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#27:
Es un poco ridículo tener que rebatir a los negacionistas (esto acabará en portada, conociendo la afición meneante por todo lo hispanófobo), cuando hay múltiples reseñas de eruditos sobre el pasaje histórico. Y la historiografía se basa en crónicas históricas de la época (que tenía su épica), tanto andalusíes (posteriores a los hechos, de 881 dC.), como astures-visigodas (algunas muy posteriores).
Obviamente cada bando cuenta la feria según le va en ella; se echan flores y hasta fabulan para loar sus éxitos y victorias, y pasan de puntillas u omiten los capítulos desfavorables. Suele ser lo normal.
Pero que en la crónica de Al Maqqari (https://es.wikipedia.org/wiki/Ahmad_ibn_Muhammad_al-Maqqari ) nos hablen de sendas batallas importantes en los "montes pirenaicos" (además de la confusión con la cordillera cantábrica, y que citan fechas poco precisas, eso no ayuda mucho para contrastar con las cristianas) por parte de los "asnos salvales" de Belay (D. Pelayo), denota un desprecio por los godos y astures que les habían hecho frente y obtenido un dominio militar sobre territorios que controlaban.
Y pasa igual en 732 con el martillazo que sufren a manos de Carlos Martel en Tours-Poitiers. Obviamente no van a reconocer una derrota clamorosa de buen grado, y juegan al despiste con los retrocesos que sufren en Picos de Europa y Asturias central (Munuza fallece en Covadonga y Gijón se queda sin gobernador), y en la marca hispánica (los otros montes pirenaicos, los de levante y tal). Incluso los vascones se animan con ayuda cántabra y astur para atizarles.
Sugiero echarle un vistazo a la crónica albeldense para ver la versión "cristiana" de los hechos de primera mano:
http://www.vallenajerilla.com/albeldense/index.htm
★ De la crónica Albeldense, una versión de las crónicas de Alfonso III:
«Alqama entró en Asturias con 187.000 hombres. Pelayo estaba con sus compañeros en el monte Auseva y que el ejército de Alkama llegó hasta él y alzó innumerables tiendas frente a la entrada de una cueva. El obispo Oppas subió a un montículo situado frente a la cueva y habló así a Pelayo: «Pelayo, Pelayo, ¿dónde estás?». El interpelado se asomó a una ventana y respondió: «Aquí estoy». El obispo dijo entonces: «Juzgo, hermano e hijo, que no se te oculta cómo hace poco se hallaba toda España unida bajo el gobierno de los godos y brillaba más que los otros países por su doctrina y ciencia, y que, sin embargo, reunido todo el ejército de los godos, no pudo sostener el ímpetu de los ismaelitas, ¿podrás tú defenderte en la cima de este monte? Me parece difícil. Escucha mi consejo: vuelve a tu acuerdo, gozarás de muchos bienes y disfrutarás de la amistad de los caldeos». Pelayo respondió entonces: «¿No leíste en las Sagradas Escrituras que la iglesia del Señor llegará a ser como el grano de la mostaza y de nuevo crecerá por la misericordia de Dios?». El obispo contestó: «Verdaderamente, así está escrito». [...] Tenemos por abogado cerca del Padre a Nuestro Señor Jesucristo, que puede librarnos de estos paganos [...]. Alqama mandó entonces comenzar el combate, y los soldados tomaron las armas. Se levantaron los fundíbulos, se prepararon las hondas, brillaron las espadas, se encresparon las lanzas e incesantemente se lanzaron saetas. Pero al punto se mostraron las magnificencias del Señor: las piedras que salían de los fundíbulos y llegaban a la casa de la Virgen Santa María, que estaba dentro de la cueva, se volvían contra los que las disparaban y mataban a los caldeos. Y como a Dios no le hacen falta lanzas, sino que da la palma de la victoria a quien quiere, los caldeos emprendieron la fuga […]».
