Me decepciona ver como foreros/twitteros/etc que antes consideraba que tenían un pensamiento independiente, justifican ahora crímenes de guerra que nos llegan en vídeos espantosos y se ponen a defenderlo y apoyarlo incluso, ya que ''Rusia'' atacó primero. Usan motes des-humanizantes para el pueblo ruso y entablan piques y amenazas ridículas contra otros. También, evidentemente, justifican el rechazo, la expulsión o el embargo de bienes a los rusos que consideran "malos".
A los Gobiernos les encanta que tomes partido y demonices a una población entera solo porque pertenece a un país antagonista, es el odio institucionalizado hacia los objetivos ideológicos, políticos y raciales del poder, es la excusa con la que perpetrarán los peores crímenes ante tus ojos, y las mentiras con las que te reclutarán para ir a combatir sus guerras.
Algunos me acusan de ser pro-ruso, pero el único bando por el que tomaré siempre partido es el de aquellos hombres, ucranianos o rusos que se niegan a combatir por intereses de altas esferas, y a los que España entre otros países ha denegado el asilo por considerar que ir a combatir y morir es su deber militar.
En realidad luchar en una guerra es fácil, tan solo se tiene que hacer NADA y dejar que tu apestoso Gobierno te reclute forzosamente, te ponga un fusil en las manos, y te ponga en cualquier posición o tarea decidida por el cayetano prepotente de turno que se llevará las condecoraciones sin levantar el culo de la silla. Vivir o morir será cuestión de si la diosa Fortuna te sonríe, y la gente a la que quieres matar, y que te quiere matar, son personas como tu arrastradas por las circunstancias. Aquellos que cometen esos crímenes terribles contra población civil u otros prisioneros, son esclavos ideales del poder movidos por el odio que han programado en ellos.
Huir en cambio requiere ingenio, flexibilidad, y el valor de enfrentarse a todo el mundo para salvar tu vida y aquello en lo que crees, los desertores y fugitivos son los verdaderos valientes.
Eso ocurrió en la escuela de mi pueblo natal, debíamos tener 5 años o no mucho más ya que era el primer año que empezábamos la escuela.
Durante la clase, la profesora riñó a una niña llamada, digamos, Mariona por alguna estupidez y dijo que al volver la castigaría, y que mientras, le dijésemos lo mal que se había portado.
Yo no me sentí cómodo con la idea, pero la mayoría de niños empezaron a increparla, alguien dijo que la profesora les premiaría si la castigaban y otros empezaron a secundarlo y construir una ''justificación''.
Estaba mal odiar y pegar, en clase y en casa nos reprimían esa conducta, pero en cuanto la ''autoridad'' dió permiso para hacerlo con Mariona, esta quedó fuera de la empatía y cohesión del grupo, era ''el enemigo''. Mariona ya no era parte de la tribu, ya no era humana y estaba bien odiarla aunque nadie tuviese realmente nada personal contra ella. Todos sabían también que lo que querían hacer era algo malo, pero bajo el amparo del grupo dejaron de ser responsables individuales.
Se dieron una serie de catalizadores peligrosos que también pueden darse en cualquier manifestación o colectivo de cualquier ideología.
No tardaron en envalentonarse, la rodeaban mientras chillaban tonta o fea y otros insultos que conocían, luego empezaron a golpearla, bofetadas, tirones de pelo y sopapos a su cabeza y, cuando estaba en el suelo llorando, ante su debilidad, los niños en vez de detenerse se volvieron aún más crueles y desenfrenados, pateando y pisoteando con euforia festiva y gritos hasta que llegó la profesora.
Cuando los niños se apartaron del montón, Mariona estaba inconsciente en el suelo con un charco de vómito.
Psicología de masas:
La masa es un ente que posee emoción, pero no intelecto.Cada individuo que se mueve con la masa pierde rápidamente su capacidad de pensamiento individual y actúa como un nexo sensitivo, compartiendo la opinión, la actitud y los perjuicios de la masa.
Una reacción aislada, incluso propagada por un solo individuo, puede contagiar a todo el ente, en ese aspecto, la masa (en especial en aglomeraciones, manifestaciones y protestas) es un tejido de contagio emotivo.
