entrar en conversación con alguien de un grupo, y tratar de hacerle salir del círculo de la conversación general para hablar con usted a solas.
9. Una persona de verdadera inteligencia y mente cultivada es generalmente modesta. Puede sentir cuando en la sociedad de hoy en día, que sus habilidades intelectuales está por encima de los que le rodean, pero no va a tratar de hacer que sus compañeros sientan su inferioridad, ni tratar de mostrar esta ventaja sobre ellos. Hablará con simplicidad franca de los temas iniciados por los demás, y tratará de evitar comenzar aquello con lo que no se sientan inclinados a discutir. Todo lo que diga estará marcado por la cortesía y deferencia a los sentimientos y opiniones de los demás.
10. Es un gran un logro escuchar con un aire de interés y atención, como lo es hablar bien. Ser un buen oyente es tan indispensable como ser un buen orador, y es en el carácter de oyente donde puede detectar más fácilmente que la persona está acostumbrada a la buena sociedad.
11. Nunca escuche la conversación de dos personas que se han alejado un tanto del grupo. Si están tan cerca que no puede evitar escucharlos, es posible que, con perfecta corrección, cambie su asiento.
12. Haga su propia intervención en la conversación tan modesta y breve como sea compatible con el tema en cuestión, evite discursos e historias largas y tediosas. Si, sin embargo, otros, particularmente un anciano, cuenta una historia muy larga, o una que no es nueva para usted, escuche con respeto hasta que haya terminado, antes de hablar de nuevo.
13. Hable de sí mismo, pero poco. Sus amigos se enterarán de sus virtudes sin forzar que les diga, y usted puede estar seguro de que es igualmente innecesario exponer los fallos de si mismo.
14. Si se entrega a los halagos, también debe someterse a la imputación de la locura y vanidad.
15. Al hablar de sus amigos, no los comparare unos con otros. Hable de los méritos de cada uno, pero no trate de aumentar las virtudes de uno contrastándolos con los vicios de otro.
16. Evite, en una conversación los temas que podrían herir al ausente. Un caballero nunca calumnia o escuchar calumnia.
17. El hombre más ingenioso se convierte enteramente en tedioso y mal educado cuando se esfuerza por acaparar la atención de la compañía en la que debe tomar una parte más modesta.
18. Evite frases hechas, y use citas, pero rara vez. A veces son adiciones muy picantes a la conversación, pero cuando se convierten en un hábito constante, son extremadamente tediosas, y de mal gusto.
19. Evite la pedantería, es un símbolo no de inteligencia, si no de estupidez.
20. Hable con sus propias palabras correctamente; al mismo tiempo, no sea demasiado purista de la corrección formal de las frases.
21. Nunca note si otros cometen errores en el lenguaje. Hacer notar de palabra o buscar tales errores en los que le rodean es excesivamente de mala educación.
22. Si usted es un profesional o científico, evite el uso de términos técnicos. Son de mal gusto, porque muchos no los entienden. Sin embargo, si utiliza inconscientemente tales términos o frases, entonces no cometa el error aún mayor de explicar su significado. Nadie va a darle las gracias por implicar su ignorancia.
23. En conversación con un extranjero que hable su legua de forma imperfecta, escuche con mucha atención, sin embargo, si duda, no proporcione una palabra, o una frase. Por encima de todo, ni con palabras o ni con gestos muestre impaciencia si hace pausas o comete errores. Si usted entiende su idioma, dígalo cuando termine él de hablar primero, esto no es hacer una demostración de su propio conocimiento, sino que es un acto de bondad, como extranjero estará encantado de escuchar y hablar su propio idioma, cuando en un país extraño.
24. Tenga cuidado en la sociedad de nunca hacer el papel de bufón, para que pronto se le conozca como la persona "divertida" de la fiesta, y ningún personaje es tan peligroso para su dignidad. Usted se expone abiertamente tanto a la censura como al mal ridículo, y puede estar seguro de que, por cada persona que se ría con usted, dos se están riendo de usted, y por cada uno que le admire, dos verán sus payasadas con secreto desprecio.
25. Evite la jactancia. Hablar de su dinero, conexiones o los lujos a su mando es de muy mal gusto. Es de muy mal gusto presumir de su intimidad con gente distinguida. Si sus nombres se encuentran naturalmente en el curso de la conversación, está muy bien, pero estar siempre citando, "mi amigo, el gobernador C ", o" mi amigo íntimo, el presidente, " es pomposo y de mal gusto.
26. Mientras rechace el papel de bromista para sí mismo, ni por modales duros o fríos, ni por miradas despectivas, procure examinar la inocente alegría de los demás. Es de un excesivo mal gusto arrastrarse a un tema serio de conversación cuando una agradable distendida charla esté sucediendo a su alrededor. Anímese y gratamente olvide sus pensamientos más serios por el momento, y ganará más popularidad que si enfría al feliz grupo o convierte su inocente alegría en discusiones serias.
27. Cuando sea lanzado en la sociedad de los literatos, no les pregunte acerca de sus obras. Hablar en términos de admiración de cualquier trabajo del autor es de mal gusto; pero puede causarles agrado, si, mediante una cita de sus escritos, o una afortunada referencia sobre ellos, prueba que les ha leído y les aprecia.
28. Es extremadamente grosero y pedante, cuando participe en una conversación general, citar en una lengua extranjera.
29. Utilizar frases que admiten un doble sentido, es poco amable.
30. Si encuentra que se está enojando, o bien recurra a otro tema o guarde silencio. Puede pronunciar, en el calor de la pasión, palabras que nunca usaría en un momento más tranquilo y amargamente arrepentirse que fueran dichas alguna vez.
31. "Nunca hable de sogas con un hombre cuyo padre fue ahorcado" es un proverbio vulgar, pero popular. Evite cuidadosamente qué temas pueden ser interpretadas en personalidades, y mantenga una estricta reserva sobre los asuntos de familia. Evite, si es posible, ver el esqueleto en el armario de su amigo, pero si se le muestra en su especial beneficio, considérelo como gesto de sagrada confianza y nunca traicione su conocimiento a un tercero.
32. Si ha viajado, aunque se esfuerce en mejorar su mente con tales viajes, no hable constantemente de sus peregrinaciones. No hay nada más molesto que un hombre que comienza con cada frase: "Cuando estave en París", o "En Italia vi ..."
33. Al hacer preguntas sobre las personas que no conoce, en un salón, evite el uso de adjetivos, o puede preguntarle a una madre: "¿Quién es esa chica torpe y fea?" Y que le respondan: "Señor, esa es mi hija ".
34. Evite el chisme, en una mujer que es detestable, pero en un hombre es absolutamente despreciable.
35. No ofrezca oficiosamente asistencia o asesoramientos la sociedad en
35. No ofrezca oficiosamente asistencia o asesoramientos la sociedad en general. Nadie se lo agradecerá.
36. Evite la adulación. Un elogio delicado es permisible en la conversación, pero la adulación es ordinaria, grosera, y para las personas sensatas, repugnante. Si halaga a sus superiores, desconfiarán, pensando que tiene algún fin egoísta, si halaga a las damas, le despreciarán, pensando que no tiene otra conversación.
37. Una señora con sentido se sentirá más halagada si conversa con ella sobre temas instructivos, elevados, que si su discurso sólo es el elogio. En este último caso ella concluirá que la considera incapaz de discutir temas mayores, y no puede esperar que esté complacida por haber sido considerada únicamente una persona tonta, vanidosa, que debe ser halagada para tener buen humor.