Ahora las declaraciones del equipo contrario sobre el encuentro:
★De la Crónica de al-Maqqarī:
«Dice Isa Ibn Ahmand al-Raqi que en tiempos de Anbasa Ibn Suhaim al-Qalbi, se levantó en tierras de Galicia [se ve el cacao que se hacían con la toponimia] un asno salvaje llamado Belay [Pelayo]. Desde entonces empezaron los cristianos en al-Ándalus a defender contra los musulmanes las tierras que aún quedaban en su poder, lo que no habían esperado lograr. Los islámicos, luchando contra los politeístas [se pensaban que lo de la trinidad: padre, hijo y espíritu santo era eso] y forzándoles a emigrar, se habían apoderado de su país hasta que llegara Ariyula, de la tierra de los francos, y habían conquistado Pamplona en Galicia
y no había quedado sino la roca donde se refugia el rey llamado Pelayo con trescientos hombres. Los soldados no cesaron de atacarle hasta que sus soldados murieron de hambre y no quedaron en su compañía sino treinta hombres y diez mujeres. Y no tenían que comer sino la miel que tomaban de la dejada por las abejas en las hendiduras de la roca. La situación de los musulmanes llegó a ser penosa, y al cabo los despreciaron diciendo «Treinta asnos salvajes, ¿qué daño pueden hacernos?». En el año 133 murió Pelayo y reinó su hijo Fáfila. El reino de Belay duró diecinueve años, y el de su hijo, dos».
Pues nada, que resumen así nada menos que ciento veintipico años de historia, en dos patadas...
Les guste o no a la clá hispanófoba de siempre, no sólo existió la batalla, sino que se cree que hubo dos suficientemente importantes en esa zona de Picos de Europa (además de numerosas escaramuzas menores, hasta que Alfonso II controla de manera efectiva todo el territorio cordillera abajo y se acaban las algaras andalusíes por lo verde).
Obviamente cada bando cuenta la feria según le va en ella; se echan flores y hasta fabulan para loar sus éxitos y victorias, y pasan de puntillas u omiten los capítulos desfavorables. Suele ser lo normal.
Pero que en la crónica de Al Maqqari (https://es.wikipedia.org/wiki/Ahmad_ibn_Muhammad_al-Maqqari ) nos hablen de sendas batallas importantes en los "montes pirenaicos" (además de la confusión con la cordillera cantábrica, y que citan fechas poco precisas, eso no ayuda mucho para contrastar con las cristianas) por parte de los "asnos salvales" de Belay (D. Pelayo), denota un desprecio por los godos y astures que les habían hecho frente y obtenido un dominio militar sobre territorios que controlaban.
Y pasa igual en 732 con el martillazo que sufren a manos de Carlos Martel en Tours-Poitiers. Obviamente no van a reconocer una derrota clamorosa de buen grado, y juegan al despiste con los retrocesos que sufren en Picos de Europa y Asturias central (Munuza fallece en Covadonga y Gijón se queda sin gobernador), y en la marca hispánica (los otros montes pirenaicos, los de levante y tal). Incluso los vascones se animan con ayuda cántabra y astur para atizarles.
Sugiero echarle un vistazo a la crónica albeldense para ver la versión "cristiana" de los hechos de primera mano:
http://www.vallenajerilla.com/albeldense/index.htm
★ De la crónica Albeldense, una versión de las crónicas de Alfonso III:
«Alqama entró en Asturias con 187.000 hombres. Pelayo estaba con sus compañeros en el monte Auseva y que el ejército de Alkama llegó hasta él y alzó innumerables tiendas frente a la entrada de una cueva. El obispo Oppas subió a un montículo situado frente a la cueva y habló así a Pelayo: «Pelayo, Pelayo, ¿dónde estás?». El interpelado se asomó a una ventana y respondió: «Aquí estoy». El obispo dijo entonces: «Juzgo, hermano e hijo, que no se te oculta cómo hace poco se hallaba toda España unida bajo el gobierno de los godos y brillaba más que los otros países por su doctrina y ciencia, y que, sin embargo, reunido todo el ejército de los godos, no pudo sostener el ímpetu de los ismaelitas, ¿podrás tú defenderte en la cima de este monte? Me parece difícil. Escucha mi consejo: vuelve a tu acuerdo, gozarás de muchos bienes y disfrutarás de la amistad de los caldeos». Pelayo respondió entonces: «¿No leíste en las Sagradas Escrituras que la iglesia del Señor llegará a ser como el grano de la mostaza y de nuevo crecerá por la misericordia de Dios?». El obispo contestó: «Verdaderamente, así está escrito». [...] Tenemos por abogado cerca del Padre a Nuestro Señor Jesucristo, que puede librarnos de estos paganos [...]. Alqama mandó entonces comenzar el combate, y los soldados tomaron las armas. Se levantaron los fundíbulos, se prepararon las hondas, brillaron las espadas, se encresparon las lanzas e incesantemente se lanzaron saetas. Pero al punto se mostraron las magnificencias del Señor: las piedras que salían de los fundíbulos y llegaban a la casa de la Virgen Santa María, que estaba dentro de la cueva, se volvían contra los que las disparaban y mataban a los caldeos. Y como a Dios no le hacen falta lanzas, sino que da la palma de la victoria a quien quiere, los caldeos emprendieron la fuga […]».