La masa no puede gobernarse a sí misma puesto carece de intelecto, la autoridad debe proporcionar la figura de ''El líder'' para dominar a la masa.

La trayectoria del Partido Popular en el gobierno de España ha dejado una huella profunda en nuestro país, pero no precisamente del tipo que debería enorgullecer a sus responsables. Desde los gobiernos de Aznar hasta los de Rajoy, el PP ha demostrado una capacidad asombrosa para priorizar los intereses de unos pocos sobre el bienestar de la mayoría, envolviendo sus decisiones en una retórica de responsabilidad que la realidad se ha encargado de desmentir una y otra vez.
La gestión económica del PP ha sido, en el mejor de los casos, errática, y en el peor, deliberadamente perjudicial para las clases trabajadoras. Durante el gobierno de Rajoy, los recortes en sanidad, educación y servicios sociales se presentaron como medidas "inevitables" de austeridad, mientras los grandes patrimonios y las corporaciones disfrutaban de un trato fiscal privilegiado. La reforma laboral de 2012 precarizó el empleo de millones de españoles, debilitando los derechos de los trabajadores bajo la promesa incumplida de crear empleo de calidad. Lo que obtuvimos fue precariedad institucionalizada.
Pero si hay algo que define la era del PP en el gobierno es la corrupción sistémica. No hablamos de casos aislados, sino de una trama que alcanzó las más altas esferas del partido. El caso Gürtel, la caja B, los papeles de Bárcenas, la Púnica, el caso Lezo, el caso Montoro con sus amnistías fiscales que beneficiaron a defraudadores... La lista es tan extensa que resulta agotadora. Un partido condenado por financiación ilegal en sentencia firme del Tribunal Supremo. Eso no es un detalle menor: es la confirmación judicial de que el PP se benefició de una estructura corrupta durante años. Y aun así, sus dirigentes nunca asumieron verdadera responsabilidad política.
En política social, el conservadurismo del PP ha frenado avances necesarios en igualdad de género, derechos LGTBI y justicia social. Su oposición sistemática a medidas progresistas, desde la ley de violencia de género hasta políticas de igualdad efectiva, demuestra una visión anclada en un pasado que la sociedad española ya ha superado. La famosa "equidistancia" del PP ante el machismo y la violencia de género ha sido, en realidad, complicidad disfrazada de moderación.
Y cuando parecía imposible caer más bajo, el PP generó de su propia matriz ideológica a VOX, una escisión ultra que surgió precisamente por la falta de firmeza del partido en postulados reaccionarios. Lejos de marcar distancias, el PP ha ido normalizando el discurso de la ultraderecha, compitiendo por ver quién es más radical. El caso Ayuso es paradigmático: convirtió Madrid en un laboratorio de populismo fiscal y enfrentamiento institucional, repartiendo contratos a dedo durante la pandemia, atacando al gobierno central con mentiras y bulos sistemáticos, y utilizando la sanidad pública como arma electoral mientras la desmantelaba. Ayuso no es una excepción en el PP, es su expresión más pura: todo marketing, cero escrúpulos, corrupción normalizada.
La gestión territorial también merece mención aparte. La respuesta del PP al desafío independentista catalán fue un ejercicio de torpeza política sin paliativos. En lugar de tender puentes y buscar soluciones dialogadas, optaron por la confrontación y la judicialización, alimentando precisamente lo que decían combatir. El resultado: una fractura social que tardará décadas en sanar.
Y qué decir de su gestión de las crisis. Durante la crisis económica de 2008-2014, el PP rescató a los bancos con dinero público mientras desahuciaba a familias. Miles de personas perdieron sus hogares mientras las entidades financieras responsables de la debacle recibían miles de millones de euros. La privatización encubierta de servicios públicos y la desprotección de los más vulnerables completaron un cuadro desolador.