#1 No entiendo bien tu envio, la mayoria de estas normas es la que se sigue de manera general en la television, y con especial atención en Salvame. Aqui estamos mas que acostumbrados
#43 No, piensa antes de hablar, actualmente solo se habla, habla y habla se habla demasiado. #64 heme aquí y solo te dire Aequam memento rebus in arduis servare mentem
Marca España. Quién no ve esto todos los días en la tele, en los bares, en los debates de actualidad económica o del corazón, en cualquier rincón de esta Ejpaña nuestra:
1. si está convencido de que su oponente está absolutamente equivocado, defienda obstinadamente su propia opinión hasta enojarse.
2. haga desfilar que en todas las ocasiones una opinión política determinada, sobre todo, trate de forzar a los demás para que estén de acuerdo con usted.
3. interrumpa a quien esté hablando, avance la historia que está recitando otra persona, o termínela usted mismo con sus propias palabras.
4. ponga un aire de cansancio durante un largo discurso de otra persona, y mire el reloj, lea una carta, ojee las hojas de un libro…
5. hable cuando otra persona está hablando, y trate de elevar su voz para ahogar la del otro. Asuma un aire de soberbia, hable de una manera dictatorial.
6. hable de su propio negocio o profesión en la sociedad; confine totalmente su conversación con el tema o el ejercicio de su propia especialidad.
7. En un conflicto, si no se puede conciliar a las partes, no se retire, permanezca a la expectativa.
8. En una conversación, siempre trate de concentrar la atención enteramente en sí mismo.
9. Si puede sentir que sus habilidades intelectuales está por encima de los que le rodean, trate de hacer que sus compañeros sientan su inferioridad, de mostrar esta ventaja sobre ellos.
10. Ser un buen oyente está sobrevalorado.
11. Trate de escuchar la conversación de dos personas que se han alejado un tanto del grupo. Si están tan lejos que no puede escucharlos, es posible que, con perfecta corrección, cambie su asiento.
12. Haga su propia intervención en la conversación tan larga y tediosa como sea posible con el tema en cuestión.
13. Hable de sí mismo todo lo que pueda. Sus amigos nunca se enterarán lo suficiente de sus virtudes si no lo cuenta usted mismo.
14. Entréguese a los halagos, pero ignore la imputación de la locura y vanidad.
15. Al hablar de sus amigos, compárelos unos con otros. Trate de aumentar las virtudes de uno contrastándolos con los vicios de otro.
16. No evite, en una conversación los temas que podrían herir al ausente.
17. Esfuércese en acaparar la atención.
18. Use numerosas citas y frases hechas, cuantas más mejor. A la gente les encanta.
19. Diga lo que diga usted no es pedante, sólo sabe más que los demás, no tenga miedo de demostrarlo constantemente.
20. Sea muy purista con la corrección formal de las frases, no deje pasar ni una.
21. Haga notar si otros cometen errores en el lenguaje.
22. Si usted es un profesional o científico, no evite el uso de términos técnicos.
23. En conversación con un extranjero que hable su legua de forma imperfecta, escuche sin demasiado atención y ríase de él, si duda, interrúmpale proporcionando una palabra, o una frase. Por encima de todo muestre impaciencia si hace pausas o comete errores.
24. Si considera que se le da bien, conviértase en el divertido de la fiesta, el que siempre cuenta chistes y suelta chascarrillos. No pierda esa oportunidad. La gente se reirá con usted y le admirará.
25. Presuma de sus relaciones con gente distinguida, "mi amigo, el gobernador C ", o" mi amigo íntimo, el presidente”, hable de su dinero y posesiones, jáctese usted que puede.
26. Convierta la alegría de los demás y las charlas intrascendentes con el único afán de divertirse en conversaciones serias y sesudas.
27. Pregúntele a los autores por sus obras, admíreles, adúleles, no se quede corto.
28. Cite en lenguas extranjeras. Queda muy bien.
29. Utilice frases de doble sentido, nunca se es lo suficientemente agudo e ingenioso.
30. Si encuentra que está enojado, no pierda ocasión de despacharse a gusto en una conversación. Para eso están, para deshagorase.
31. Miente la soga en casa del ahorcado. Saque los esqueletos de los armarios delante de los demás, o en su ausencia.
32. Si ha viajado, hable constantemente de sus peregrinaciones: "Cuando estave en París", o "En Italia vi ...", a la gente le encanta que les instruyas con tu experiencia de ciudadano del mundo, le admirarán.
33. Al hacer preguntas sobre personas que no conoce, no se preocupe por herir sensibilidades. Usted dice lo que honestamente piensa.
34. El chisme es bueno. Es divertido. Chismorree todo lo que pueda y más.
35. Ofrezca su ayuda o asesoramientos en temas que no le incumben y de los que no tiene ni idea.
36. Adule. Halague a sus superiores, piropee a las damas. No hay nada que le pueda hacer más popular.
37. Ninguna señora se sentirá halagada si conversa con ella sobre temas instructivos o elevados, sólo les gusta que las elogien. No pierda el tiempo.
#15 Basta ya de criticar a nuestro país y las costumbres de sus gentes, si no te gusta vete a otro, y si ya estás en otro haznos un favor y no vuelvas.
#54 España da pena y asco, y está llena de hijos de puta y subnormales. ¿Porqué no nos haces un favor y vuelves a comentar en MNM cuando hayas conseguido meter tu cabeza dentro de tu propio culo?
#15 Más que "Marca España" es "Marca mundo actual" porque yo no estoy en España y ese es el pan nuestro de cada día, entre alemanes, franceses, ingleses, brasileños, suecos, etc, etc, etc.
Vamos, que no he encontrado a ningún país cuya gente no esté tocada por este tipo de desidia. Eso es algo del discurso moderno, como podemos ver en la política mundial, no de un país en concreto. De hecho son pocas las personas que no lo hacen.
Esto es cogérsela con papel de fumar. Que conste que meneo porque me parece muy curioso, pero no estoy para nada de acuerdo con muchas de esas reglas. Es curioso cómo nacen estas cosas, son reglas inventadas por un grupo de hombres que, en un momento dado, según sus valores personales y visión de la vida, deciden llamar a algo "bueno" y a algo "malo", y se supone que todos tenemos que seguir esas reglas como borregos al margen de la realidad de cada situación. Esto ocurre a muchos niveles cada día.
A mí me encanta que me cuenten experiencias de otros países (#11, ni tanto, ni tan calvo), por ejemplo, y, si se da una situación en la que a uno le faltan al respeto o le ponen en evidencia, o sencillamente le ponen entre la espada y la pared en una discusión, hay que tener mucho ojo con cómo reaccionar, porque si sigues las reglas que se citan aquí, en algunas ocasiones eso puede significar tu muerte social, laboral, etc. Evitar ser el centro de atención, evitar las frases hechas, llevar la modestia al límite, poner buena cara aunque un orador sea un pesado e incompetente... para muchas situaciones, me parecen reglas absurdas e incluso contraproducentes. Agacha la cabeza, no llames la atención, evita cualquier conflicto y piensa sólo en el qué dirán.
Curiosamente, una parte de estas reglas está destinada a ser una especie de estrategia social que te proteja y cuide tu imagen, pero el efecto puede ser devastadoramente contrario.
Como dice #9, queda gracioso si te dejas bigote, te pones monóculo y juegas a ser un estirado de otra época, pero hoy en día... como que no.
#31 Como todas las reglas, están para saltárselas. Es imposible seguirlas siempre al pie de la letra, y no creo que sea esa su intención.
Son recomendaciones y reglas de educación, en mi opinión bastante correctas incluso hoy en día, hay veces que la gente olvida la paciencia en casa. En la vida se puede ser asertivo sin ser agresivo.
Por ejemplo a mí tampoco me importa escuchar historias de viajes, pero si siempre que me encuentro con una persona de lo único que habla es de sus experiencias y no te deja participar en las conversaciones, pues termina cansando y pierde todo el interés.