Ahora las declaraciones del equipo contrario sobre el encuentro:
★De la Crónica de al-Maqqarī:
«Dice Isa Ibn Ahmand al-Raqi que en tiempos de Anbasa Ibn Suhaim al-Qalbi, se levantó en tierras de Galicia [se ve el cacao que se hacían con la toponimia] un asno salvaje llamado Belay [Pelayo]. Desde entonces empezaron los cristianos en al-Ándalus a defender contra los musulmanes las tierras que aún quedaban en su poder, lo que no habían esperado lograr. Los islámicos, luchando contra los politeístas [se pensaban que lo de la trinidad: padre, hijo y espíritu santo era eso] y forzándoles a emigrar, se habían apoderado de su país hasta que llegara Ariyula, de la tierra de los francos, y habían conquistado Pamplona en Galicia
y no había quedado sino la roca donde se refugia el rey llamado Pelayo con trescientos hombres. Los soldados no cesaron de atacarle hasta que sus soldados murieron de hambre y no quedaron en su compañía sino treinta hombres y diez mujeres. Y no tenían que comer sino la miel que tomaban de la dejada por las abejas en las hendiduras de la roca. La situación de los musulmanes llegó a ser penosa, y al cabo los despreciaron diciendo «Treinta asnos salvajes, ¿qué daño pueden hacernos?». En el año 133 murió Pelayo y reinó su hijo Fáfila. El reino de Belay duró diecinueve años, y el de su hijo, dos».Pues nada, que resumen así nada menos que ciento veintipico años de historia, en dos patadas...
Les guste o no a la clá hispanófoba de siempre, no sólo existió la batalla, sino que se cree que hubo dos suficientemente importantes en esa zona de Picos de Europa (además de numerosas escaramuzas menores, hasta que Alfonso II controla de manera efectiva todo el territorio cordillera abajo y se acaban las algaras andalusíes por lo verde).
#2:
Entonces, ¿a Pelayo no se le apareció la virgen en la cueva, y le mandó empezar a "escorrer" moros hacia África hasta recuperar España?
Qué lástima, parecía muy real, Rick.
Qué lástima, parecía muy real, Rick.
#10:
De Covadonga lo más gracioso es la disparidad entre la Crónica Sebastianense y los historiadores musulmanes sobre el contingente de tropas que mandó Munuza para intentar reprimir la insurrección de Pelayo.
Las crónicas rotense y sebastianense hablan de 187.000 soldados, mientras que los musulmanes hablan de una partida de caballería de 1.500.
No hace falta decir que ni había 187.000 soldados musulmanes, ni tampoco que es materialmente imposible meter tanta gente en esa zona. Una partida de 1.500 para aplastar a 300 rebeldes es perfectamente razonable.
También digo que hay que ser un tanto memo para mandar una partida de caballería ligera por las montañas de Asturias
Las crónicas rotense y sebastianense hablan de 187.000 soldados, mientras que los musulmanes hablan de una partida de caballería de 1.500.
No hace falta decir que ni había 187.000 soldados musulmanes, ni tampoco que es materialmente imposible meter tanta gente en esa zona. Una partida de 1.500 para aplastar a 300 rebeldes es perfectamente razonable.
También digo que hay que ser un tanto memo para mandar una partida de caballería ligera por las montañas de Asturias
#4:
Me quedo con esto:
"El siglo XIX fue un período en el que los nacionalismos brotaron por toda Europa, haciendo del pasado argumento ideológico"
Y así todos los nacionalismos, inventando la historia. Lo divertido es que el sentimiento nacional, como se entiende ahora, no existía en la edad media. Eras vasallo de alguien y mirabas por tus intereses y ya.
"El siglo XIX fue un período en el que los nacionalismos brotaron por toda Europa, haciendo del pasado argumento ideológico"
Y así todos los nacionalismos, inventando la historia. Lo divertido es que el sentimiento nacional, como se entiende ahora, no existía en la edad media. Eras vasallo de alguien y mirabas por tus intereses y ya.
Comentarios
Entonces, ¿a Pelayo no se le apareció la virgen en la cueva, y le mandó empezar a "escorrer" moros hacia África hasta recuperar España?
Qué lástima, parecía muy real, Rick.