La llegada de Feijóo al liderazgo del PP se vendió como renovación, pero ha resultado ser continuismo con mejor traje. Su gestión como líder de la oposición ha sido un ejercicio de bloqueo institucional y confrontación permanente. La crisis de la DANA en Valencia en 2024 mostró el verdadero rostro del PP autonómico: negligencia criminal en la gestión de alertas, tardanza inexcusable en activar protocolos de emergencia, y después, el cinismo de culpar al gobierno central por sus propios errores. Mazón y su gobierno del PP convirtieron una tragedia natural en un desastre político por incompetencia absoluta, y Feijóo, en lugar de exigir responsabilidades, cerró filas defendiendo lo indefendible.
Y como si la incompetencia no bastara, el PP madrileño de Ayuso ha llevado la guerra contra los derechos reproductivos a un nivel obsceno. La campaña contra el aborto, el acoso a mujeres en clínicas, la obstrucción sistemática al ejercicio de un derecho fundamental... La gestión de la pandemia con miles de ancianos abandonados a su suerte, con el macabro resultado de 7.291 muertos. Todo ello con el silencio cómplice de Feijóo, que prefiere mirar hacia otro lado mientras su partido convierte Madrid en un laboratorio de retroceso en derechos de las mujeres. La supuesta moderación de Feijóo es una farsa: es el mismo PP de siempre, con los mismos vicios, la misma hipocresía y la misma falta de escrúpulos.
El balance es demoledor: el PP ha convertido la política en un negocio para amigos, la administración pública en una red clientelar y la corrupción en un sistema de financiación. No son errores, son decisiones conscientes que han empobrecido a millones mientras enriquecían a unos pocos. Cada vez que el PP habla de regeneración democrática, insulta nuestra inteligencia. Cada vez que se presenta como garante de la economía, escupe sobre quienes perdieron sus empleos, sus casas y su dignidad bajo sus gobiernos. La historia juzgará con dureza a quienes permitieron que un partido condenado judicialmente por corrupción siguiera presentándose como alternativa viable. Porque lo que el PP representa no es conservadurismo legítimo, sino la degeneración absoluta de la función pública. Y eso, sencillamente, no puede volver a gobernar España.
Hola meneantes, escribo esta nota porque utilicé el buscador y no veo ningún meneo en el que se expliquen como Normas de la comunidad el tema de las cookies y el muro de pago, entonces me gustaría preguntaros si tal meneo existe, más que nada para saber cúales son ahora las normas para enviar contenido. En caso de que no exista dicha nota, pues propongo que estaría bien que los admins pongan fijada en la página dicha normativa. Creo que es un tema de máxima importancia en la comunidad puesto que la mayoría de las webs ahora tienen ese aviso de cookies, con lo cual hay un claro cambio de reglas del juego (sin embargo éstas no están aclaradas, cada cual dice una cosa distinta a la hora de votar como muro de pago un envío o no votarlo como tal).
Si habéis tenido discusiones sobre temas de actualidad en estos últimos tiempos (y si estais en menéame asumo que es así) os habréis dado cuenta que el debate ha caido en un momento en el que antes de discutir sobre los hechos hay que hablar sobre lo que son los hechos.
Se aprueba una ley, sale una noticia relacionada con la pandemia, un informe ecónomico. Y el debate no suele ser sobre las consecuencias de la noticia, sino en intentar centrar en lo que se está diciendo.
He leído mucho que hay un problema de comprensión lectora. Pero disiento. No hay un problema de comprensión lectora, porque para poder comprender un texto primero hay que tener la intención de querer entender lo que se nos está diciendo.
El problema es que desde hace años cada vez más personas tiende a opinar sobre los hechos y la realidad no en base a dichos hechos, sino en base a lo que opinamos sobre quien está detrás.
El ejemplo es obvio. Si la derecha dice algo, mucha gente de izquierdas intentará darle la vuelta para que lo dicho o hecho encaje con el prejuicio previo. Y al revés, si la izquierda dice algo, la gente de derechas le dará la vuelta.
Los que son anti UE tenderán a ignorar los hechos para buscar la interpretación peor de leyes y directivas, aunque los propios textos digan lo contrario. Al reves también. Esto se ha visto mucho durante el Brexit.
¿Qué ocurre? Que mucha gente directamente no tiene la intención de querer comprender lo que se dice, la gente quiere retocercer los hechos para que encajen con sus prejuicios. O lo que es aun peor, la gente retuerce los hechos para que encajen con lo que su lider de opinión de referencia le dice que piense. Aunque después todos nos auto engañemos con la idea de que pensamos por nosotros mismos.