#41 Lo gracioso es que si intentas utilizar estas reglas con el 90 % de las personas de la calle, se te cagaran, mearan encima y posteriormente te pisotearan.
Algunas cosas como la verguenza solo tienen utilidad en la mente de las personas que las utilizan para aprovecharse de ellas, o en "ciertas situaciones" en las que todos las aplican, como esto no es asi, no serviran de nada. Aunque queden muy bien sobre el papel.
Personalmente me parece un intento "sutil" de controlar lo que hacen ciertas personas. Macho, si no te gusta lo que hago, con decirme para o pirate, comprendo tu lenguaje, no necesito aprenderme 200 reglas que solo sirven para que no diga lo que a ti no te interesa, Se ser yo mismo, si no te gusta, es tu problema. Y es divertidisimo ser un maleducado, Sobre todo con algunos hp.
#31 Diría que están muy bien, pero claro, no son para seguirlas siempre al pie de la letra. No hay que olvidar el objetivo de cualquier comunicación, tampoco se puede pretender tener una conversación vacía, ni tampoco hay que ser un borrego.
Esta lista no va sólo de educación, si no como bien dices de mantener una imagen políticamente correcta.
#31 Sí, destilan una visión de la vida que se basa en la modestia y en respetar al interlocutor, algo que no me parece tan terrible. Como cualquier sistema de reglas, habrá casos concretos en los que sean contraproducentes, pero si les damos la vuelta tendremos la perfecta descripción de un troll. Desde luego preferiría tratar con gente que las cumple en líneas generales que con gente que las infringe sistemáticamente porque son muy "espontáneos" y tienen una personalidad "desbordante".
He de admitir que he cometido bastantes de las faltas que estas reglas recogen (muchas veces aquí en Meneame); y aunque las reglas son perfectamente válidas, también es cierto que, a veces, no es tan malo saltarselas... porque no siempre se quiere ser perfectamente educado, en ocasiones hay que ser un poco payaso, o troll, pedante o grosero incluso, si se quiere que la intervención de uno sea escuchada o recordada.
#10 Coincido contigo. Yo creo que las normas en general son de perfecta aplicación hoy en día, y mejoraría mucho el humor de todo el mundo y el bienestar general si todos fuésemos más educados.
Pero sí que hay cosas que relajaría. Creo que hoy está mejor visto el sentido del humor y la fata de sentido del ridículo. Una cosa es ser un payaso acaparador de la atención y otra relajarse y perder un poco los papeles. Claro que hay entornos y entornos.
Finalmente, no coincido del todo con la 22. Es cierto que hay que evitar el uso de tecnicismos cuando se habla con gente ajena a una materia. Pero si se desliza alguno, o es inevitable, a mi me gusta que me lo expliquen. No considero que sea insultante, ya que al ser un campo especializado no tengo porqué conocer esos términos, y así aprendo.
#11 Una vez me encontré con Paul Macartney en un restaurante en lo alto de la torre eiffel en una ocasión que estuve en Paris y me dijo: Si cuentas esto alguna vez por lo menos escribe bien mi nombre, capullo.
Cuando en una tapia hay un cartel señalando que esta prohibido mear... es porque hay gente que mea contra esa tapia. Si nadie mease contra la tapia, no tendria sentido prohibirlo.
Esta lista de normas, censurando diferentes comportamientos nos describe fielmente como se solían comportar en esa epoca. Por lo que podemos deducir que no eran mas educados que en la actualidad.
"21. Nunca note si otros cometen errores en el lenguaje. Hacer notar de palabra o buscar tales errores en los que le rodean es excesivamente de mala educación."
Me gustaría saber cuantos talibanes ortográficos de meneame se han dado por aludidos.
Pues algunas están muy bien y otras ya eran mamarrachadas el día en el que se escribieron, no digamos ya ahora. Por ejemplo:
22. Si usted es un profesional o científico, evite el uso de términos técnicos. Son de mal gusto, porque muchos no los entienden. Sin embargo, si utiliza inconscientemente tales términos o frases, entonces no cometa el error aún mayor de explicar su significado. Nadie va a darle las gracias por implicar su ignorancia.
La madre que lo parió... A mí me encanta que me hablen de economía, informática, geología o historia precisamente porque son áreas de las que sé poquísimo y, por lo tanto, tengo muchas cosas interesantes que aprender, aunque sea un conocimiento superficial. Por supuesto hay grados (tampoco te vas a poner a contarle a los vecinos que te encuentras por la escalera lo potente y elegante que es la notación tensorial) pero en general si algún merluzo se ofende cuando le hablan de algo de desconoce no creo que podamos hablar tanto de mala educación del hablante como de complejo de inferioridad por parte del oyente.
#26 no es lo mismo pedir que ofrecer, si tu quieres que yo hable de botánica que es mi campo te hablo, pero es de mal gusto sacar el tema de la botánica con un circulo de amigos que no dominan el tema
#28 Yo creo que no lo es. No todos podemos dominar todas las áreas de trabajo de nuestros amigos. ¿De qué podemos hablar entonces, de algo que tenga que ver con todos y cada uno de los presentes?
Cuando un profesional cuenta una batallita que sea interesante o no depende únicamente de su habilidad y de la anécdota en si. A mí me parece genial cuando un amigo nos salta con "he tenido hoy un lío en el despacho..." y nos cuenta sus luchas de poder entre abogados, fiscales y demás profesionales del derecho, incluso cuando introduce tecnicismos o giros que nos tiene que explicar un poco por encima para que podamos seguir la historia. Igual que si otro cuenta que está jodido porque sus bacterias se pegan al cristal del tanque en el que las cría y por lo tanto tiene que ver cómo las desprende sin usar surfactantes, si alguien rememora cómo su abuelo arregló un carburador sin herramientas en la guerra...
Hablar sólo de cosas que todo el mundo conozca nos relega a conversaciones insulsas de las que es muy difícil aprender algo. Desde luego no está bien que alguien se ponga a soltar cátedra durante 3 horas hablando de algo de lo que sólo él tiene idea pero un aporte de vez en cuando, se pida o no, me parece valiosísimo.
#32 pero es que de nuevo, hablas de algo que tu pides. Si yo quiero algo y alguien me lo ofrece, me siento hasta agradecido como creo que es lo que quieres explicar. Pero no es lo mismo eso que ofrecer conversación gratuira de algo que, aunque uno mismo no lo ve, quizá a los demás les aburra hasta el extremo.
Hay muchísimas otras cosas que nos unen para llevar temas de conversación sin tener que hablar de lo que uno es experto. Si yo cuento una anecdota graciosa que me ha pasado mientras estoy sembrando semillas de una especie amenazada, lo importante no es qué especie sea, sino la anecdota. No puedo "chafar" a la gente que, como es logico, no entienda que importancia tiene esa planta explicandoles que es un endemismo que se da en cierta ecología... lo que si que estarán interesados es en el lío que hubo buscando la azada mientras hacía aquello en lo que soy experto. Espero que se entienda el simil.
Por otro lado, estas reglas entiendo que buscan aplicarse para ser correcto socialmente sobre todo con gente con menos confianza. Yo tambien estoy interesado cuando mis amigos más cercanos me hablan de algún tema muy técnico suyo. Pero realmente no es que estos temas despierten interés ninguno en mi, es la conexión con mi colega lo que hace que me interese sobre qué hace (porque para aprender, se puede aprender cualquier cosa cogiendo un libro al azar de la biblioteca, pero te sientes más interesado a cosas cercanas)
Creo que tu último párrafo es en esencia lo que más o menos intentaban decir en el punto 22.