#2 Lo que ha ocultado la historiografia marxista-separatista-masónica es que Don Pelayo llevaba pulserita con la bandera de España y que a los moros los financiaban los independentistas catalanes y la ETA
De Covadonga lo más gracioso es la disparidad entre la Crónica Sebastianense y los historiadores musulmanes sobre el contingente de tropas que mandó Munuza para intentar reprimir la insurrección de Pelayo.
Las crónicas rotense y sebastianense hablan de 187.000 soldados, mientras que los musulmanes hablan de una partida de caballería de 1.500.
No hace falta decir que ni había 187.000 soldados musulmanes, ni tampoco que es materialmente imposible meter tanta gente en esa zona. Una partida de 1.500 para aplastar a 300 rebeldes es perfectamente razonable.
También digo que hay que ser un tanto memo para mandar una partida de caballería ligera por las montañas de Asturias
#10. De las crónicas alfonsinas es la que presenta más interpolaciones; el amigo Sebastián se dedica a censurarle pasajes a su tío, introducir loas al papel de godos e iglesia en la hazañas, y otro tipo de modificaciones. No es precisamente la más rigurosa.
#21 La Rotense ofrece la misma cifra absurda
Me quedo con esto:
"El siglo XIX fue un período en el que los nacionalismos brotaron por toda Europa, haciendo del pasado argumento ideológico"
Y así todos los nacionalismos, inventando la historia. Lo divertido es que el sentimiento nacional, como se entiende ahora, no existía en la edad media. Eras vasallo de alguien y mirabas por tus intereses y ya.
#4 Pues sí, tenían al rey de turno en un pedestal. Las cosas malas las hacían sus nobles, monjes, etc. El rey siempre, siempre quería lo mejor para sus vasallos.
Hasta tan tarde como principios del s. XIX ha sido así. el puto corso fue el que diseminó por Europa las semillas que un grupito de ilustrados habían cultivado a fines del siglo anterior.
#15. Un pollo que se autoproclama imperator, con su corona doradita laureada incluida, decías que disemina ¿qué?
Es un poco ridículo tener que rebatir a los negacionistas (esto acabará en portada, conociendo la afición meneante por todo lo hispanófobo), cuando hay múltiples reseñas de eruditos sobre el pasaje histórico. Y la historiografía se basa en crónicas históricas de la época (que tenía su épica), tanto andalusíes (posteriores a los hechos, de 881 dC.), como astures-visigodas (algunas muy posteriores).
y no había quedado sino la roca donde se refugia el rey llamado Pelayo con trescientos hombres. Los soldados no cesaron de atacarle hasta que sus soldados murieron de hambre y no quedaron en su compañía sino treinta hombres y diez mujeres. Y no tenían que comer sino la miel que tomaban de la dejada por las abejas en las hendiduras de la roca. La situación de los musulmanes llegó a ser penosa, y al cabo los despreciaron diciendo «Treinta asnos salvajes, ¿qué daño pueden hacernos?». En el año 133 murió Pelayo y reinó su hijo Fáfila. El reino de Belay duró diecinueve años, y el de su hijo, dos».
Obviamente cada bando cuenta la feria según le va en ella; se echan flores y hasta fabulan para loar sus éxitos y victorias, y pasan de puntillas u omiten los capítulos desfavorables. Suele ser lo normal.
Pero que en la crónica de Al Maqqari (https://es.wikipedia.org/wiki/Ahmad_ibn_Muhammad_al-Maqqari ) nos hablen de sendas batallas importantes en los "montes pirenaicos" (además de la confusión con la cordillera cantábrica, y que citan fechas poco precisas, eso no ayuda mucho para contrastar con las cristianas) por parte de los "asnos salvales" de Belay (D. Pelayo), denota un desprecio por los godos y astures que les habían hecho frente y obtenido un dominio militar sobre territorios que controlaban.
Y pasa igual en 732 con el martillazo que sufren a manos de Carlos Martel en Tours-Poitiers. Obviamente no van a reconocer una derrota clamorosa de buen grado, y juegan al despiste con los retrocesos que sufren en Picos de Europa y Asturias central (Munuza fallece en Covadonga y Gijón se queda sin gobernador), y en la marca hispánica (los otros montes pirenaicos, los de levante y tal). Incluso los vascones se animan con ayuda cántabra y astur para atizarles.