Como puse hace unas semanas en una nota, el pensamiento mayoritario actual desde hace unos cuantos años es:
- Van a hacer esto.
- No, mira la ley, no pone eso.
- Eso será tu opinión.
Esta mañana he visto, aquí en nuestra página favorita, el meneo de un “tuit” en el que un sindicato de cuyas siglas prefiero no acordarme llamaba a la huelga a los empleados de un conocido banco español frente a la inminente aplicación de un expediente de regulación de empleo que parece que supondrá el despido de muchas personas.
Cuando veas las barbas del vecino cortar pon las tuyas a remojar.
En el año 1919 tuvo lugar una huelga en Barcelona, la “huelga de La Canadiense”, gracias a la cual se consiguió que por ley la jornada laboral en España estuviese limitada a ocho horas. Este logro fue posible gracias a que personas que trabajaban en empresas distintas a aquella en la que comenzó la huelga se solidarizaron y se unieron a ella entendiendo el conflicto como propio.
Personas que comprendieron que los logros que se alcanzasen serían para toda la clase trabajadora en general y les beneficiarían a ellos también. Y supieron que si se dejaba que las condiciones laborales de los trabajadores se degradasen no haciendo nada por evitarlo, aunque inicialmente fuesen las de otras personas, las consecuencias negativas serían, tarde o temprano, también para ellos mismos.
Y alguno dirá… “¿Y a mí qué me importa la huelga de La Canadiense si a mí me toca trabajar más de ocho horas y a mí esas historietas antiguas no me solucionan nada? ¡Qué tontería!”. Pues sí te importa, porque si trabajas en una fábrica, en un comercio, o en hostelería, por ejemplo, deberías trabajar sólo ocho horas, y si haces más es porque se están aprovechando y están abusando de ti, y además es ilegal y denunciable, y va en contra del interés general. Interés general que en 1919 sí defendían los trabajadores, no como ahora.
Ojeando los comentarios del meneo del “tuit” de la huelga esta mañana he visto con cierta tristeza, aunque sin demasiada sorpresa, porque a estas cosas ya estamos todos desgraciadamente acostumbrados, bastantes frases, para mi gusto demasiadas, cuyo mensaje se podría sintetizar en una sola: “Que se jodan”.
¿Que se joda quién? ¿Los trabajadores de una empresa de tu propio país a quienes van a despedir?
O más concretamente, ¿Los trabajadores de un banco? ¿Porque vendieron preferentes a los clientes? Los trabajadores vendieron preferentes porque tuvieron que tragar esa mierda para conservar su trabajo igual que tragas mierda tú cuando haces jornadas de más de ocho horas, o tienes que pasar por el aro con los caprichos de tu jefe tarado, o en lugar de tener un mes de vacaciones que te corresponde tienes solamente quince días, o una semana, si es que los tienes. Por eso los trabajadores vendieron preferentes, porque están en la misma mierda que tú.
¿Que se jodan porque trabajan bien vestidos y solo por las mañanas cobrando "un buen sueldo" sin currar ni sábados ni domingos? Es a lo que deberías aspirar tú, y no desear que otros estén peor de lo que están porque así lo estás tú, porque eso no es justicia, eso es mezquindad.
Los que dicen “que se jodan” ante las situaciones laborales desfavorables de los demás creo que se pueden clasificar en tres grandes grupos: Los que se llaman Fabra de apellido, que dicen “que se jodan” con criterio, y creo que queda claro que yo no lo comparto; los que dicen “que se jodan” sin ningún criterio, simplemente porque se regocijan en el mal ajeno y son personas tóxicas y enemigas de los trabajadores, y puede que hasta de sí mismas; y los que dicen “que se jodan” porque ignoran que el individualismo debilita y la unidad hace la fuerza, y que la situación en que están hoy los empleados de este banco puede ser en la que se vean ellos mañana, y entonces otros dirán… “que se jodan”.
