Durante 40 años, el régimen de Franco se obsesionó hasta el ridículo con tapar el cuerpo femenino. El libro 'La censura franquista en el cartel de cine (Notorius ediciones) recopila cientos de ejemplos.
#14:
Doy fe porque lo viví. Una de las facetas más característica de los años de la postguerra española fue aquel desmesurado afán de las autoridades por "reprimir hasta el más mínimo asomo de inmoralidad pública". En aquellos tiempos el régimen dictaban los “reglamentos de decencia” y prohibía las faldas y mangas cortas, así como los escotes en las iglesias y en las playas había que permanecer vestido ya que si te quedabas en traje de baño antes del momento preciso de entrar al agua podías ser multado.
También se suprimieron los concursos de belleza femenina bajo la excusa de que “exaltaban desmesuradamente los componentes físicos de la mujer” y se controlaba a la prensa, las publicaciones y la radio. Además existía otra censura, acaso más rigurosa en materia cinematográfica y teatral que facultaba a cualquier autoridad local, del ramo que fuese, para prohibir la representación de una obra en el territorio de su potestad. Para poder estrenar la misma se exigía la presentación del libreto y la de todos y cada uno de los figurines del vestuario. El censor, después de asistir al ensayo general, formulaba inapelablemente sus observaciones sobre faldas, escotes y demás pormenores, y si una obra, por ejemplo, tenía una acotación de “se besan apasionadamente“, este censor podía suprimir el término “apasionadamente” del libreto. Al final como dice #11 las cosas llegaron a extremos tan ridículos como que en aquella película llamada “Mogambo” una pareja de enamorados fue convertida en hermanos, lo cual-por cierto- no ayudaba mucho a entender “la relación entre los protagonistas“
#5:
Deberían obligar leer este artículos a las chicas de Generaciones que se sacaron hace poco una foto en tirantes con la foto del Pollo. O como diría un auténtico facha, a esas putas.
Deberían obligar leer este artículos a las chicas de Generaciones que se sacaron hace poco una foto en tirantes con la foto del Pollo. O como diría un auténtico facha, a esas putas.
Siempre he escuchado obnubilado la historia de mi padre de cuando se fue con los colegas de fin de semana a Francia para ver pelis cerdas y acabaron en un espectáculo en el que una oronda francesita se masturbaba con una botella de champagne.
Doy fe porque lo viví. Una de las facetas más característica de los años de la postguerra española fue aquel desmesurado afán de las autoridades por "reprimir hasta el más mínimo asomo de inmoralidad pública". En aquellos tiempos el régimen dictaban los “reglamentos de decencia” y prohibía las faldas y mangas cortas, así como los escotes en las iglesias y en las playas había que permanecer vestido ya que si te quedabas en traje de baño antes del momento preciso de entrar al agua podías ser multado.
También se suprimieron los concursos de belleza femenina bajo la excusa de que “exaltaban desmesuradamente los componentes físicos de la mujer” y se controlaba a la prensa, las publicaciones y la radio. Además existía otra censura, acaso más rigurosa en materia cinematográfica y teatral que facultaba a cualquier autoridad local, del ramo que fuese, para prohibir la representación de una obra en el territorio de su potestad. Para poder estrenar la misma se exigía la presentación del libreto y la de todos y cada uno de los figurines del vestuario. El censor, después de asistir al ensayo general, formulaba inapelablemente sus observaciones sobre faldas, escotes y demás pormenores, y si una obra, por ejemplo, tenía una acotación de “se besan apasionadamente“, este censor podía suprimir el término “apasionadamente” del libreto. Al final como dice #11 las cosas llegaron a extremos tan ridículos como que en aquella película llamada “Mogambo” una pareja de enamorados fue convertida en hermanos, lo cual-por cierto- no ayudaba mucho a entender “la relación entre los protagonistas“
#2 La Montiel era el no va más del erotismo y la belleza en los años 50. #1#10 En los años 50 y en casi todos los 60 la pornografía "pública" era prácticamente inexistente en todos los países: no había revistas en lo quioscos ni películas en los cines. Lo de ir a Perpignan o San Juan de Luz fue en los últimos años 60 y en los 70; pero nada de lo que ahora se entiende por pornografía: eran películas con desnudos y escenas de sexo que podrían aparecer en la tele los sábados a las 4 de la tarde.
