Publicado hace 4 años por Iñaki_Berazaluce a blogs.publico.es

Un empleado de una tienda en Tokio ha sido arrestado en un inusual caso de fraude por haber sustraído la información de la tarjeta de crédito de más de 1.300 clientes, que posteriormente utilizó para realizar compras por internet. Pero en lugar de desarrollar un intrincado método de clonación de tarjetas bancarias, este cajero de Japón utilizó una herramienta supuestamente aún más indetectable: su memoria fotográfica.

Comentarios

kumo

Yo creo que dos con todos los números y nombres y a me habría impresionado. 1300...

javierreta

Muy memorista pero comprando cosas que iban a su domicilio.