#26#28 "evite el uso de términos técnicos". No se refiere a que se eviten temas técnicos o científicos, sino que no se usen términos que no puedan entender el resto de personas. No sé, por poner un ejemplo, tú puedes hablar sobre la fotosíntesis, pero intentanto evitar usar términos como "adenosín trifosfato". Obviamente si tú deseas que profundice, pues entonces ya no es de mala educación
#26 Creo que es una norma aplicada a conversaciones generales.
Miralo de otra forma, yo soy gamer pero tradicional, no juego a juegos online pero para estos últimos, los usuarios tienen un vocabulario muy desarrollado y especifico para hablar de tecnicismos y lo cierto es que me da puto asco que lo usen para referirse a juegos más tradicionales porque ni sé ni tengo que saber su argot.
Creo que se refiere a eso más bien, hazte entender teniendo en cuenta con quien te comunicas, y hazte explicar cuando el receptor desee aprender (a mi tambien me encanta que me expliquen de economia u otras cosas)
20. Speak your own language correctly; at the same time do not be too great a stickler for formal correctness of phrases.
21. Never notice it if others make mistakes in language. To notice by word or look such errors in those around you is excessively ill-bred.
La segunda está bien, pero es que hay gente que no tiene para nada en cuenta la primera regla. Ya no es cometer una falta de ortografía o dos o olvidar algún acento, es que no tienen cuidado de nada, creando en ocasiones ambigüedades confusas. Yo muchas veces me quejo de la gente que se niega por sistema a poner los signos de apertura de las interrogaciones y exclamaciones ("¿¡"), ya que en el español la única forma de saber si una oración es interrogativa o no es por las interrogaciones. En otros idiomas cambian las palabras o añaden partículas, pero en el español no es así. Es cierto que por el contesto se puede "adivinar" dónde empieza una interrogación, pero no deja de ser una forma de entorpecer la lectura y crear ambigüedades.
Podéis imaginar el lenguaje como una carretera, las faltas de ortografía serían los baches.
#26: Es muy simple, si la persona con la que hablas no tiene conocimientos de un tema, evita hablarla con palabras muy técnicas o creerá que la estás hablando en chino y pronto se aburrirá de la conversación.
De todas formas, si la otra persona tiene interés, pues bueno, siempre puedes hablarla "normal" y decirla que te interrumpa si no entiende algo.
#26 Puede que a ti te interese o te guste que te hablen sobre esos temas de formas muy técnicas, pero si sois 10 personas tomando un café después de clase y dos se ponen a hablar del barroco postmodernista y de la técnica del granulado stracciatelo, remasterizada por el pintor Jacinto de la Fuente Filgeroa, pues sí, seguro que es un tema muy interesante, para la gente que sabe, pero se transforma en un diálogo de 2 personas con 8 espectadores, que seguramente no les apetezca ser espectadores sino
Si habéis quedado para hablar específicamente del tema, bien. Incluso aunque fuerais 9 que supierais del tema, siempre está el "apartado" que acaba teniendo que mirar el móvil por aburrimiento, que a su vez le parecerá a los otros nueve una falta de respeto, cuando en realidad es su culpa, ya que han elegido un tema en el que no todos los presentes pueden hablar.
A eso se refiere, no que haya temas tabúes. Si me preguntan sobre física estando con más gente, yo siempre intento hablar de famosos cruzando salas llenas de gente o de pelotas que atraviesan a la vez dos rendijas. No hablo en términos técnicos de acoplamientos másicos de campos si no es estrictamente necesario, para que la gente, aunque no sepa nada de física, pueda entender y participar de la conversación.
Y pensar que la mayoría de estas reglas son de sentido común y cualquier persona con dos dedos de frente y sobretodo que sea modesta las aplica de forma automática... pero claro, hoy día cada vez son menos esas personas.
Por lo general suelo aceptar cualquier tipo de comentario o consejo pronunciado por alguien llamado Cecil, pero si es que se llama Cecil B. ya pierdo la objetividad.
Comentarios
1. Incluso si está convencido de que su oponente está absolutamente equivocado, ceda cortésmente, decline mayor discusión, o con destreza varíe a su vez la conversación, pero no defienda obstinadamente su propia opinión hasta enojarse ...
Cuántos hay que, dando su opinión, no como una opinión, sino como una ley, defenderán su posición con frases más tales como: "Bueno, si yo fuera presidente, o gobernador, lo haría," - y al mismo tiempo, al calor de su argumento, se evidencia de que son totalmente incapaces de gobernar su propio temperamento, y que tratarán de convencerle que son perfectamente competentes para hacerse cargo del gobierno de la nación.
2. Conserve, si se quiere, una opinión política determinada, pero no la haga desfilar que en todas las ocasiones, y, sobre todo, no trate de forzar a los demás para que estén de acuerdo con usted. Escuche con calma sus ideas sobre los mismos temas, y si no se ponen de acuerdo, cortésmente difiera, y mientras que su oponente puede configurarlo como un mal político, que sea obligado a admitir que usted es un caballero (o una dama).
3. Nunca interrumpa a alguien que está hablando, es bastante desagradable oficiosamente enunciar un nombre o una fecha sobre la que otros vacilan, a menos que se le pida que lo haga. Otro grave infracción de la etiqueta es avanzar el objeto de la historia que está recitando otra persona, o tomarlo de sus labios para terminarlo en sus propias palabras. Algunas personas alegan como excusa para esta falta de etiqueta que el recitador estropee una buena historia de mala manera, pero esto no arregla el asunto. Sin duda, es de mala educación dar a entender a alguien que no lo consideran capaz de terminar una anécdota que ha comenzado.
4. Es de mala educación poner un aire de cansancio durante un largo discurso de otra persona, y tan grosero mirar el reloj, leer una carta, ojear las hojas de un libro, o en cualquier otra acción que demuestre que usted está cansado del orador o del asunto.
5. En una conversación general, no hable cuando otra persona está hablando, y nunca trate de elevar su voz para ahogar la del otro. Nunca asuma un aire de soberbia, ni hable de una manera dictatorial, deje que su conversación sea siempre amable y franca, libre de todo fingimiento.
6. Nunca, a menos que se le pida hacerlo, hable de su propio negocio o profesión en la sociedad; confinar totalmente su conversación con el tema o el ejercicio de su propia especialidad es bajo de raza y vulgar. Haga que el objeto de la conversación sea apropiado para la compañía en la que está. Una conversación alegre, ligera estará a veces más fuera de lugar que un sermón estaría en una fiesta. Deje que su conversación sea tan grave o alegre como el momento y lugar.
7. En un conflicto, si no se puede conciliar a las partes, retírese. Seguramente hará un enemigo, o tal vez dos, adoptando cualquiera de los lados de un argumento cuando los ponentes hayan perdido los estribos.
8. Nunca, durante una conversación general, trate de concentrar la atención enteramente en sí mismo. Es bastante desagradable entrar en conversación con alguien de un grupo, y tratar de hacerle salir del círculo de la conversación general para hablar con usted a solas.
9. Una persona de verdadera inteligencia y mente cultivada es generalmente modesta. Puede sentir cuando en la sociedad de hoy en día, que sus habilidades intelectuales está por encima de los que le rodean, pero no va a tratar de hacer que sus compañeros sientan su inferioridad, ni tratar de mostrar esta ventaja sobre ellos. Hablará con simplicidad franca de los temas iniciados por los demás, y tratará de evitar comenzar aquello con lo que no se sientan inclinados a discutir. Todo lo que diga estará marcado por la cortesía y deferencia a los sentimientos y opiniones de los demás.