Después de este titular nostradámico-pretencioso voy intentar explicar por qué llegué a esta conclusión sin tener poderes adivinatorios ni acceso a los planes de invasión rusos reales.
La guerra no terminará ni con la toma de Kiev, ni de Jarkov, ni de Odesa, ni de ninguna otra gran ciudad, ahora mismo y con la información que tengo a mi alcance el punto estratégico (el corazón por llamarlo de alguna manera) de la defensa Ucrania es una pequeña localidad del centro de Ucrania de poco más de 82.000 habitantes, fundada a principios del siglo XVII y centro de peregrinaje para una rama del judaísmo.
Pues ahí está, un pequeño enclave del que va a depender el futuro cercano de Ucrania, y ahora veremos el porqué.
Vamos a analizar los mapas más importantes (según mi opinión) sobre los actuales avances y cómo llegué a la conclusión que la clave es Uman.
Empecemos con el mapa que está haciendo diariamente Descifrandolaguerra

El cuadrado verde es Uman, el círculo rojo es una columna rusa avanzando por el sur, y si mis cálculos son correctos deberíamos ver en los próximos días una columna rusa avanzar por la zona que apunta la flecha negra hacia el sur.
Uno de los mapas que más difusión tiene es el que hace el ISW

Aquí al igual que en el mapa de descifrandolaguerra vemos el avance desde el sur pero por por ahora sin un avance claro desde el norte, no cambia mucho.
Pero y qué dicen nuestros amigos chinos sobre qué está pasando?

Aquí seguimos viendo ese avance desde el sur y aunque tampoco se percibe un avance desde el norte, ya se ve como se va cerrando el cerco a Kiev, paso previo al avance hacia el sur que pronostico
Bien, pues tanta historia y tantas chorradas para poner 3 mapas y no demostrar nada y.... espera, espera que viene lo más importante ¿qué dicen los rusos de cómo va la guerra?, pues veámoslo:

Aquí se ven las cosas más claras, vemos ese avance desde el sur hacia Pervomais'k (círculo rojo) pero también se indica que comenzó (o va a comenzar) un avance desde el norte hacia Bila Tserkva(flecha negra).
Si los rusos consiguen tomar ese eje Pervomais'k-Uman-Bila Tserkva se realizará el embolsamiento más grande de tropas enemigas desde la 2GM y será el fin de esta guerra, después empezaría un guerra de guerrillas, insurgencia, etc.. como querais llamarla, pero esta 'c'est fini'.
Ucrania antes o después tendrán que mover todas sus fuerzas(y sus reservas) hacia ese eje para intentar conservarlo, especialmente tendrá que proteger Uman, le va la guerra en ello.
Nota 1: También se está realizando un gran embolsamiento en la zona del Donbas pero comparado con el que comento que puede pasar en Uman va a quedar en un juego de niños.
Nota 2: Voy cambiar de palillo que ya está deshecho y pedir otra cerveza al camarero 😄
Pues claro que los fascistas han leído mucho, y han escrito muchísimo, se han hartado de viajar. No esperes que reconozca su condición, eso es impensable, pero amenaza su poder y verás de lo que son capaces, cuando hay un fortuna detrás, parece ser que sus custodios son capaces de hacer cualquier cosa por conservarla, y a las pruebas me remito, y cuanto más poder, mas enmascarados y más peligrosos.
Es muy fácil imaginarse a un fascista asalariado sin educación y violento, nada más lejos de la realidad, los verdaderos fascistas son diametralmente opuestos al modelo establecido, con mucho capital y una extensa lista de tropelías ligada con el máximo orgullo a su prospera estirpe.
El caso de Belchite refleja muy bien lo que digo. Un día después del fallido intento del golpe de Estado y del comienzo de la guerra, Constantino Lafoz Garcés un campesino y otros miembros del partido falangista asesinaron a 400 personas inocentes y desarmadas. Hombre, mujeres y niños, porque los cabecilla del partido lo habían ordenado.
