Hace 15 años | Por --61846-- a publico.es
Publicado hace 15 años por --61846-- a publico.es

Busque, compare y, si encuentra algo mejor, cómprelo. Quizás ya no sirva un anuncio como aquel del director general de Camp, pero la recomendación de Manuel Luque para el detergente Colón, sigue en vigor. Al consumidor le gusta comparar. Por eso han triunfado las agencias de viajes en Internet (eDreams, Rumbo, Atrápalo...), que dan la comparativa hecha.

Comentarios

D

A mí lo que me encanta son los 12€ de gastos de emisión: si el papel es mío, la impresora es mía, la tinta es mía...

D

#2, no me lo sé...

#4 "si les compras un billete a ellos directamente, no te cobran nada, o casi nada"

No estoy tan segura: el último billete que compré con Iberia, para volver a España las navidades pasadas tenía 12€ de gastos de emisión. Y lo compré en la mismita web de Iberia...

w

#1 Anda ...como en el chiste de Ikea lol

Saludos

reivax_dj

#1 Y si pasamos el billete electrónico, que está en PDF, al móvil o la PDA... ¿Lo aceptarán en el aeropuerto?

CIMOC

#1. Cierto. Los gastos de emisión son un invento de las compañias aereas, no solo de las Low Cost, para eliminar las comisiones de las agencias de Viajes.
Antiguamente (hace 2 o 3 años) una agencia de viajes se llevaba un 8-10% de comision, Asi las compañias aereas no tenian que abrir puntos de venta por todo el mundo, podian vender sus billetes a traves de las agencias de viajes. Ahora con la venta electronica ya no necesitan a las agencias, y les han quitado las comisiones, de manera, que si les compras un billete a ellos directamente, no te cobran nada, o casi nada, pero una agencia de viajes debe seguir ofreciendo billetes, y como no gana nada, pues cobra unos gastos de emisión, que han establecido las propias compañias aereas.

T

#5 Este no es al que se refiere #2, pero...

Una mujer va a Ikea a comprar un armario.

Llega a su casa, lo monta y le queda perfecto, pero en ese momento pasa el metro (ella vive justo encima de la estación) y el armario cae desmontado al suelo provocando un gran estruendo.

Lo vuelve a montar, vuelve a pasar el metro y el armario se cae a trozos de nuevo…
Tras el tercer intento, muy mosqueada, llama a Ikea, explica el problema le dicen que le envían un técnico.

Llega el técnico, monta el armario, que queda de narices. Pasa el metro. Brruuuuummmmm!, el armario se desmonta otra vez.

Finalmente el técnico le dice a la señora:
- Mire, lo montaré otra vez, me meteré dentro y cuando pase el metro, desde dentro, veré mejor por donde cae.

Lo monta, se mete dentro y en aquel momento llega el marido de la mujer:
- Cariño, ¡qué armario tan bonito!
Abre la puerta, ve al instalador, y le dice:
- Y, usted, ¿qué hace aquí?
- Pues mire, casi que le voy a decir que he venido a follarme a su mujer, porque si le digo que estoy esperando el metro, no se lo va a creer.