10. Es un gran un logro escuchar con un aire de interés y atención, como lo es hablar bien. Ser un buen oyente es tan indispensable como ser un buen orador, y es en el carácter de oyente donde puede detectar más fácilmente que la persona está acostumbrada a la buena sociedad.
11. Nunca escuche la conversación de dos personas que se han alejado un tanto del grupo. Si están tan cerca que no puede evitar escucharlos, es posible que, con perfecta corrección, cambie su asiento.
12. Haga su propia intervención en la conversación tan modesta y breve como sea compatible con el tema en cuestión, evite discursos e historias largas y tediosas. Si, sin embargo, otros, particularmente un anciano, cuenta una historia muy larga, o una que no es nueva para usted, escuche con respeto hasta que haya terminado, antes de hablar de nuevo.
13. Hable de sí mismo, pero poco. Sus amigos se enterarán de sus virtudes sin forzar que les diga, y usted puede estar seguro de que es igualmente innecesario exponer los fallos de si mismo.
14. Si se entrega a los halagos, también debe someterse a la imputación de la locura y vanidad.
15. Al hablar de sus amigos, no los comparare unos con otros. Hable de los méritos de cada uno, pero no trate de aumentar las virtudes de uno contrastándolos con los vicios de otro.
16. Evite, en una conversación los temas que podrían herir al ausente. Un caballero nunca calumnia o escuchar calumnia.
17. El hombre más ingenioso se convierte enteramente en tedioso y mal educado cuando se esfuerza por acaparar la atención de la compañía en la que debe tomar una parte más modesta.
18. Evite frases hechas, y use citas, pero rara vez. A veces son adiciones muy picantes a la conversación, pero cuando se convierten en un hábito constante, son extremadamente tediosas, y de mal gusto.
19. Evite la pedantería, es un símbolo no de inteligencia, si no de estupidez.
20. Hable con sus propias palabras correctamente; al mismo tiempo, no sea demasiado purista de la corrección formal de las frases.
21. Nunca note si otros cometen errores en el lenguaje. Hacer notar de palabra o buscar tales errores en los que le rodean es excesivamente de mala educación.
22. Si usted es un profesional o científico, evite el uso de términos técnicos. Son de mal gusto, porque muchos no los entienden. Sin embargo, si utiliza inconscientemente tales términos o frases, entonces no cometa el error aún mayor de explicar su significado. Nadie va a darle las gracias por implicar su ignorancia.
23. En conversación con un extranjero que hable su legua de forma imperfecta, escuche con mucha atención, sin embargo, si duda, no proporcione una palabra, o una frase. Por encima de todo, ni con palabras o ni con gestos muestre impaciencia si hace pausas o comete errores. Si usted entiende su idioma, dígalo cuando termine él de hablar primero, esto no es hacer una demostración de su propio conocimiento, sino que es un acto de bondad, como extranjero estará encantado de escuchar y hablar su propio idioma, cuando en un país extraño.
24. Tenga cuidado en la sociedad de nunca hacer el papel de bufón, para que pronto se le conozca como la persona "divertida" de la fiesta, y ningún personaje es tan peligroso para su dignidad. Usted se expone abiertamente tanto a la censura como al mal ridículo, y puede estar seguro de que, por cada persona que se ría con usted, dos se están riendo de usted, y por cada uno que le admire, dos verán sus payasadas con secreto desprecio.
25. Evite la jactancia. Hablar de su dinero, conexiones o los lujos a su mando es de muy mal gusto. Es de muy mal gusto presumir de su intimidad con gente distinguida. Si sus nombres se encuentran naturalmente en el curso de la conversación, está muy bien, pero estar siempre citando, "mi amigo, el gobernador C ", o" mi amigo íntimo, el presidente, " es pomposo y de mal gusto.
26. Mientras rechace el papel de bromista para sí mismo, ni por modales duros o fríos, ni por miradas despectivas, procure examinar la inocente alegría de los demás. Es de un excesivo mal gusto arrastrarse a un tema serio de conversación cuando una agradable distendida charla esté sucediendo a su alrededor. Anímese y gratamente olvide sus pensamientos más serios por el momento, y ganará más popularidad que si enfría al feliz grupo o convierte su inocente alegría en discusiones serias.
27. Cuando sea lanzado en la sociedad de los literatos, no les pregunte acerca de sus obras. Hablar en términos de admiración de cualquier trabajo del autor es de mal gusto; pero puede causarles agrado, si, mediante una cita de sus escritos, o una afortunada referencia sobre ellos, prueba que les ha leído y les aprecia.
28. Es extremadamente grosero y pedante, cuando participe en una conversación general, citar en una lengua extranjera.
29. Utilizar frases que admiten un doble sentido, es poco amable.
30. Si encuentra que se está enojando, o bien recurra a otro tema o guarde silencio. Puede pronunciar, en el calor de la pasión, palabras que nunca usaría en un momento más tranquilo y amargamente arrepentirse que fueran dichas alguna vez.
31. "Nunca hable de sogas con un hombre cuyo padre fue ahorcado" es un proverbio vulgar, pero popular. Evite cuidadosamente qué temas pueden ser interpretadas en personalidades, y mantenga una estricta reserva sobre los asuntos de familia. Evite, si es posible, ver el esqueleto en el armario de su amigo, pero si se le muestra en su especial beneficio, considérelo como gesto de sagrada confianza y nunca traicione su conocimiento a un tercero.
32. Si ha viajado, aunque se esfuerce en mejorar su mente con tales viajes, no hable constantemente de sus peregrinaciones. No hay nada más molesto que un hombre que comienza con cada frase: "Cuando estave en París", o "En Italia vi ..."
33. Al hacer preguntas sobre las personas que no conoce, en un salón, evite el uso de adjetivos, o puede preguntarle a una madre: "¿Quién es esa chica torpe y fea?" Y que le respondan: "Señor, esa es mi hija ".
34. Evite el chisme, en una mujer que es detestable, pero en un hombre es absolutamente despreciable.
35. No ofrezca oficiosamente asistencia o asesoramientos la sociedad en
#1 falta la traduccion del 35, 36, y 37.... un articulo de por si grandioso!
#2 Oppps! Gracias, aqui van
35. No ofrezca oficiosamente asistencia o asesoramientos la sociedad en general. Nadie se lo agradecerá.
36. Evite la adulación. Un elogio delicado es permisible en la conversación, pero la adulación es ordinaria, grosera, y para las personas sensatas, repugnante. Si halaga a sus superiores, desconfiarán, pensando que tiene algún fin egoísta, si halaga a las damas, le despreciarán, pensando que no tiene otra conversación.
37. Una señora con sentido se sentirá más halagada si conversa con ella sobre temas instructivos, elevados, que si su discurso sólo es el elogio. En este último caso ella concluirá que la considera incapaz de discutir temas mayores, y no puede esperar que esté complacida por haber sido considerada únicamente una persona tonta, vanidosa, que debe ser halagada para tener buen humor.
#1 No entiendo bien tu envio, la mayoria de estas normas es la que se sigue de manera general en la television, y con especial atención en Salvame. Aqui estamos mas que acostumbrados
#1 que gente más atrasada estos seres humanos de hace 2 o 3 siglos, menos mal que vivimos en el siglo XXI y todo es chachipiruli, avanzado y correcto
#1 solo por la traducción merece un meneo
#1 Lo resumo, para cumplir todas a la vez: ¡Callate la boca!
#43 No, piensa antes de hablar, actualmente solo se habla, habla y habla se habla demasiado.
#64 heme aquí y solo te dire Aequam memento rebus in arduis servare mentem
#1 29. Utilizar frases que admiten un doble sentido, es poco amable.