Lo que sí circulaba en todos los países (incluso en España) eran revistas semiclandestinas con fotografías bastante inocentes: http://altfoto.com/2012/03/la-proto-pornografia-de-los-anos-50
Comentarios
Jajaja, en esa época, quien quería ver porno tenía que ir a Francia.
Que estúpida obsesión por tapar las peras. Sería para que el populacho no las confundiera con manzanas...
Muere una mujer, normal si la mutilan así...
(Joder con la Montiel).
Yo creo que más que censura es un intento de agradar al amo y darles a las mujerzuelas ese look Opus Dei que tan cachondo le ponía.
Pues tenía mérito con los medios de la época, casi no se nota
Deberían obligar leer este artículos a las chicas de Generaciones que se sacaron hace poco una foto en tirantes con la foto del Pollo. O como diría un auténtico facha, a esas putas.
#4 Si hubiera caído en esa época la que restauró el Cristo de Borja otro gallo cantaría
#1 ¿no podían usar un proxie?
Con lo bonito que es...
#1 ¿porno? Más bien quien quería ver una teta.
Siempre he escuchado obnubilado la historia de mi padre de cuando se fue con los colegas de fin de semana a Francia para ver pelis cerdas y acabaron en un espectáculo en el que una oronda francesita se masturbaba con una botella de champagne.
Eran tan chapuceros que en el doblaje de Mogambo, para enmascarar un adulterio, convirtieron un matrimonio en incesto: http://guionoriginal.blogspot.com.es/2011/03/mogambo-la-censura-prefirio-el-incesto.html
Mojigatos que eran. Luego son los peores.
#1 En esta son los franceses los que baja a la Junquera para probar cacho.
Doy fe porque lo viví. Una de las facetas más característica de los años de la postguerra española fue aquel desmesurado afán de las autoridades por "reprimir hasta el más mínimo asomo de inmoralidad pública". En aquellos tiempos el régimen dictaban los “reglamentos de decencia” y prohibía las faldas y mangas cortas, así como los escotes en las iglesias y en las playas había que permanecer vestido ya que si te quedabas en traje de baño antes del momento preciso de entrar al agua podías ser multado.
También se suprimieron los concursos de belleza femenina bajo la excusa de que “exaltaban desmesuradamente los componentes físicos de la mujer” y se controlaba a la prensa, las publicaciones y la radio. Además existía otra censura, acaso más rigurosa en materia cinematográfica y teatral que facultaba a cualquier autoridad local, del ramo que fuese, para prohibir la representación de una obra en el territorio de su potestad. Para poder estrenar la misma se exigía la presentación del libreto y la de todos y cada uno de los figurines del vestuario. El censor, después de asistir al ensayo general, formulaba inapelablemente sus observaciones sobre faldas, escotes y demás pormenores, y si una obra, por ejemplo, tenía una acotación de “se besan apasionadamente“, este censor podía suprimir el término “apasionadamente” del libreto. Al final como dice #11 las cosas llegaron a extremos tan ridículos como que en aquella película llamada “Mogambo” una pareja de enamorados fue convertida en hermanos, lo cual-por cierto- no ayudaba mucho a entender “la relación entre los protagonistas“
El gobierno actual, si pudiera, lo volvería a hacer
#15 Ya lo hace, de otra forma pero sigue haciéndolo.
Pero vaya nivelazo de Photoshop que tenían los chicos de Fraga, mejor que la Gaceta hoy en día
y todo eso sin photoshop hahahahaha !!!! que grandes trabajos mas absurdos
Relacionada:
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elmundo.es#2 La Montiel era el no va más del erotismo y la belleza en los años 50.
#1 #10 En los años 50 y en casi todos los 60 la pornografía "pública" era prácticamente inexistente en todos los países: no había revistas en lo quioscos ni películas en los cines. Lo de ir a Perpignan o San Juan de Luz fue en los últimos años 60 y en los 70; pero nada de lo que ahora se entiende por pornografía: eran películas con desnudos y escenas de sexo que podrían aparecer en la tele los sábados a las 4 de la tarde.
Lo que sí circulaba en todos los países (incluso en España) eran revistas semiclandestinas con fotografías bastante inocentes: http://altfoto.com/2012/03/la-proto-pornografia-de-los-anos-50
Próximamente en sus pantallas
#20 La proto-pornografía de los años ’50
La proto-pornografía de los años ’50
altfoto.comAva Gardner...
Si esto es lo que hacían con las fotos, que no harían con los textos!