Constantino Lafoz Garcés campesino de 35 años, fue detenido por los leales a la República e interrogado el 7 de septiembre de 1937. Su declaración, que se guarda en el Archivo General de la Guerra Civil Española (Salamanca), es estremecedora. Sostiene que se fusilaron a unas 200 personas en el interior del cementerio ―y otras 200 fuera―, civiles todos, de los que él mismo mató a 50 hombres y cinco mujeres, tal y como le ordenaron los jefes de la Falange. Lafoz detalló que las tropas que defendían el pueblo incluían a unos 100 falangistas, 150 miembros de Acción Ciudadana y un centenar de requetés. Sus jefes se llamaban Miguel Salas, don Antonio (registrador de la propiedad) y el requeté Narciso Garreta.
¿Y quiénes eran? El testimonio de Constantino Lafoz no deja lugar a dudas. Da nombres y motes de las víctimas y relata que fusilaron, en grupos de 20 personas, a los hermanos Sargantanas, al Hojalatero, al Listero, al Alpargatero, al Sopas, a Carruela, a Simón Pedro Juan y a una hija de este, a la Pascualota o a las Muñecas... Antes, según Lafoz, fueron azotados “para sacarles declaración”.
La moraleja de está historia, es que los fascistas poderosos, son fascistas para proteger su capital, se inventaron todo solo para proteger sus posesiones, los comunistas come niños, los judios y los protocolos de zion, toda esa mierda adornada con el pensamiento de Pemán, aquél que dijo las palabras premonitorias antes del genocidio. "Limpiad esta tierra de las hordas sin Patria y sin Dios". Justo, las entelequías que usan para el control social del proletariado menos educado, lo dicen bien alto, el que quiera vivir, debe subordinarse a nuestra voluntad. Ahh que pensabais que la guerra empezó por el asesinato de Calvo Sotelo¿Quién era Calvo Sotelo? No era nadie, totalmente desconocido, eso fue una vulgar excusa, no querían que se supiera que era por tierras, el verdadero motivo del golpe de Estado fue la reforma agraria que había iniciado la república, iba a devolver al campesinado las tierras ancestrales que fueron robadas en el feudalismo, expropiado a los grandes terratenientes, como los Alba u otros que ya conocéis. O pensais que el regalo que le hicieron a Franco fue gratis, toda la zona donde está Xanadu es de su propiedad, le pagaron por su servicio, vamos parece ser que solo les importa el poder que da el dinero, el resto es sacrificable, mandaron a otros a hacer el trabajo sucio, mientras que ellos luego lo negaron, imaginaros 500 personas menos sin documentar, te puedes quedar con todo lo que poseerán, tierras, bienes inmobiliarios..etc, ¿quién te lo iba a recriminar?.¿quién se iba a jugar la vida? Pero seguro que Constantino Lafoz Garcés no saco el mismo provecho que los gerifaltes de falange, y es que son muy inteligentes, tanto casi como avariciosos, venden lo que sea por un poco de capital, ideologías inclusive, solo hay que recordar como ellos mismos por unas promesas de millones acabaron con el movimiento, de los 400 diputados de las cortes franquistas, 350 dijeron que a la mierda, que el franquismo muriera con el dictador y sálvese quien puede llevando lo que pille, aunque hubo 50 que no les gusto el giro de los acontecimientos, entre ellos Blas Piñar, todavía recuerdo su cara, era un mapa. Esos 50 traicionados querían un franquismo orgulloso ante el mundo, poder demostrar lo poderosos que fueron, pensaban que podrían borrar lo que hicieron, y aunque lo borraron de la historia, lo borraron de los libros, y lo borraron de las mentes, jamás podrán soñar con borrarlo de los corazones.
Hoy se ha sabido que los abuelos de Joan Manuel Serrat, fueron asesinado por los falangistas en Belchite, descansan en la fosa del cementerio con otras 200 personas.
Por estas y otras razones, jamás acepto ninguna autoridad por muy respetable que sea, si no está respaldada por la razón y el sentido común.
J. J. Abrams es un excelente director de cine que hace películas que no cuentan nada. Saltó a la fama principalmente por la serie "Perdidos" (Lost) y más recientemente conocido por películas como “El despertar de la Fuerza”, que dio inicio a la nueva saga de Star Wars. Sus producciones se caracterizan por una sublime puesta en escena a nivel artístico y técnico que conforman obras sorprendentemente vacías de contenido.