El que escribió esto no hablaba español
Marca España. Quién no ve esto todos los días en la tele, en los bares, en los debates de actualidad económica o del corazón, en cualquier rincón de esta Ejpaña nuestra:
1. si está convencido de que su oponente está absolutamente equivocado, defienda obstinadamente su propia opinión hasta enojarse.
2. haga desfilar que en todas las ocasiones una opinión política determinada, sobre todo, trate de forzar a los demás para que estén de acuerdo con usted.
3. interrumpa a quien esté hablando, avance la historia que está recitando otra persona, o termínela usted mismo con sus propias palabras.
4. ponga un aire de cansancio durante un largo discurso de otra persona, y mire el reloj, lea una carta, ojee las hojas de un libro…
5. hable cuando otra persona está hablando, y trate de elevar su voz para ahogar la del otro. Asuma un aire de soberbia, hable de una manera dictatorial.
6. hable de su propio negocio o profesión en la sociedad; confine totalmente su conversación con el tema o el ejercicio de su propia especialidad.
7. En un conflicto, si no se puede conciliar a las partes, no se retire, permanezca a la expectativa.
8. En una conversación, siempre trate de concentrar la atención enteramente en sí mismo.
9. Si puede sentir que sus habilidades intelectuales está por encima de los que le rodean, trate de hacer que sus compañeros sientan su inferioridad, de mostrar esta ventaja sobre ellos.
10. Ser un buen oyente está sobrevalorado.
11. Trate de escuchar la conversación de dos personas que se han alejado un tanto del grupo. Si están tan lejos que no puede escucharlos, es posible que, con perfecta corrección, cambie su asiento.
12. Haga su propia intervención en la conversación tan larga y tediosa como sea posible con el tema en cuestión.
13. Hable de sí mismo todo lo que pueda. Sus amigos nunca se enterarán lo suficiente de sus virtudes si no lo cuenta usted mismo.
14. Entréguese a los halagos, pero ignore la imputación de la locura y vanidad.
15. Al hablar de sus amigos, compárelos unos con otros. Trate de aumentar las virtudes de uno contrastándolos con los vicios de otro.
16. No evite, en una conversación los temas que podrían herir al ausente.
17. Esfuércese en acaparar la atención.
18. Use numerosas citas y frases hechas, cuantas más mejor. A la gente les encanta.
19. Diga lo que diga usted no es pedante, sólo sabe más que los demás, no tenga miedo de demostrarlo constantemente.
20. Sea muy purista con la corrección formal de las frases, no deje pasar ni una.
21. Haga notar si otros cometen errores en el lenguaje.
22. Si usted es un profesional o científico, no evite el uso de términos técnicos.
23. En conversación con un extranjero que hable su legua de forma imperfecta, escuche sin demasiado atención y ríase de él, si duda, interrúmpale proporcionando una palabra, o una frase. Por encima de todo muestre impaciencia si hace pausas o comete errores.
24. Si considera que se le da bien, conviértase en el divertido de la fiesta, el que siempre cuenta chistes y suelta chascarrillos. No pierda esa oportunidad. La gente se reirá con usted y le admirará.
25. Presuma de sus relaciones con gente distinguida, "mi amigo, el gobernador C ", o" mi amigo íntimo, el presidente”, hable de su dinero y posesiones, jáctese usted que puede.
26. Convierta la alegría de los demás y las charlas intrascendentes con el único afán de divertirse en conversaciones serias y sesudas.
27. Pregúntele a los autores por sus obras, admíreles, adúleles, no se quede corto.
28. Cite en lenguas extranjeras. Queda muy bien.
29. Utilice frases de doble sentido, nunca se es lo suficientemente agudo e ingenioso.
30. Si encuentra que está enojado, no pierda ocasión de despacharse a gusto en una conversación. Para eso están, para deshagorase.
31. Miente la soga en casa del ahorcado. Saque los esqueletos de los armarios delante de los demás, o en su ausencia.
32. Si ha viajado, hable constantemente de sus peregrinaciones: "Cuando estave en París", o "En Italia vi ...", a la gente le encanta que les instruyas con tu experiencia de ciudadano del mundo, le admirarán.
33. Al hacer preguntas sobre personas que no conoce, no se preocupe por herir sensibilidades. Usted dice lo que honestamente piensa.
34. El chisme es bueno. Es divertido. Chismorree todo lo que pueda y más.
35. Ofrezca su ayuda o asesoramientos en temas que no le incumben y de los que no tiene ni idea.
36. Adule. Halague a sus superiores, piropee a las damas. No hay nada que le pueda hacer más popular.
37. Ninguna señora se sentirá halagada si conversa con ella sobre temas instructivos o elevados, sólo les gusta que las elogien. No pierda el tiempo.
#15 Lo has clavado. Así somos , así nos va
#15 31. Miente la soga en casa del ahorcado.
Que mentirosa!
#15 eso parece el manual de instrucciones de las discusiones de Homer Simpson
#15 No creo que sea exclusivo de España, pero a un español se le entiende mejor por aquello del idioma.
#50... y por los gritos que pega
#15 Basta ya de criticar a nuestro país y las costumbres de sus gentes, si no te gusta vete a otro, y si ya estás en otro haznos un favor y no vuelvas.
#54 España da pena y asco, y está llena de hijos de puta y subnormales. ¿Porqué no nos haces un favor y vuelves a comentar en MNM cuando hayas conseguido meter tu cabeza dentro de tu propio culo?
#15 Más que "Marca España" es "Marca mundo actual" porque yo no estoy en España y ese es el pan nuestro de cada día, entre alemanes, franceses, ingleses, brasileños, suecos, etc, etc, etc.
Vamos, que no he encontrado a ningún país cuya gente no esté tocada por este tipo de desidia. Eso es algo del discurso moderno, como podemos ver en la política mundial, no de un país en concreto. De hecho son pocas las personas que no lo hacen.
#15 Muy buen comentario. Quisiera poder votarte varias veces, pero Meneame no lo permite.
Despues de leer esto me han entrado ganas de dejarme bigote y ponerme monóculo, like a Sir.
Esto es cogérsela con papel de fumar. Que conste que meneo porque me parece muy curioso, pero no estoy para nada de acuerdo con muchas de esas reglas. Es curioso cómo nacen estas cosas, son reglas inventadas por un grupo de hombres que, en un momento dado, según sus valores personales y visión de la vida, deciden llamar a algo "bueno" y a algo "malo", y se supone que todos tenemos que seguir esas reglas como borregos al margen de la realidad de cada situación. Esto ocurre a muchos niveles cada día.
A mí me encanta que me cuenten experiencias de otros países (#11, ni tanto, ni tan calvo), por ejemplo, y, si se da una situación en la que a uno le faltan al respeto o le ponen en evidencia, o sencillamente le ponen entre la espada y la pared en una discusión, hay que tener mucho ojo con cómo reaccionar, porque si sigues las reglas que se citan aquí, en algunas ocasiones eso puede significar tu muerte social, laboral, etc. Evitar ser el centro de atención, evitar las frases hechas, llevar la modestia al límite, poner buena cara aunque un orador sea un pesado e incompetente... para muchas situaciones, me parecen reglas absurdas e incluso contraproducentes. Agacha la cabeza, no llames la atención, evita cualquier conflicto y piensa sólo en el qué dirán.
Curiosamente, una parte de estas reglas está destinada a ser una especie de estrategia social que te proteja y cuide tu imagen, pero el efecto puede ser devastadoramente contrario.
Como dice #9, queda gracioso si te dejas bigote, te pones monóculo y juegas a ser un estirado de otra época, pero hoy en día... como que no.
#31 Como todas las reglas, están para saltárselas. Es imposible seguirlas siempre al pie de la letra, y no creo que sea esa su intención.
