José María Álvarez-Pallete "se veía muerto" en Telefónica y, ante el previsible asalto del PP a La Moncloa con Pablo Isla como favorito de Alberto Núñez Feijóo para ocupar su puesto, "intentó sobrevivir elevando la acción de la teleco mediante la tutela de la irrupción del fondo árabe STC". Esta operación, realizada "a espaldas a Pedro Sánchez y su Consejo de administración, ha sido cocinada en varios viajes del directivo a Riad con su amigo Javier del Valle como intermediario", según fuentes.
Comentarios
Menudo giro ha dado la trama.
#1 Quiero ver qué dice el bueno de@pignito ahora tras la gilipollez que puso aquí
#8 Eres un sectario, que solo ves los míos contra los tuyos. Solo sabes justificar a los tuyos porque los otros son muy malos.
España, junto al resto de Europa está en decadencia y cada vez más rápido. Y la gente como tu, mirando al dedo.
A ver si os enteráis, Telefónica está metida en proyectos militares, pero sois incapaces de dar una opinión critica de lo que están haciendo, sin salirse de quien lo hace.
#12 Huída hacia adelante y sigues diciendo chorradas. Nada nuevo en tu mundo del pirulet.
Quien ha trabajado en empresas top sabe que esta gente ha llegado a los más alto porque tienen un perfil de psicopatía bastante importante.
Estas cosas nunca pasaban con Felipe, Aznar o quien fuera. Que no lo sepa el presi… què fuerte (no entrarè en el fondo)
Dónde está el CNI cuando se le necesita?
#4 Investigando a Monedero.
la peña tiene mucha imaginación, el género realismo mágico es mi favorito!
Este tipo de cosas tienen mucho de política Española por detrás, Aznar regaló telefónica y el PP (o quienes están en las cúpulas del PP) tiene lazos muy importantes con los directivos de Telefónica (a fin de cuentas son multimillonarios gracias a ellos)
Según estas fuentes, Álvarez-Pallete se estaría aferrando al fondo de la familia árabe saudí para frenar la fuerza del fondo americano BlackRock, accionista destacado de Telefónica que este año votó en contra de las remuneraciones a los directivos de la teleco.
Esto con J.Villalonga no pasaba.
Ahora resulta que el que vendió la cama y pagó el hotel es el propio presi de telefónica. Tenían al enemigo en casa, lo rastrero que llega a ser uno por la pasta, capaz de vender a su madre si con ello recibe billetes.