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Todas sus creaciones cuentan con una premisa intrigante, mezcolanza de géneros y grandes ideas de otros autores que crean una expectativa enorme. Es un gigantesco envoltorio de regalo que te mantiene entretenido quitando capas y capas y capas de papel, hasta que al desenrollar la última descubres con asombro que no hay nada dentro. No es que sus obras sean mediocres, no lo son, es que son un engaño, con todas sus letras y en el sentido más literal.
Si bien el cine malo siempre ha existido, esto es algo un poco distinto. Se trata de la creación de fórmulas de laboratorio, minuciosamente estudiadas, para aportar los ingredientes necesarios que hacen que se conforme una apariencia de (buena) película, sin que ésta lo sea realmente.
Su cine contiene secuencias estéticamente atractivas y bien orquestadas que avivan terriblemente el interés, pero que no tienen relación con ningún hilo argumental. Son gajos inconexos. Una especie de collage de distintas influencias creativas que tratan de emular una cierta sensación en el espectador.
Esta tendencia ha tenido mucho éxito y ha contagiado a una generación de directores y productores de cine y de series de televisión que se han subido al carro entusiasmados. Algunos autores han llevado esta práctica al culmen del oficio con una sofisticación sorprendente. Lo novedoso es que han conseguido generar una industria en torno a esta idea, y hasta fans.
Ahora están por todas partes, elevados por la crítica mainstream y por sus leales seguidores. Todos estos directores, guionistas y productores están encantados de conocerse. Han pensado: ¿para qué vamos a hacer cine, cuando podemos hacer la “experiencia del cine”? Una mezcla de nostalgia y postureo que no termina de ser entretenimiento. Son spots publicitarios, son vivencias fugaces, eventos. Son trailers de cine infinitos.
Es mejor parecer que ser ¿no es genial? Desde luego les sale rentable, tienen más visibilidad que nunca y quitan de en medio, con más fuerza si cabe, a creadores que sí tienen algo que contar.
En los últimos meses estoy viendo un cambio preocupante en varias empresas con las que trato: están intentando eliminar a sus distribuidores para gestionar directamente al cliente. Sobre el papel suena eficiente; en la práctica, el servicio empeora y deja a muchos profesionales en la estacada. Comparto dos ejemplos recientes.
El primero es Autodesk, desarrolladora de software CAD. En mi empresa tenemos muchas licencias suyas, aunque ya hemos sustituido varias por alternativas menos restrictivas. Hasta hace poco gestionábamos todo a través de un distribuidor (NTI), que nos asesoraba, nos ofrecía opciones y daba un soporte más ágil que el fabricante. Sin embargo, Autodesk ha decidido eliminar ese canal: ya no podemos pagar al distribuidor, solo directamente a ellos, y además han activado por defecto la autorrenovación de las licencias. Si te despistas, renuevas sin querer. Si quieres negociar, no puedes. Y si necesitas comparar con otros productos del mercado, el fabricante no va a ser precisamente objetivo.
Hoy me ha pasado algo similar con Vodafone. Durante años hemos gestionado nuestras líneas móviles a través de un distribuidor local, Firmatel, que conocía nuestras necesidades y defendía nuestros intereses ante Vodafone. De un día para otro, Vodafone ha rescindido su contrato y los comerciales se han quedado sin acceso a las herramientas. Ahora nos obligan a tratar directamente con ellos. ¿Resultado? Perdemos a quien velaba por nosotros y ganamos un interlocutor que, lógicamente, responde antes a la compañía que al cliente.
Extraoficialmente se comenta que Telefónica prepara un gran ERE de cara a una posible compra de Vodafone, y que este recorte de distribuidores forma parte de una estrategia para centralizar la venta. No sé si será cierto, pero sí sé que detrás hay personas que se quedan sin trabajo y clientes que perdemos opciones.
Si esta tendencia continúa, las empresas medianas y los consumidores en general lo vamos a tener cada vez más difícil para recibir un servicio personalizado y para comparar alternativas reales. La desaparición de distribuidores independientes no es solo un cambio organizativo: es una pérdida para el consumidor y para el mercado
menéame