Dirigidos por el científico español Juan Carlos Izpisua, un equipo de investigadores del Instituto Salk de Estados Unidos ha administrado a un grupo de ratones un nuevo tratamiento genético para poder rejuvenecer sus células a partir de la mediana edad y, por primera vez, lo han conseguido sin un aumento de los casos de cáncer ni tampoco de otras enfermedades, según los resultados de su estudio que publica la revista 'Nature'.
#4:
#1 Aunque parezca guay, que la gente no se muera de vieja creo que sería una de las peores noticias posibles y casi una sentencia de muerte para el planeta. O eso o se nos montaba una distopía de las chungas, chungas.
#1 Aunque parezca guay, que la gente no se muera de vieja creo que sería una de las peores noticias posibles y casi una sentencia de muerte para el planeta. O eso o se nos montaba una distopía de las chungas, chungas.
#4 Efectivamente, si muriéndonos somos cada vez más imagínate si nos reproducimos y no nos morimos de viejos.
Solo un matiz, no sería una sentencia de muerte para el planeta sino para los humanos. El planeta y la vida que hay en él han sobrevivido a cosas peores. La vida se regeneraría sin nosotros.
#4#7 ¿Dais por sentado que todo los ciudadanos tendrían acceso a dicha terapia?, los Borbones (por poner un ejemplo) no compran productos de marca blanca (espero se entienda la alegoría).
#4 Una simple elección, tratamiento anti-vejez o reproducirse.
Me da la impresión que si sabes que puedes vivir mil años, te preocupara más el entorno a largo plazo.
#11 altered carbón. Me parece muy realista. Au que siendo francos, la mayoría de debates morales se ven "superados" por la tecnología. El envejecimiento se frenará y llegará un momento que viviremos muchos más años. Quizás hasta edades geológicas.
#4 O distopia chula, la gente no envejece y solo se pueden tener hijos con medicina especial controlada por el estado de forma que cada pareja solo podrá tener un hijo si alguien se ha "dado de baja" por accidente o elección.
Comentarios
#1 Aunque parezca guay, que la gente no se muera de vieja creo que sería una de las peores noticias posibles y casi una sentencia de muerte para el planeta. O eso o se nos montaba una distopía de las chungas, chungas.
#4 ya! Como pasó con el motor de explosión, que nos trajo dos guerras mundiales.
Hay que quemarles el laboratorio, vamos a por antonchas !
#4 Efectivamente, si muriéndonos somos cada vez más imagínate si nos reproducimos y no nos morimos de viejos.
Solo un matiz, no sería una sentencia de muerte para el planeta sino para los humanos. El planeta y la vida que hay en él han sobrevivido a cosas peores. La vida se regeneraría sin nosotros.
#4 #7 ¿Dais por sentado que todo los ciudadanos tendrían acceso a dicha terapia?, los Borbones (por poner un ejemplo) no compran productos de marca blanca (espero se entienda la alegoría).
#8 Obviamente no. Pero más ciudadanos que ahora sí.
#8 Ahí es donde entra la parte "distopía"
#7 Depende. Si los países son bombardeados en rotación alfabética, podríamos controlar la población.
#12 me pido Zambia.
#13 Ha dicho rotación alfabética pero no si el orden es ascendente o descendente ni por qué letra se empieza.
#14 ¡vaya!
#4 Una simple elección, tratamiento anti-vejez o reproducirse.
Me da la impresión que si sabes que puedes vivir mil años, te preocupara más el entorno a largo plazo.
#11 altered carbón. Me parece muy realista. Au que siendo francos, la mayoría de debates morales se ven "superados" por la tecnología. El envejecimiento se frenará y llegará un momento que viviremos muchos más años. Quizás hasta edades geológicas.
#4 O distopia chula, la gente no envejece y solo se pueden tener hijos con medicina especial controlada por el estado de forma que cada pareja solo podrá tener un hijo si alguien se ha "dado de baja" por accidente o elección.
A mi me mola!
#1 los ratones heredarán la tierra a este paso, no te apresures en pagar nada
Hay que cepillarse a Putin rápido entonces
Buena noticia para los ratones, aunque una cara sin arrugas viene a ser como un libro sin texto.
#2 y una tardía noticia para Preysler y Berlusconi