Son recomendaciones y reglas de educación, en mi opinión bastante correctas incluso hoy en día, hay veces que la gente olvida la paciencia en casa. En la vida se puede ser asertivo sin ser agresivo.
Por ejemplo a mí tampoco me importa escuchar historias de viajes, pero si siempre que me encuentro con una persona de lo único que habla es de sus experiencias y no te deja participar en las conversaciones, pues termina cansando y pierde todo el interés.
Como todo el abuso de las cosas es malo
#41 Lo gracioso es que si intentas utilizar estas reglas con el 90 % de las personas de la calle, se te cagaran, mearan encima y posteriormente te pisotearan.
Algunas cosas como la verguenza solo tienen utilidad en la mente de las personas que las utilizan para aprovecharse de ellas, o en "ciertas situaciones" en las que todos las aplican, como esto no es asi, no serviran de nada. Aunque queden muy bien sobre el papel.
Personalmente me parece un intento "sutil" de controlar lo que hacen ciertas personas. Macho, si no te gusta lo que hago, con decirme para o pirate, comprendo tu lenguaje, no necesito aprenderme 200 reglas que solo sirven para que no diga lo que a ti no te interesa, Se ser yo mismo, si no te gusta, es tu problema. Y es divertidisimo ser un maleducado, Sobre todo con algunos hp.
#52 Entonces no tiene sentido que nos gastemos leyéndote...
#56 Haz lo que consideres oportuno, yo hare lo mismo...
#57 Pon una carita así al final , queda mejor...
#31 Diría que están muy bien, pero claro, no son para seguirlas siempre al pie de la letra. No hay que olvidar el objetivo de cualquier comunicación, tampoco se puede pretender tener una conversación vacía, ni tampoco hay que ser un borrego.
Esta lista no va sólo de educación, si no como bien dices de mantener una imagen políticamente correcta.
#31 Sí, destilan una visión de la vida que se basa en la modestia y en respetar al interlocutor, algo que no me parece tan terrible. Como cualquier sistema de reglas, habrá casos concretos en los que sean contraproducentes, pero si les damos la vuelta tendremos la perfecta descripción de un troll. Desde luego preferiría tratar con gente que las cumple en líneas generales que con gente que las infringe sistemáticamente porque son muy "espontáneos" y tienen una personalidad "desbordante".
#9 Bender: "(Fry) es tan rico que creo que voy a empezar a usar monóculo".
#9 Estas son las reglas a las que estamos acostumbrados en Menéame. Somos unos gentlemen.
Siguen siendo válidas hoy en día
He de admitir que he cometido bastantes de las faltas que estas reglas recogen (muchas veces aquí en Meneame); y aunque las reglas son perfectamente válidas, también es cierto que, a veces, no es tan malo saltarselas... porque no siempre se quiere ser perfectamente educado, en ocasiones hay que ser un poco payaso, o troll, pedante o grosero incluso, si se quiere que la intervención de uno sea escuchada o recordada.
En cualquier caso, gran aporte. Gracias #0
#10 Coincido contigo. Yo creo que las normas en general son de perfecta aplicación hoy en día, y mejoraría mucho el humor de todo el mundo y el bienestar general si todos fuésemos más educados.
Pero sí que hay cosas que relajaría. Creo que hoy está mejor visto el sentido del humor y la fata de sentido del ridículo. Una cosa es ser un payaso acaparador de la atención y otra relajarse y perder un poco los papeles. Claro que hay entornos y entornos.
Finalmente, no coincido del todo con la 22. Es cierto que hay que evitar el uso de tecnicismos cuando se habla con gente ajena a una materia. Pero si se desliza alguno, o es inevitable, a mi me gusta que me lo expliquen. No considero que sea insultante, ya que al ser un campo especializado no tengo porqué conocer esos términos, y así aprendo.
#12 En realidad lo que quiere decir es que no sueltes la explicación sin más, sin que te pregunten o te hagan un gesto de no haber comprendido.
La verdad es que es un poco tontería ofenderse por algo así, pero el texto admite implícitamente que no lo considera ofensivo si te preguntan primero.
la 4 es aplicable a teléfonos celulares, hoy en día
No hable de corrupción en presencia de alguien de PP, o incluso del Psoe o CiU.
#4 Tío, en serio, ya aburren los chistes de políticos hasta en la sopa. Cansino que resultan...
#63 no son chistes.
que pedante me parece la número 32, odio a la gente que estuvo hace 10 años un verano en londres y no para de hablar de ello
#11 Una vez me encontré con Paul Macartney en un restaurante en lo alto de la torre eiffel en una ocasión que estuve en Paris y me dijo: Si cuentas esto alguna vez por lo menos escribe bien mi nombre, capullo.
Cuando en una tapia hay un cartel señalando que esta prohibido mear... es porque hay gente que mea contra esa tapia. Si nadie mease contra la tapia, no tendria sentido prohibirlo.
Esta lista de normas, censurando diferentes comportamientos nos describe fielmente como se solían comportar en esa epoca. Por lo que podemos deducir que no eran mas educados que en la actualidad.
Tan ciertas, todas ellas, como cuando se escribieron.
Pues vaya reuniones más aburridas si todo el mundo siguiese estas reglas ...
"Nunca hable de sogas con un hombre cuyo padre fue ahorcado" LOL
"21. Nunca note si otros cometen errores en el lenguaje. Hacer notar de palabra o buscar tales errores en los que le rodean es excesivamente de mala educación."
Me gustaría saber cuantos talibanes ortográficos de meneame se han dado por aludidos.
Después de todas estas recomendaciones está claro que lo único inteligente que se puede hacer es callar.
¿pero quien ha hecho esas reglas ? ¿ acaso quiere acabar con internet ?
pd: me ha encantado.
"29. Utilizar frases que admiten un doble sentido, es poco amable."
Es posible. Pero hay ocasiones que requieren, en defensa propia, ser poco amable.
Qué afortunados somos de que los usuarios de menéame sigan siempre esas reglas. Ejem, ejem.
Relevant xkcd http://xkcd.com/1227/
Falta la de que cuando se forma un corrillo alguien se quede dándole la espalda (inadvertidamente) a otro.
Y todas estas reglas se resumen en una: Sea vd. políticamente correcto y olvídese de comunicarse con el prójimo.
Mi favorita para MNM: 19. Evite la pedantería, es un símbolo no de inteligencia, si no de estupidez.
Qué cabrón el que ha escrito eso, quiere que Menéame implosione.
Por qué pone el titular 38 si son 37? mmm parece ser equivocación de la propia fuente
#17
Regla número 38: No dejes en evidencia un error de numeración en una lista, no te hace parecer más listo el simple hecho de saber contar
#25 ni las he mirado todas, solo me fije en los titulares que se contradecian.
Para quien no lo conozca, recomiendo el blog de la noticia: "The art of manliness", una joya llena de artículos interesantes.
Pues algunas están muy bien y otras ya eran mamarrachadas el día en el que se escribieron, no digamos ya ahora. Por ejemplo:
22. Si usted es un profesional o científico, evite el uso de términos técnicos. Son de mal gusto, porque muchos no los entienden. Sin embargo, si utiliza inconscientemente tales términos o frases, entonces no cometa el error aún mayor de explicar su significado. Nadie va a darle las gracias por implicar su ignorancia.
La madre que lo parió... A mí me encanta que me hablen de economía, informática, geología o historia precisamente porque son áreas de las que sé poquísimo y, por lo tanto, tengo muchas cosas interesantes que aprender, aunque sea un conocimiento superficial. Por supuesto hay grados (tampoco te vas a poner a contarle a los vecinos que te encuentras por la escalera lo potente y elegante que es la notación tensorial) pero en general si algún merluzo se ofende cuando le hablan de algo de desconoce no creo que podamos hablar tanto de mala educación del hablante como de complejo de inferioridad por parte del oyente.