Sugiero echarle un vistazo a la crónica albeldense para ver la versión "cristiana" de los hechos de primera mano:
http://www.vallenajerilla.com/albeldense/index.htm
★ De la crónica Albeldense, una versión de las crónicas de Alfonso III:
«Alqama entró en Asturias con 187.000 hombres. Pelayo estaba con sus compañeros en el monte Auseva y que el ejército de Alkama llegó hasta él y alzó innumerables tiendas frente a la entrada de una cueva. El obispo Oppas subió a un montículo situado frente a la cueva y habló así a Pelayo: «Pelayo, Pelayo, ¿dónde estás?». El interpelado se asomó a una ventana y respondió: «Aquí estoy». El obispo dijo entonces: «Juzgo, hermano e hijo, que no se te oculta cómo hace poco se hallaba toda España unida bajo el gobierno de los godos y brillaba más que los otros países por su doctrina y ciencia, y que, sin embargo, reunido todo el ejército de los godos, no pudo sostener el ímpetu de los ismaelitas, ¿podrás tú defenderte en la cima de este monte? Me parece difícil. Escucha mi consejo: vuelve a tu acuerdo, gozarás de muchos bienes y disfrutarás de la amistad de los caldeos». Pelayo respondió entonces: «¿No leíste en las Sagradas Escrituras que la iglesia del Señor llegará a ser como el grano de la mostaza y de nuevo crecerá por la misericordia de Dios?». El obispo contestó: «Verdaderamente, así está escrito». [...] Tenemos por abogado cerca del Padre a Nuestro Señor Jesucristo, que puede librarnos de estos paganos [...]. Alqama mandó entonces comenzar el combate, y los soldados tomaron las armas. Se levantaron los fundíbulos, se prepararon las hondas, brillaron las espadas, se encresparon las lanzas e incesantemente se lanzaron saetas. Pero al punto se mostraron las magnificencias del Señor: las piedras que salían de los fundíbulos y llegaban a la casa de la Virgen Santa María, que estaba dentro de la cueva, se volvían contra los que las disparaban y mataban a los caldeos. Y como a Dios no le hacen falta lanzas, sino que da la palma de la victoria a quien quiere, los caldeos emprendieron la fuga […]».
Ahora las declaraciones del equipo contrario sobre el encuentro:
★De la Crónica de al-Maqqarī:
«Dice Isa Ibn Ahmand al-Raqi que en tiempos de Anbasa Ibn Suhaim al-Qalbi, se levantó en tierras de Galicia [se ve el cacao que se hacían con la toponimia] un asno salvaje llamado Belay [Pelayo]. Desde entonces empezaron los cristianos en al-Ándalus a defender contra los musulmanes las tierras que aún quedaban en su poder, lo que no habían esperado lograr. Los islámicos, luchando contra los politeístas [se pensaban que lo de la trinidad: padre, hijo y espíritu santo era eso] y forzándoles a emigrar, se habían apoderado de su país hasta que llegara Ariyula, de la tierra de los francos, y habían conquistado Pamplona en Galicia
Pues nada, que resumen así nada menos que ciento veintipico años de historia, en dos patadas...
Les guste o no a la clá hispanófoba de siempre, no sólo existió la batalla, sino que se cree que hubo dos suficientemente importantes en esa zona de Picos de Europa (además de numerosas escaramuzas menores, hasta que Alfonso II controla de manera efectiva todo el territorio cordillera abajo y se acaban las algaras andalusíes por lo verde).
#27 Ya que estoy, apunto que a Pelayo lo llamaban "Belay al Rumí", o sea "Pelayo el romano", lo que nos permite atisbar una filiación hispanorromana más que goda. De lo contrario, pondría "Belay al Kuti".
#32. La filiación del amigo "Pelagius" está bastante discutida... El nombre deriva más bien del griego, y en lo que parece coincidir todo el mundo es en su origen noble, sus buenas relaciones con caudillos de tribus cántabras, astures y la élite tardorromana y visigoda, su formación táctica militar y que estuvo cautivo en Córduba, posiblemente como rehén.
La mayoría le suponen visigodo; pero lo último que he leído es que poseía terrenos en Piloña y criaba caballos (probablemente para surtir a los ejércitos visigodos) y eso explicaría su buen conocimiento del terreno en Picos de Europa. Aunque los visigodos nunca tuvieron un dominio efectivo en la cornisa cantábrica y este hombre pudo haber servido como caballero de D. Rodrigo siendo astur, no godo...
La vergüenza es que se haya ensuciado su nombre permitiendo que VOX se lo intente apropiar. Digan lo que digan, no dejéis de visitar Covadonga que "ye" muy guapo de ver. Subir a Covadonga nunca ha tenido connotaciones fascistas, a ver si ahora por culpa del imbécil del caballo y la pistola va a ser distinto.
