Hace 11 años | Por Meneador_Compul... a swissinfo.ch
Publicado hace 11 años por Meneador_Compulsivo a swissinfo.ch

Todos los años Venezuela debe comprar combustible en países lejanos para entregárselos a Ecuador y cumplir con un acuerdo bilateral. El convenio era simple: Petroecuador entregaría crudo a PDVSA para que lo procese en sus refinerías buscando ahorrar los costos de intermediación. Pero 4 años después de iniciado, el pacto sellado entre Correa y Chávez está beneficiando a los suplidores y agentes comerciales. Mientras PDVSA alimentó a ecuador con derivados de alta calidad, sus importaciones de esos productos subió a un récord de 147.200 bpd.

Comentarios

w

Otro éxito del Populismo...

Conseguir leche o papel higiénico, una lucha para los venezolanos (The New York Times) Abril 2012.
http://www.clarin.com/mundo/america_latina/Conseguir-papel-higienico-lucha-venezolanos_0_687531302.html

...han dejado al país sin producción de papel higiénico... las empresas que no cierran las dejan morir nacionalizadas y gobernandas por mafias afines...

ramores

Lo del papel higiénico lo vengo leyendo desde la década del 60 (al principio con Cuba, luego con Rusia, etc, etc. Y siempre la fuente es un medio usamericano), ¿no hay un bulo nuevo?
Y a esta altura, aunque sea cierto, lo descreo totalmente.

acafe

#2 Lo menos grave es lo del papel higiénico, por que con el desabastecimiento de alimentos que hay, pronto dejaremos de usarlo. Mientras "vivas al otro lado del charco", ignorante de la realidad que se vive a diario en nuestro país, lo que descreas o no es absolutamente intrascendente. La fantasía de la propaganda roja rojita, como marketing es fabulosa, sobre todo para los seudo socialiatas de sillón y de salón, de esos que les encanta tener temas de conversación, instalados en la mesa de un café, y jactándose de todo lo que saben de política, de la "gestión" de Hugo Chávez y de Venezuela, después de haber visto la tele, y sin haber estado en Venezuela , ni por equivocación. Asi es que disfrútalo mientras te dure, que de mentiras también se vive, pregúntaselo a Hugo...