#26 no es lo mismo pedir que ofrecer, si tu quieres que yo hable de botánica que es mi campo te hablo, pero es de mal gusto sacar el tema de la botánica con un circulo de amigos que no dominan el tema
#28 Yo creo que no lo es. No todos podemos dominar todas las áreas de trabajo de nuestros amigos. ¿De qué podemos hablar entonces, de algo que tenga que ver con todos y cada uno de los presentes?
Cuando un profesional cuenta una batallita que sea interesante o no depende únicamente de su habilidad y de la anécdota en si. A mí me parece genial cuando un amigo nos salta con "he tenido hoy un lío en el despacho..." y nos cuenta sus luchas de poder entre abogados, fiscales y demás profesionales del derecho, incluso cuando introduce tecnicismos o giros que nos tiene que explicar un poco por encima para que podamos seguir la historia. Igual que si otro cuenta que está jodido porque sus bacterias se pegan al cristal del tanque en el que las cría y por lo tanto tiene que ver cómo las desprende sin usar surfactantes, si alguien rememora cómo su abuelo arregló un carburador sin herramientas en la guerra...
Hablar sólo de cosas que todo el mundo conozca nos relega a conversaciones insulsas de las que es muy difícil aprender algo. Desde luego no está bien que alguien se ponga a soltar cátedra durante 3 horas hablando de algo de lo que sólo él tiene idea pero un aporte de vez en cuando, se pida o no, me parece valiosísimo.
#32 pero es que de nuevo, hablas de algo que tu pides. Si yo quiero algo y alguien me lo ofrece, me siento hasta agradecido como creo que es lo que quieres explicar. Pero no es lo mismo eso que ofrecer conversación gratuira de algo que, aunque uno mismo no lo ve, quizá a los demás les aburra hasta el extremo.
Hay muchísimas otras cosas que nos unen para llevar temas de conversación sin tener que hablar de lo que uno es experto. Si yo cuento una anecdota graciosa que me ha pasado mientras estoy sembrando semillas de una especie amenazada, lo importante no es qué especie sea, sino la anecdota. No puedo "chafar" a la gente que, como es logico, no entienda que importancia tiene esa planta explicandoles que es un endemismo que se da en cierta ecología... lo que si que estarán interesados es en el lío que hubo buscando la azada mientras hacía aquello en lo que soy experto. Espero que se entienda el simil.
Por otro lado, estas reglas entiendo que buscan aplicarse para ser correcto socialmente sobre todo con gente con menos confianza. Yo tambien estoy interesado cuando mis amigos más cercanos me hablan de algún tema muy técnico suyo. Pero realmente no es que estos temas despierten interés ninguno en mi, es la conexión con mi colega lo que hace que me interese sobre qué hace (porque para aprender, se puede aprender cualquier cosa cogiendo un libro al azar de la biblioteca, pero te sientes más interesado a cosas cercanas)
Creo que tu último párrafo es en esencia lo que más o menos intentaban decir en el punto 22.
#26 #28 "evite el uso de términos técnicos". No se refiere a que se eviten temas técnicos o científicos, sino que no se usen términos que no puedan entender el resto de personas. No sé, por poner un ejemplo, tú puedes hablar sobre la fotosíntesis, pero intentanto evitar usar términos como "adenosín trifosfato". Obviamente si tú deseas que profundice, pues entonces ya no es de mala educación
#26 Creo que es una norma aplicada a conversaciones generales.
Miralo de otra forma, yo soy gamer pero tradicional, no juego a juegos online pero para estos últimos, los usuarios tienen un vocabulario muy desarrollado y especifico para hablar de tecnicismos y lo cierto es que me da puto asco que lo usen para referirse a juegos más tradicionales porque ni sé ni tengo que saber su argot.
Creo que se refiere a eso más bien, hazte entender teniendo en cuenta con quien te comunicas, y hazte explicar cuando el receptor desee aprender (a mi tambien me encanta que me expliquen de economia u otras cosas)
20. Speak your own language correctly; at the same time do not be too great a stickler for formal correctness of phrases.
21. Never notice it if others make mistakes in language. To notice by word or look such errors in those around you is excessively ill-bred.
La segunda está bien, pero es que hay gente que no tiene para nada en cuenta la primera regla. Ya no es cometer una falta de ortografía o dos o olvidar algún acento, es que no tienen cuidado de nada, creando en ocasiones ambigüedades confusas. Yo muchas veces me quejo de la gente que se niega por sistema a poner los signos de apertura de las interrogaciones y exclamaciones ("¿¡"), ya que en el español la única forma de saber si una oración es interrogativa o no es por las interrogaciones. En otros idiomas cambian las palabras o añaden partículas, pero en el español no es así. Es cierto que por el contesto se puede "adivinar" dónde empieza una interrogación, pero no deja de ser una forma de entorpecer la lectura y crear ambigüedades.
Podéis imaginar el lenguaje como una carretera, las faltas de ortografía serían los baches.
#26: Es muy simple, si la persona con la que hablas no tiene conocimientos de un tema, evita hablarla con palabras muy técnicas o creerá que la estás hablando en chino y pronto se aburrirá de la conversación.
De todas formas, si la otra persona tiene interés, pues bueno, siempre puedes hablarla "normal" y decirla que te interrumpa si no entiende algo.
#44 Estoy de acuerdo contigo, pero, el laísmo es también una falta.
#26 Puede que a ti te interese o te guste que te hablen sobre esos temas de formas muy técnicas, pero si sois 10 personas tomando un café después de clase y dos se ponen a hablar del barroco postmodernista y de la técnica del granulado stracciatelo, remasterizada por el pintor Jacinto de la Fuente Filgeroa, pues sí, seguro que es un tema muy interesante, para la gente que sabe, pero se transforma en un diálogo de 2 personas con 8 espectadores, que seguramente no les apetezca ser espectadores sino
Si habéis quedado para hablar específicamente del tema, bien. Incluso aunque fuerais 9 que supierais del tema, siempre está el "apartado" que acaba teniendo que mirar el móvil por aburrimiento, que a su vez le parecerá a los otros nueve una falta de respeto, cuando en realidad es su culpa, ya que han elegido un tema en el que no todos los presentes pueden hablar.
A eso se refiere, no que haya temas tabúes. Si me preguntan sobre física estando con más gente, yo siempre intento hablar de famosos cruzando salas llenas de gente o de pelotas que atraviesan a la vez dos rendijas. No hablo en términos técnicos de acoplamientos másicos de campos si no es estrictamente necesario, para que la gente, aunque no sepa nada de física, pueda entender y participar de la conversación.
No estoy de acuerdo con la 36, viene muy bien cuando estás conociendo mujeres de otro país, y a mí me funciona para ganar confianza con esa persona...
Y pensar que la mayoría de estas reglas son de sentido común y cualquier persona con dos dedos de frente y sobretodo que sea modesta las aplica de forma automática... pero claro, hoy día cada vez son menos esas personas.
Hasta parece venir al caso: http://enlalunadebabel.tumblr.com/post/53427767340/how-to-be-polite-in-english
Pillo sitio para cuando tenga tiempo.
Como a decaido la educacion,.que lastima
http://www.reddit.com/r/malelifestyle/comments/1gqlom/37_conversation_rules_for_gentlemen_from_1875_all/
Por lo general suelo aceptar cualquier tipo de comentario o consejo pronunciado por alguien llamado Cecil, pero si es que se llama Cecil B. ya pierdo la objetividad.
Igualito que hoy en cualquier debate de intereconomía...