#11 francamente y sin ánimo de ofender a ningún asturiano, Covadonga lleva décadas convertida en un parque temático para fachas. Algo así como el Valle de los Caídos del norte.
#13 falso
#13 Pues no. Es un lugar bien tranquilo y bonito que nada tiene que ver con fachas. Deberías visitarlo tú mismo, a ser posible, fuera de temporada turística.
Otra cosa es que gente como VOX se quieran apropiar de lugares y símbolos así como hacen con muchas otras cosas que les gustan y creen que les convienen.
#18 hablo por la impresión que me dió al visitarlo. Es sólo una opinión.
#13. Menuda chorrada, se ve que lo visitas mucho...
Pues lo mismo que los brits se inventaron al rey Arturo o los franceses deformaron la historia de Juana de Arco y Gilles de Rais.
#5 ¿Gilles de Rais?
#6 Ese. Liberador de Francia en la Guerra de los 100 años junto a Juana de Arco. Otra cosa es que luego se le haya clasificado como un psicópata asesino.
#5 y Astérix
¿Pero alguien cree que los garrulers que siguen a Voz tienen algún interés por la verdad o por el rigor histórico?
#3 pues no, porque solo les interesa el valor simbólico. Saben de sobras que no fue así.
Los anti son un poco pesados. Parece que solo se reafirman si están ofendidos todos los días
#1 Nunca es mal momento para desmontar mitos históricos nacionalistas.
#12 toda historia es legendaria y toda leyenda es historica.
#12.
Como lo desmonten todo así de bien, mejor que lleven los neumáticos de bicicleta a un taller...
La revuelta pelagiana, en todo caso, no fue la única contra las tropas musulmanas en la Península y pudo obedecer a un conflicto local, pero de ningún modo se emprendió para desagraviar y reparar una supuesta “pérdida de España”, como sostiene el relato tradicional nacional-católico, a manos de las tropas que derrotaron a los visigodos de Don Rodrigo en Guadalete.
Con "relato tradicional nacional-católico", parece que nos quiere decir que hay una corriente "facha" que nos quiere hacer creer el mito de la reconquista. No es así. La interpretación que hace vox de "La reconquista", a grandes rasgos, y si eliminamos el carácter propagandístico que le da, es la que todos hemos aprendido en el colegio. Es la que de hecho hoy en día se aprende en el colegio. No es un invento. Tengo de hecho aquí a mi lado un puñado de libros que hablan del tema escritos por autores alemanes, franceses o españoles que lo plantean de ese modo. De hecho, el mismo nombre de "reconquista" ya nos sugiere que es "volver a conquistar" o "recuperar". No es un invento de vox, es lo que todos hemos aprendido, independientemente de que sea verdad, mentira, parcialmente verdad o parcialmente mentira.
¿Que vox lo usa para darle carácter propagandístico? Pues claro. Usa un mito para sus intereses políticos. Que por cierto es lo que hace cierta izquierda con la 2da república, que según a quién leas, pareciera que fuera una sociedad y sistema perfecto y casi utópico.
Omitiré comentar cosas como esta, porque es un insulto a la inteligencia pretender que nos creamos que "la derecha" o "parte de la derecha" piensa así:
"La intervención de fuerzas sobrenaturales como clave para infligir la derrota a los musulmanes es otro tópico".
#24 Por desgracia, hay historiadores e historiadores. Que yo he llegado a ver mencionado a Don Pelayo como el primer rey de España. Y en un supuesto libro de divulgación histórica.
Y lo curioso es que haya sido un supuesto partido de izquierdas y obrero y español el que comenzó a cargarse la Educación pública con el maldito Solana allá por 1984. Seguido por la otra derecha que se apuntó al carro de destruir lo que nos hacía ciudadanos.
Pero no veo a nadie en estas elecciones que quiera defender la Educación y la Sanidad públicas. Con medidas concretas, me refiero
Ni tanto ni tan calvo. Esta mañana he leído un hilo muy interesante al respecto, escrito por el periodista Javier Torrox. Os lo dejo por si os interesa.
De verdad os creéis que "la derecha" se cree el mito de Cobadonga? De verdad que alguien se cree que los votantes de que no sean de izquierdas se creen el mito de Cobadonga? Pero quien es tan gilipollas?! Por tan gilipollas nos toman ya los medios?!
Cual va a a ser la siguiente noticia que nos tome por gilipollas y a los hunos a la vez que califica que gilipollas a los hotros?!
#20 ¡Mis hojos!